Toda una vida sin ti

Mi vida sin conocerte

Desperté por la mañana y miré a cada centímetro del lugar en donde estaba, la cama era inmensa, el cuarto también, me levanté de la cama y miré a un lado sorprendida, había una chica de espaldas durmiendo junto a mi, era de cabellos rubios, en ese momento caí en cuenta que las cosas habían cambiado, tomé mi móvil y vi el día y la hora, era el día de mi cumpleaños 33, tenía un montón de mensajes y parece que me había divertido anoche.

Me metí al baño y me di una ducha, entre al ropero, era gigante, me puse una camisa y un pantalón, toda ropa ligera, salí de la habitación y caminé por cada rincón del lugar, cuando salí a la terraza caí sentada en el gran sofá, de repente vi pasar toda mi vida ante mis ojos, miré al cielo y suspiré, esta era mi vida sin haber conocido a Tiffany Hwang.

Di una media sonrisa y luego metí la mano por un lado del sofá, saque una cajetilla de cigarrillos, dentro habían unos cuantos de ellos y un encendedor, encendí uno sin problemas y di la primera calada, se sentía extraño pero familiar, desde hace años que fumaba y no era un problema, no era un vicio, solo era algo más que me relajaba.

-porque no estabas en la cama?- no miré a la chica, ella se acercó sola a mi, tenía puesta una de mis camisas y al parecer nada más que eso.

-queria salir por un poco de aire- se abrió de piernas y se sentó en mi regazo, no me parecía indiferente, creo que era una chica que venía seguido a pasar la noche conmigo.

-me daré un baño y si no te importa me prepararé un rico desayuno, tengo un compromiso y no alcanzare a desayunar después si me voy- aún me sentía perturbada por todos los nuevos recuerdos, sentía que era una mezcla de ambas vidas, podía recordar todo lo que viví antes y todo lo que e vivido ahora sin Tiffany.

-la cocina es toda tuya- ella tomó mi cigarrillo y le dio una calada, luego me lo devolvió y se levantó de mi regazo sonriente, movía sus caderas llamando mi atención, no negaba que era una chica hermosa y muy sexy.

-quieres algo de comer?- negué mirándola, ella se inclinó mostrándome sus lindos pechos, al parecer no tenía ningún tipo de pudor conmigo.

-no tengo apetito, ve tranquila- ella me asintió y luego salió de mi vista, me volví a relajar en mi lugar y di otra calada a mi cigarrillo, no sabía porque, pero sentía que a pesar de que Tiffany había vivido yo no era feliz, aún ahora no parecía tener emociones.

-yuri, buen día- no me giré al escuchar ese nombre, no sabía si aún me sentía molesta con ella, eran sentimientos encontrados.

-seran buenos para ti- al parecer a mi amiga no le gustaba para nada hyuna.

-que te trae por aquí?- seguí fumando mi cigarrillo hasta llegar a la colilla.

-desayunaste?- ella se paró en frente de mi, se veía tal cual como aquella vez que la vi con Jessica después de tantos años, radiante, aunque parecía molesta conmigo.

-aún no, porque?- después de ese día que cambie le envié un mensaje para que viniera a verme.

-Jessica quiere que vayas a desayunar- le dije que me iría al extranjero, se molestó conmigo, pero lo aceptó, me deseó lo mejor del mundo.

-aun sigues molesta conmigo?- no la volví a ver hasta que volví a la ciudad, aunque mantuvimos comunicación, llamadas, mensajes, siguió siendo mi amiga a la distancia.

-deberia no estarlo? Nos dejaste plantadas- fueron al rededor de 7 años y cuando volví seguimos siendo tan buenas amigas como siempre, algo que siempre espere en la otra vida, que ella estuviera para mi en las malas.