Las creppypastas son historias de terror que te hacen pensar que son reales, te hacen dudar si enserio pueden existir personas así
Y Aquí te estaré compilando varías de las Creppypastas más famosas... De las más aterradoras a las más macabras
QUE...
Cuando era pequeño, las dos cosas que más amaba en la vida eran Godzilla y los juegos de NES. Así que, naturalmente, cuando salió Godzilla: Monster of Monsters, fue como un sueño hecho realidad. Bueno, casi. En resumen, la mayor parte del juego giraba en torno a atravesar niveles (muy repetitivos) del espacio exterior mientras aplastabas tanques y aviones, y luego luchabas contra los monstruosos enemigos de Godzilla. En general, fue bastante mediocre, pero en ese entonces no me importaba. Cuando recibí el juego como regalo por mi décimo cumpleaños, lo jugué día y noche, tanto como pude.
Des afortunadamente, había cambiado el juego por Amagon un año después, lo que lamenté mucho cuando descubrí cómo era ese juego. Recientemente, había comprado un nuevo sistema NES y, tras muchas búsquedas y preguntas, mi amigo Billy finalmente logró encontrar una copia de Godzilla: Monster of Monsters.
Estaba emocionado de jugar mi juego favorito de la infancia. Ni siquiera se me ocurrió preguntar dónde lo encontró Billy. También me dio otros juegos como Legend of Zelda, Bomberman y algo estúpido llamado Action 52, pero Godzilla tenía que ser lo primero.
Así que comencé el juego y la nostalgia regresó como un maremoto. El tema musical de 8 bits de Godzilla inundó con orgullo a través de los altavoces y pronto estaba sonriendo como un idiota.
Algunas personas se ríen de mí por jugar juegos tan obsoletos, pero nunca he disfrutado tanto con ningún otro juego que no sea el de NES. Esos juegos de 8 bits me llevan a cuando las cosas eran mucho más simples, más... seguras. Pero después de lo que pasó con este juego, ya no tengo esos sentimientos.
Había olvidado lo rápido que la diversión de romper cosas como Godzilla se desvanecía en los niveles de desplazamiento. El juego te bombardea con balas y cosas que se estrellan contra ti desde todas las direcciones, y eres demasiado grande para evitar la mayoría de ellas. Aunque mi entusiasmo se había agotado un poco, no pasó mucho tiempo antes de que llegara a mi primera batalla de jefe.
Mi primer oponente fue Gezora, un oscuro kaiju calamar que nunca había estado en una película de Godzilla.
Lo más molesto de luchar contra Gezora es que él siempre te hace retroceder en una esquina y comienza a golpearte con su tentáculo, y no puedes moverte hasta que él se suelta de ti. Este movimiento no hace ningún daño, pero puede detenerte hasta que se acabe el tiempo y tengas que empezar la pelea de nuevo, y él recupere algo de salud.
Es tan molesto como parece. Y, por supuesto, lo hizo cuando luché contra él. Solo por alguna razón esto hizo que el juego fallara, porque una vez que comenzó a golpearme, nunca se detuvo. Se supone que el temporizador termina la pelea en unos cuarenta segundos, pero esto duró casi cinco minutos. Después de un tiempo, los gráficos comenzaron a estropearse, con pequeños bloques rojos por todos lados.
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