¡Lili! 리니 - 𝐉𝐧𝐤 - 𝐋𝐥𝐦

𝟎𝟒𝟔

Besos y el chasquido de sus lenguas era lo único que se escuchaba en la habitación. La mayor se saco la polera y su sostén para al segundo volver a devorar los labios de su pequeña.

- La- Lalice~ - Gimió - Duele...

- ¿Dónde? Amor - Le dejó un par de besos por el rostro.

- Aquí... - Se señalo la entrepierna, donde sentía su clítoris palpitar.

Lisa sonrió, acercó sus labios al cuello de la menor y comenzó a morder y a pasar su húmeda lengua, mientras con su diestra acariciaba el clítoris de su pequeña sobre la tela de su braga, mientras Jennie mordía sus labios al ver los rosados pezones de su novia a su alcance.

Continuó bajando, hasta llegar a sus pezones, donde solamente pasó su lengua por uno de ellos, luego se encargaría. Bajó en una hilera de besos, hasta llegar al elástico de la ropa interior.

- S-sácala...

Hizo caso a las órdenes de su novia, saco aquella molesta tela, dejando a la vista su necesitada vagina. Jennie suspiró al sentir el cálido aliento de la pelinegra en su sensible feminidad. Gimió con fuerza cuando lamio toda su entrada para luego meter su conjuntó de nervios a su boca, mientras con su otra mano acariciaba la mojada entrada de su pequeña.

Jennie era un desastre, gemía con fuerza al recibir tantos estímulos a la vez, la cálida boca de su novia devorando su clítoris, mientras metía uno de sus dedos en su cavidad. Sintió el característico cosquilleó en su vientre.

- V-voy agh... L-Lisa~

Gimió cuando Lisa le dio una mordida, mientras metía y sacaba sus dedos.

Entonces, la mayor dejó de chupar y sacó sus dedos del interior de su novia, por lo que la misma se quejó.

- Date vuelta, bebé.

Hizo lo que pidió, abriendo levemente sus piernas y cerrando sus ojos. Jadeó cuando Lisa tomó una de sus nalgas y la apretó, para luego dirigir ambas manos hasta su cintura.

- ¿Lista? - Preguntó, acercando sus rostros para dejarle un par de besos.

- S-si...

Entró lento, para luego quedarse quieta, disfrutando de la sensación del interior de su novia. Cuando Jennie comenzó a mover sus caderas en busca de más contacto, gimiendo bajito, Lisa comenzó un vaivén, al principio lento, luego rápido, sacando su miembro y entrando de una sola estocada. Jennie abrió la boca, soltando gritos de placer al sentirse tan llena, apretando las sabanas y hundiendo su rostro en las mismas.

Chilló cuando la mayor estrelló su palma en su morena piel, para luego tomar ambas nalgas y masajearlas, mientras bombeaba con fuerza en su interior.

Ambas sintieron el orgasmo llegar, por lo que Lisa volteó a su novia para comenzar a devorar sus labios, comenzando una lucha entre sus lenguas y un hilo de saliva escurría por uno de los costados de Jennie. La menor dirigió una mano a su clítoris y comenzó a masturbarse, sintiendo que pronto vendría su preciado orgasmo.

Lisa se corrió dentro de su pequeña, junto con un ronco gemido, mientras los fluidos de Jennie gotearon manchando un poco las sabanas.

Una vez que se compusieron, la pelinegra salió de la menor y se acostó a su lado, por lo que Jennie se acurrucó en su pecho y unos brazos la abrazaron con fuerza.

- Te amo, Lisa.

Lisa ya estaba durmiéndose, aunque llegó a oírle.

- Te amo, Jennie.