Destinado al amor

Capítulo 29: Te extraño

Yo estaba cumpliendo mis metas

Y él las suyas

Suponía que eso estaba bastante bien, eran cosas que nos hacían sentir bien y felices, pero...el estar lejos de él... no saber de él en días y a veces semanas, ya estaban afectándome, nunca había externado este sentimiento, porque, cada que pensaba en eso llenaba mi agenda o me decía que estaba cumpliendo mi sueño y debía sentirme sumamente feliz. Hasta que, un día saliendo del trabajo hacia casa, me percaté que había puesto nuevos columpios en un pequeño parque, decidí pasar a columpiarme y....entonces...lo extrañé...sentí un vacío y como las lagrimas iban rodando en mis mejillas, quería que estuviese ahí, ver su sonrisa iluminando todo su rostro, pero, sabía que eso no iba a pasar, que eso tendría que pasar dentro de muchísimo tiempo o quizás, nunca.

Sequé mi rostro y me dirige a casa, cuando llegué comenzó a sonar mi tono de llamada, ví que era Upa

-Hey!

-¡Hola!

-Perdón que no te haya llamado antes, es solo que, he estado ocupado, no tuve ni un respiro, pero, dime, ¿cómo va todo? ¿comiste bien?¿Ya estás en casa?

-No te preocupes, yo... entiendo, y sí todo está muy bien -mentí, lo extrañaba y todo se volvía horrible

-Mmmm, debes estar cansada, ¿quieres que te hable después?

-¡NO!, está bien, me relaja hablar contigo, siempre es buen momento para hablar contigo, aunque, me has dicho que no tienes descanso, ¿sería mejor que yo colgara?

-No, no cuelgues, de hecho...te he extrañado demasiado

¿Cómo puede decir eso tan fácil?

No, ¿Cómo puede darle en el clavo?

-Odio esto...-lo dije como un susurro

-¿el que?

-Odio hablar contigo por llamada y no poder tenerte cerca, odio no saber de ti en días, odio extrañarte y que tu también lo hagas, odio tener que preguntarte si quieres descansar y que respondas que todo está bien, cuando ambos sabemos que dentro de poco te quedarás dormido, odio no estar ahí para ti....-al final se quebró mi voz

-Yo también odio esto...-escuché claramente como trataba de aclarar la voz aunque se alejara el teléfono -pero, tú querías que viniese, yo quería quedarme, pero, bueno, como sea, si ambos nos extrañamos de esta manera, me regresaré mañana

-NO, no te vas a regresar, ya estás allá, termina lo que ya comenzaste, y seguramente dentro de poco no estaremos riendo de esto, que valga la pena todo este tiempo que hemos estado separados

-Ok, está bien, pero, en ese caso, trataré de apurarme lo más que pueda, así que, con antelación te pido me disculpes por estar ausente en los siguientes días y también por los anteriores días...Te quiero

-Yo también te quiero