Capitulo 10: Mi NO primera cita

32 5 1
                                    

(Regresando a la vista de Ilulu)

Mientras buscaba algunos lapiceros y plumones, me envía Shinji un mensaje diciendo que acaba de llegar a la papelería, le contesto que yo apenas llegué y envío una selfie del pasillo en el que me encuentro para que se dirija hacia este. En el pasillo encuentro algunos peluches, entre ellos un conejito demasiado tierno.

-Lo siento pequeñito, no podré llevarte conmigo-digo mientras lo tomo en mis manos del pequeño cuerpo esponjoso

Lo dejo en el estante y me dedico a buscar el material, unos segundos después alguien me enseña al conejito mientras dice:

-Por favor llévame contigo, juro que te seré de gran compañía - dice con una voz terrible

¡Es Shinji!, esto hace que me sienta la chica mas afortunada de todo el universo, se que suena algo absurdo, pero realmente atesoro este momento.

-Aunque quiera no puedo

-¿Por qué no? -pregunta mientras esconde algo detrás de su espalda

-Porque ya tengo demasiados peluches en mi habitación

-Bueno... si es así... yo lo cuidaré por ti, lo llevaré conmigo cuando te vea

Y... entonces se detiene el tiempo por unos segundos

-Ah, ¡cierto!, esto es para ti -me entrega un ramito de flores artificiales

-Wow, muchas gracias, son hermosas -Cuando tomo las flores nuestras manos se rosan y vuelvo a sentir ese calor que recorre por mis mejillas.

Termino de comprar el material y nos dirigimos hacia el estacionamiento, que al parecer fue el mismo en el cual dejó el auto mi padre, mientras vamos en el coche me pregunto si se habrán cruzado.

-¿Sucede algo? - Me cacha aturdida en mis pensamientos

-Solo pensaba en algo

-¿Se puede saber que es eso que te tenía tan entretenida?

-Es solo que... aún no me haz dicho donde iremos a comer

-¡Cierto!, bueno... creo que prefiero que sea una sorpresa

-Está bien

Al entrar al lugar me doy cuenta de que es un restaurante dedicado al kpop, en todas las paredes hay posters de diferentes grupos, la comida es una variedad de fideos y pizza. Toda nuestra estadía en el lugar hablamos de diferentes cosas que nos gustan.

Cuando llegué a casa no podía dejar de pensar en cada momento que pasamos, lo cual pensaba que era un sueño. Antes de dormir me envía una foto del pequeño Bunny (así lo llamamos) y me hace recordar que es real todo lo que está pasando.

Destinado al amorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora