Secretos: 31

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—lo siento…. Ni siquiera la misma Tn se creía a ver pronunciado esas palabras, después de que él la había golpeado y la hubiera traído hasta ahí. Pero aquella frase y ese par de palabras era justamente lo que necesitaba James en ese mismo instante. —de verdad… lo lamento.

—¿tú por qué? Al final y al cabo también estás metida con ese…. Susurró él. Frustrado. De su viejo vaquero sacó unos comprimidos. Se los metió a la boca pasándoselos sin necesidad de líquido. —con ese y con todos los que esa noche humillaron a mi hermana.

James apretó los ojos. Esas pastillas siempre le hacían perder su tranquilidad, lograban po erlo mucho más nervioso d elo que estaba la mayoría del tiempo

—¿sabes…? Tu tienes la culpa de todo esto bonita…. Derribó un par de adornos que se encontraban sobre la mesa

Tn salto en su sitio. —me gustaría mucho ver la cara de Naim cuando vea como follo a su novia

—no ganarás nada. Logró decir ella. A pesar del enorme miedo que la invadía, tuvo un poco de agallas para hablar. De pronto un nudo se le formó en la garganta. —hagas lo que hagas… ella no volverá…

Y entonces recibió un fuerte golpe entre los pómulos. Se hecho para adelante, el cabello le callo sobre la frente mientras lágrimas caían por sus mejillas

—ya se que no regresará. Admitió. —resultas igual de insoportable que el mismo Naim ¿eh? Eso me gusta. Sonrió. Sus ojos se tornaron de un color rojizo. —por eso…. De entre su mochila sacó una cámara de video más o menos vieja. —él podrá  er lo que hacemos…. La encendió y la coloco sobre la mesa, que quedaba directamente fte te a Tn. La enfocaba directo. —y si… le encantará…. Volvió a sonreír, y está vez procedió a quitarse la camisa de un tirón. Tn solo miraba desde atrás… otra vez le dieron ganas de llorar, de correr, de gritar tan fuerte hasta que alguien la escuchara. Prefería mil veces morir, en vez de estar encerrada con él.

James encendió un cigarrillo. El humo salió. Aspiro y luego dejó salir el humo por la boca

—¿quieres?. Le pregunto. —es marihuana…

[…]

“piensa… piensa… vamos… tiene que a ver una sola pista en toda esta historia… un lugar…”

De pronto una idea iluminó su cabeza

—está en la casa del lago. Inquirió. ¿Cómo no lo había pensado antes? Era ese el mismo lugar donde había abusado de Catalina. Y Dios… Dios quiera que no pasara lo mismo con Tn. Libardo lo miró. —iré solo.

—no, mierda… no seas un maldito imbecil

—¡iré solo! No necesito de tu ayuda ni de la ayuda de nadie ¿me entiendes? Todo este jodido problema es mio y nada más que mio. Le grito a Libardo. Cogio sus llaves del auto e intento irse por la puerta principal. Prepotente. Completamente alterado.

—¡que no!. Grito esta vez Libardo, le dio un pequeño empujón. Naim se cabrero más. Le habló de cerca.

—¿te das cuenta que en este preciso momento ese hijo de pura podría estar abusando de Tn?. Le preguntó. La mandíbula empezó a temblar, y sus ojos se hunedecieron tanto que no pudo evitar derramar una lágrima fina. Respiró aire, pero aún así lloró… lloró como nunca.

Cubriéndose el rostro. Quería morir. Morir… morir ya… pero no si antes arrancarle los huevos a ese maldito infeliz. —hasta… hasta podría matarla…. Le dijo con los ojos inchados. En pocos minutos había llorado todo lo que en toda su vida jamás había llorado. Le dolia el alma. El mismo corazón se le partía en dos… no podía consigo mismo.

—ella está bien…

—tu no sabes nada.

—tu tampoco. Le dijo Libardo directo. Entendía perfectamente en que estado estaba su amigo. —y ni tu ni yo lo sabremos si seguimos así ¿ok? ¿te quedo claro? Si te vas solo eres capaz de matar a la primera persona que se interponga en tu camino ¿me oyes? Te conozco. Naim bajo la cabeza, intento no llorar… pero la mente no lo ayudaba en lo absoluto. Trago saliva. —escuchame. Naim levantó la mirada. —tu mismo lo dijiste. Le ánimos Libardo. —James no tiene ni la mas mínima idea de con quienes se ha metido. Naim respiro hondo. Sabía que todo esto se lo merecía de algún modo. De alguna manera tendría que pagar sus pecado. De alguna manera tendría que limpiar su pasado. —y eso lo vamos a demostrar tú y yo.

Espero que les esté gustando mucho con demasiado bye 💛💛💛💛

Secretos (Naim Darrechi y tu) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora