Juego De Gemelos [a.k.a The Matchablossom Trap]

Isla Elba

Kaoru caminaba furiosamente por el pasillo de las habitaciones, así no era exactamente como creyó que sería volver a ver a Kojiro, aunque no debería estar tan sorprendido, siempre estaba con mujeres, a veces más de una a la vez, por supuesto que después de separarse iba a encontrar a la siguiente chica joven e iba a acostarse con ella. Pero saberlo no hacía que doliera menos.

-¡Reki Nanjo! -, gritó cuando encontró el número de su habitación de hotel, pero dos puertas se abrieron y salieron dos adolescentes pelirrojos de ellas. -Perfecto, estoy viendo doble -, dijo deteniéndose abruptamente.

-Yo soy Miya, papá -, dijo el que estaba a su izquierda.

-Miya -, Kaoru lo abrazó al instante durante varios segundos antes de alejarse ligeramente. -Tu cabello -, murmuró antes de mirar a la derecha a su otro hijo extendiendo su brazo para abrazar a ambos. -Chicos, no puedo creer que estén juntos -, los gemelos sonrieron a su padre antes de que él los golpeara en la cabeza con un su abanico a cada uno. -Eso es por engañarme.

-Hey -, dijo una cuarta voz saliendo de la habitación donde estaba Miya. -Me encantaría ver como los golpeas, pero tal vez quieran seguir conversando en un lugar más privado -, suavemente los empujó a todos a la habitación de Reki mirando a ambos lados del pasillo con cautela. -Además, quiero mi zorro de vuelta.

-Es bueno verte Oka -, dijo Kaoru con una sonrisa antes de entrar en la habitación.

-Igualmente -, respondió cerrando la puerta.

Cuando estuvieron adentro los chicos se sentaron en una mesita de centro mientras su padre jugueteaba con su abanico, Oka, mientras tanto, sujetó a Sketchy antes de que intentara atacar a Reki otra vez y lo acarició en sus brazos mientras veía cómo se desarrollaba esa conversación.

-Ustedes -, dijo señalándolos con el abanico. -Me dijeron que su padre sabía que yo estaría aquí. Pero el gorila que encontré en el ascensor no tenía idea de que estábamos en el mismo país, mucho menos en el mismo hotel.

-¿Encontraste a papá? -, preguntó Miya nervioso.

-Si, y créeme, se veía más idiota de lo normal cuando me vió, como si fuera un fantasma -, se sentó en el sofá bruscamente con un fuerte suspiro, se sacó sus lentes y los colocó en la pequeña mesa junto a él. -Necesito una pastilla para mi cabeza -, Miya se levantó en búsqueda de una. -Debí suponer que estaría en los brazos de una pe... de otra persona -, murmuró corrigiendo lo que iba a decir rápidamente.

Oka soltó una pequeña risa ante el obvio desagrado de Kaoru, pero se distrajo por un hombre que entraba en la habitación con una toalla en su hombro y vistiendo nada más que un slip negro con rojo, analizó sin pudor alguno su cuerpo de pies a cabeza deteniéndose en sus ojos negros. Kaoru hizo un ruido de sorpresa al ver al peli naranja.

-Shadow -, llamó sorprendido. -¿Qué haces? -, preguntó, rápidamente se tomó la pastilla que Miya le entregó, su dolor de cabeza solo aumentaba.

-Iré a la piscina ¿Algún problema?.

-Um... No -, dijo Kaoru cubriendo su rostro con una mano para calmarse, todo era demasiado, escuchó a sus hijos reír ante su reacción. -No, solo, ve a divertirte, al menos uno de nosotros lo hará.

-Gracias -, respondió y se giró encontrándose con la mirada atenta, pero despreocupada, de Oka, de repente sintió el peso de llevar poca ropa.

-Hola ¿Quién eres? -, preguntó Oka en italiano con una sonrisa tranquila.

-Um.... -, balbuceó Shadow antes de reaccionar. -P-Perdón, no hablo italiano -, dijo en inglés sintiendo sus mejillas ligeramente más calientes.