XV.- Amor

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Melissa ayuda a Stiles a que pudiera sentarse con cuida, el castaño sentía su cuerpo arder y doler como nunca pero entendía que era por sus heridas y todo el poder que uso, de hecho le sorprende que aún este con vida.

- ¿Qué tan mal estoy? – preguntó Stiles viendo al doctor Dunbar

- Una contusión ligera, tobillo roto, dos costillas fisuradas, un hombro dislocado y perdiste bastante sangre por las heridas en tu costado y cuello, estoy seguro de que dejarán cicatriz – le informó el hombre con una mueca

- Me imaginaba algo peor la verdad, sabía que de esta batalla no saldría sin cicatrices. Desventaja de no sanar como los demás lobos – dijo Stiles restándole importancia al asunto - ¿Cuándo podré salir de aquí?

- Me gustaría mantenerte dos días en observación y si todo está bien podrás irte para recuperarte en casa

- Les diremos que pasen, han estado muy preocupados por ti – dijo Melissa para después dejar un beso sobre la frente del castaño y salir de la habitación junto con el señor Dunbar

Unos segundo después la puerta fue abierta por ambas manadas, los primeros en llegar al castaño fueron los cachorros y Derek.

- ¡Papá! – gritó Barry abrazando al mayor con cuidado mientras que Oliver tomaba la mano de su padre y la frotaba contra su mejilla

- Estoy bien cachorros, les prometí que jamás los dejaría y planeo cumplir esa promesa – les dijo Stiles con cariño logrando calmar a sus cachorros

- Deberías de tentar a la muerte – le dijo Derek negando con la cabeza para después besar los labios del castaño – No vuelvas a hacer algo así, no sabes lo asustado que estaba

- Lo siento. – alzó su mano hasta acariciar a mejilla del mayo con cariño – Trataré de no hacerte sentir así de nuevo

- Te amo – dijo Derek recargando su cabeza sobre la palma del castaño

- Te amo – le sonrió Stiles

- ¡Al fin! – gritó Oliver haciendo reír a los presentes

- Lamento interrumpir su bello momento queridos alfas pero debo de regañar a mi mejor amigo – dijo Matt acercándose al castaño con una sonrisa bastante tétrica

- Sé que dijiste que era peligroso pero no podía dejarlos morir, no me mates apenas y sobreviví – dijo Stiles colocando sus manos frente a su rostro – Además soy muy bello para morir

- Si claro, sabemos que tu belleza es única peor eres demasiado idiota, quiero enfurecerme contigo pero realmente no puedo porque sé cómo eres – dijo Matt suspirando para después abrazar a su mejor amigo – Por un momento pensé que te perdería, ¿qué haría sin mi mejor amigo?

- Ser más idiota de lo que eres – respondió Stiles con una sonrisa disfrutando del abrazo de Matt

- Voy a ponerme celoso – comentó Caleb aunque se unió al abrazo al igual que Daniel, Sharon y Howard

- Eso es ser una manada – dijo Derek viendo a la manada Mccall y a la suya

- ¿Algún día podremos ser así? – preguntó Isaac con añoranza

- Claro que lo seremos – dijo Derek

- Eso ni se pregunta Issi, espero que algún día la manada Stilinski y la Hale se vuelvan uno – dijo Stiles viendo a Derek con una sonrisa

- Para mi ya somos una manada – dijo Derek sentándose al lado de su castaño aprovechando que los betas se habían separado de él

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Durante esos días quien se quedó con el castaño fue Derek, Oliver y Barry también querían quedarse pero Stiles les dijo que quería que ellos descansaran bien en sus camas y sin ningún problema. Derek ayudaba a diario a Stiles a moverse, comer e incluso ir al baño, su cuerpo aún estaba adolorido así que le dolía hacer muchos movimientos pero a pesar de todo el doctor Dunbar decía que estaba sanando bastante bien.

Al tercer día en el hospital Stiles se encontraba sentado en una silla de ruedas que era empujada por Derek mientras que sus cachorros caminaban a su lado hablando acerca de la escuela y como se la estaban pasando, Stiles los escuchaba con atención amaba ver a sus cachorros tan felices, eso era lo que siempre quiso para ellos.

Cuando llegaron al loft Derek cargó a Stiles dejándolo en el sofá de sala de estar mientras que sus betas cocinaban algo para la pequeña fiesta que iban a tener por su regreso a casa.

- ¡Al fin en casa! De verdad odio los hospitales – dijo Stiles acariciando el cabello de Barry que se encontraba con su cabeza recostada sobre su regazo

- Entonces deja de lastimarte tanto así pasaras menos tiempo en el hospital – le dijo Howard mientras ponía la mesa con ayuda de algunos de los betas de Derek

- Tiene razón pero también sería pedirte lo imposible – se burlo Sharon

- Así soy y no pienso cambiar

- Así te amamos papá – dijo Oliver besando la mejilla del castaño

Derek veía todo con una sonrisa, así es como siempre soñó su manada desde que su familia murió, esta era la manada, la familia que quería. Todo eso era posible por Stiles, era como si todas las personas se reunieran a su alrededor, las atrae con solo ser él sin importar lo mucho que parezca que cambia o su actitud lo haga, sigue atrayendo a todas las personas y las llena de felicidad.

- Te amo – le dijo Derek dejando un beso en la frente de su castaño 

Alfa StilinskiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora