Capítulo 3

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Alyssa

Esos ojos...

Esos benditos ojos...

Ya habían pasado 4 días desde que prácticamente hui del parque luego que tuve ese... dejémoslo en incidente.

Dos días y esa mirada todavía no deja de perseguirme. ¿Cómo alguien puede tener unos ojos tan perfectos? ¿No es ilegal?

No he podido volver al parque, por mucho que quiera ir a ese lugar no quiero encontrarme con él.

Si bien ni siquiera lo vi con claridad, se que reconocería esas perfectas gotas de miel que adornaban su rostro en cualquier parte.

Traté de dejar de lado su mirada para concentrarme, debía estudiar para mañana y no podía dejar que un total desconocido ocupara mi mente todo el tiempo.

Como pude terminé de hacer mis cosas y me puse a escribir, sin embargo... absolutamente todos los versos y estrofas me llevaban a él, solamente a él. Me forcé a escribir otra cosa pero fui incapaz de plasmar en aquel papel cualquier cosa que no hiciera alusión a nuestro encuentro o a sus ojos. 

Y volvimos a lo mismo, esos ojos.

Debía salir y despejar mi mente. ¿Por qué me era tan difícil olvidarlo? Solo lo había visto un par de segundos y ya no abandonaba mi mente en ningún momento, siempre que cerraba sus ojos me encontraba esa clara mirada que me había observado tan intensamente y con una preocupación que pensé que nunca nadie me miraría con ella. 

Si, en serio necesitaba despejar mi mente.

Tomé mi teléfono y llamé a la única persona que se que me escucharía, Ava, mi mejor amiga desde que tengo memoria.

- ¿Aly? Una voz cansada y algo agitada se escuchó a penas descolgó el teléfono. eran las 6:00 pm, así que debía haber acabo hace poco su entrenamiento. Era una de las mejores deportistas de la escuela y se esforzaba demasiado por no bajar el nivel. 

-Hola. Contesté - ¿Crees que pueda ir a tu casa hoy? 

-Si, claro. Acabo de terminar de entrenar así que si quieres puedes venir ahora- dijo ya con la respiración algo más calmada. 

-Voy.  dije sin más y colgué el teléfono.

Solo tenía que caminar unas cuantas cuadras para llegar a su casa así que no me demoraría más de 10 minutos. Tomé mi mochila y salí rápidamente tratando de repasar mentalmente todo lo que había estudiado hoy. Sin darme cuenta ya había llegado a su casa así que toqué el timbre y ella me abrió. Estaba con una gran sonrisa en la puerta con sus ojos verdes brillantes y resaltados por su rizado pelo negro azabache le llegaba hasta los hombros.

- ¡Te extrañe tanto! Exclamó mientras dejaba que me envolviera con sus brazos. Le devolví el abrazo mientras me reía por su comentario, nos habíamos visto ayer en el colegio y aún así para ella parecían meses.  

Entramos en la casa y vi como su expresión, antes de alegría pura, tomó un aspecto más serio de lo normal.

-Suéltalo todo, me dijo. Me conocía tan bien que sabía exactamente lo que pasaba aún cuando no había dicho una sola palabra. 

-No pasa nada dije. Sabía que no me creería pero tenía que ganar algo de tiempo ya que aún no sabía como explicárselo todo, es decir, ¿Cómo le explicas a alguien que no puedes olvidar unos ojos que no viste por más de 10 - 15 segundos? 

-Te conozco Aly, se perfectamente que te pasa algo, no tienes porqué mentirme. ¿Lo sabes, verdad?

-Lo sé, lo sé. Dije consciente que no pasaría mucho tiempo hasta que ella descubriera todo. 

-¿Entonces? dijo ya con una notoria curiosidad he incluso algo de impaciencia.

-Pues... todo partió este viernes en la tarde...

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⏰ Última actualización: Feb 19, 2023 ⏰

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