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Damira corre hacia valentina con un cuchillo, mi hembra con una su puño se estampa en su boca rompiéndole los labios que cae, no tiene contemplación, la jala del cabello, no le da tiempo, de que se vuelva serpientes, la lleva hasta la trituradora, Niko tiene agarrando al vampiro imbécil junto con Karin, los demás lacayos están esperando ordenes pero hemos hecho una masacre o se une o tendrán el mismo destino que se arrodillan.

Soy tu puto rey.

—Te regrese a la vida Arion, por mi estas vivo no por esta perra —los grito de Damira son cantos...

Camino bailando al son de sus reclamos, mi hembra rueda los ojos, desesperada por matarla tan toxica mi mujer, le indico que lo ya, pongo mis manos atrás como buen niño.

Mete sus manos en la trituradora, ella grita desgarrándose la misma alma, Víctor pide clemencia por ella, demasiado tarde cabron, te has cogido a mi hembra.

—Maldito Arion —sigue gritando.

—Cariño ya de una vez no —ahora me puse impaciente.

Ella me sonríe y no duda en meter su rostro ella trata de defenderse como puede, sin manos será más difícil, cuando mi toxica le tiene ganas, creyendo que mis salidas es porque me la estoy cogiendo. Y es cuando el tronido del cráneo me estremece la veo como la sangre de Damira chaspea su rostro, haciendo que sus ojos azules se vean más intensos, Maldita bruja ya la tengo dura.

—bien ahora amarren a la basura y déjenme con el —ordeno.

Lo hacen crucificándolo, me encanta verlo esa manera, me acerco mirándolo desde hace años quería hacerlo Víctor Trasvilla heredero. Lo que queda de esa cosa.

—No te tardes mucho quiero tomarme unas cervezas o no Karin y una hembra en cada lado. —el cambia formas solo le interesa insertar la verga.

Veo a mi cachorra como si me leyera los pensamientos y con sus putos ojos me dice que no es el único.

—Bien ya que se ha ido idiota, cariño puedes esperar afuera —dijo tan amable que hasta yo me la compro.

—No —toma lugar en una de las sillas.

—Bien, ella manda como vez —miro al vampiro.

—Morirás Arion

—Otra vez, maldición ya no está Damira, fue un grave error traerme, pero en fin por algo lo hizo me perdería el crecimiento de mi hijo, digno sucesor, tanto que te follabas a mi mujer ni la pudiste preñar sabes por qué —abofeteo sus mejillas —Porque ella es mi obsequio mi prometida no es así cariño.

—Idiota —responde ella.

—Vez cuanto nos amamos, y no solo eso está preñada de nuevo, mi verga la dejo así cargada con mi cría. —Veo a mi mujer — ¿Qué te gustaría hacer con él? —preguntó.

—Destriparlo se lo merece triturarlo hasta que agonice y darle las vísceras a los animales.

—Perra —le grita.

—Más respeto a la madre de mis hijos.

— ¿hijos? No sabe como gemía tu perra como la abría y ella insertada en mi verga.

—Fingía Víctor —se pone de pie —es que los hombres solo piensan con la verga, crees que sentiría algo por ti, un traidor.

—Te sale muy bien, no sabes cómo estaba apuntó de ver la cara de tú hijo morir por mi propia mano, tantl que se orino, es una abomi...

—Maldito te confié y traicionas —vuelen alzar su mano la detengo.

Cierro los ojos cuando ella le abre el estómago, es una bruja esta mujer debo tener cuidado.

La abrazo retrocediendo el oscuro trata de controlarse, esta abierto de estómago y es cuestión de que sus órganos salgan y saluden, que asco.

—cariño no te desgastes mejor hagamos algo que le ardera y como su vida se apaga con lo último que vera. —la tomo del mentón llevándola aquella mesa.

Tiro todo y abro su blusa sus pechos grandes rebotan, donde el único espectador es el vampiro.

—Te gusta lo que vez animal.

Continuo dejándose desnuda ella no dice nada al contrario me abraza del cuello, bajando hasta a mamármela maldigo su boca, todo ante nuestro espectador, tomo mi verga masturbado y como chupa con tantas deseos quiere que vea que su único macho que la llena ese soy yo.

La tomo del cabello negro empujando más mi pelvis jadeo como visita ella se atraganta pero me da lucha comiéndose hasta alzo mismo huevos, maldita me voy a correr, no me suelta apretando más con su boca succiona hasta correrme en su boca que la baño toda.

—Es así como te la mamo, lo dudo —demostró

La pongo de pie nalgueando su trasero la subo en la mesa abrirla de piernas comiéndome su sexo que esta delicioso más con ese aroma que desprende ella entre enreda sus dedos en mi cabello, chupo toda jugando con su botan gime enloquecida en celo, no para como su fuente me llena toda la boca, bebiendo su elixir.

Subo jalando de nuevo su cabello beso su boca, apoderándome de ella, la giro quedando con su rostro en la esa gusto enfrente de nuestro espectro.

—Es así como se coge una hembra imbécil —tomo mi verga ella se inclina más.

Empujo adentrando m verga en su interior, me encanta como se siente metérsela, empujo más con fuerza, ellas se sostiene suelta el placer en sus labios, y no pudo más mi lado salvaje responde con su cuerpo, mueve sus cadera con fuerza, sus pechos rebotan y se inclina abrazándome detrás de mí cuello, tomo un de sus pechos sin dejar de follarmela.

—Me encanta, mía —muerdo su oreja sin dejar de moverme —Gime cariño grita como mi verga te hace sentir.

No hay mejor escena como coger ante la vista del vampiro regalándole una buena follada de mi mujer.

Mi legado *Lobos en la Oscuridad*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora