my only exception (Ron Weasley)

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Ron se miraba en el espejo viendo el vestuario que le había escogido George. Se veía... bien.
-Listo?- le preguntó el mismo desde la puerta.

-Estoy nervioso, y si no le gusto?- preguntó el chico aterrado.- No creo poder hacerlo.
-Y como le pediste la cita? Usa esa valentía hoy también.- le sugirió George animándolo.

Al bajar por las escaleras de la madriguera, Fred se encontraba de brazos cruzados.
-Y bien? Me dejarás ir?- le preguntó a lo que el gemelo sonrió.

-No la cagues hermanito.- le dijo a lo que Ron rodó los ojos.- Lo digo en serio, no la fastidies.
-Si, no quiero acabar sin amiga.- le dijo Ginny desde el sofá.

Ron suspiró y a través de la red de polvos flu apareció de nuevo en la tienda de los gemelos. Desde allí se dispuso a caminar hacia el mismo puesto de kebabs.

Avery quien había llegado hacia un rato pues estaba paseando a Zeus notó como el perro empezó a correr en dirección al pelirrojo.
-Mierda, otra vez no.- dijo Ron temiéndose lo peor.

-No, no, Zeus malo! No!- le decía ella mientras miraba como el perro enredaba la correa entre ambos chicos.- Genial.

Ron miró a la chica quien se encontraba avergonzada y algo nerviosa. No evitó sonreír.
-Al parecer no te hace mucho caso...- dijo haciendo que ella lo mirara.

-La verdad es que se vuelve loco contigo, no lo entiendo.- dijo ella intentando separarse.- Lo siento, de nuevo... no debí traerlo.

Ron en ese momento solo podía agradecerle al chucho que los hubiera juntado.
-Tranquila, no... me importa.- dijo mientras el también se separaba.

Avery le mostró una pequeña sonrisa mientras tomaba de nuevo la correa de su perro quien insistía en jugar con el pelirrojo.
-Quieres que lo lleve? No me importa.- le sugirió el a lo que la chica frunció el ceño.
-Seguro?- preguntó ella.

Ron le tomó la correa llegando a juntar sus manos antes de que ella lo dejara y mágicamente Zeus se tranquilizó y dejó que Ron sujetara su correa.

-Wow, cómo?- preguntó ella fascinada.
-Supongamos que soy un tipo de maestro de perros, como te quedas?- bromeó el mientras empezaba a caminar.

La chica se empezó a reír mientras seguía el paso del pelirrojo.
-Entonces tendré que contratarte, maestro.- respondió siguiendo la broma.

Ambos chicos llegaron a una cafetería donde no había demasiada gente. Se sentaron fuera, en una de las mesas que había en la terraza y Zeus, al lado de Ron en todo momento.

-Por cierto, siento de nuevo... por lo del otro día. En serio... Zeus siempre se comporta bien con todos.- dijo ella aún apenada.

Pero Ron solo podría estar más que agradecido. Ese perro había hecho que la conociera, ella era fantástica.
-Tranquila, supongo que todo pasa por algo.- dijo él con una sonrisa.

-Vaya... que tenemos aquí, pero que perro tan bonito! Que raza es?- preguntó una señora de repente junto a un niño, seguramente su nieto.

-Es un chow chow, puede tocarlo si gusta, no muerde.- dijo ella con una sonrisa al ver que el pequeño quería jugar con Zeus.