¿Verdades?

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— Eso es lo que hace la gente que se gusta, ¿no? — volvió a repetir, dejándolo con las palabras en la boca

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— Eso es lo que hace la gente que se gusta, ¿no? — volvió a repetir, dejándolo con las palabras en la boca. No sabía como reaccionar ante eso ¿Qué debería de decir ante eso? ¿es una declaración de amor? ¿lo es?. Su cabeza hizo vueltas mientras más pensaba — ¿Amane? ¿Qué sucede? Te quedaste quieto. — dirigió Tsukasa con unas palmaditas en las mejillas ruborizadas del contrario.

— ¿Eh... ? No, no, es sólo que... — se detuvo en un intento de buscar las palabras correctas, no sabía como mencionarlo — ¡Oh! Tranquilo, estar avergonzado es normal. — su peculiar sonrisa apareció en su semblante, mostrando esos resaltantes colmillos en él — Por supuesto que no estoy avergonzado ¿por qué lo estaría? — reprochó un tanto molesto.

— Uhm~ sí claro...  — mencionó con un canto, para después acercarse con rapidez a la mejilla de Amane y darle un pequeño beso. ¡Y de nuevo! ¿acaso quería verlo como un tomate? Ese idiota. Suspiró rendido con el comportamiento de su "gemelo" — Qué no se vuelva una costumbre eso. — Tsukasa sólo rió con aquel comentario.

— ¿No te gustan?. Hace mucho tiempo atras una persona especial para mí solía darme besos en las mejillas, era muy agradable.

— Así que... pensé que a ti te podría agradar. — esta vez su voz fue suave, su mirada conecto hacia la del más alto, que con toda la intriga encima no pudo resistirlo más, sus palabras para cuestionar fueron liberadas, en un intento de saber más de ese azabache de apariencia similar.

— ¿Quién era esa persona? — habló de repente, interrogando al chico enfrente que estaba enfrente de él. Tsukasa por su parte tomó esa pregunta normal, encogió sus hombros como respuesta — No lo sé, no sabría describirla, pero era muy amable, eso era muy característico de él, y bueno... hmm — calló por unos instantes, mientras llevaba su dedo hacia sus belfos, demostrando su esfuerzo por recordar.

— Ya sabes, bueno... es difícil recordar. Me gustaría verlo pero, ni siquiera debe de estar ya en este mundo. — su mirada cayó al terminar de hablar, guiándose al suelo de madera. El silencio abruma el lugar por poco, hasta que Amane decide romperlo, su mano se guió hacia las hebras del más bajo, dando una caricias a estas mismas. Tan suaves para ser de alguien que ya ha muerto, es tan extraño, tan extraño que le agrada.

— Amane... me recuerdas a él, son parecidos. — con tranquilidad se apego a el azabache, acurrucado su cabeza en el pecho de Amane, logrando escuchar los todavía latentes latidos de su corazón con vida, era cómodo.

Siguieron así por poco, hasta que el timbre de la puerta resonó fuertemente por todo el hogar, alguien desesperado parecía ser. Ambos se separaron al unísono, observando extrañados la puerta, Amane dio el primero paso para apartarse de su gemelo. Alejándose para responder.

Se dirigió a la puerta, abriéndola enseguida, logrando que el timbre de la casa dejase de sonar y parara ese escándalo. Mas su mayor sorpresa fue encontrarse con su amigo peli rubio parado enfrente de él, parecía agitado, puesto que su ropa se veía como todo un desastre, sus cabellos alborotados, y aquella respiración intranquila, mientras se ocupaba de tomar aire. Antes de hablar se inclinó, tomando sus rodillas para jadear desgastado, ante eso Amane intento ayudarlo, acercándose hacia Kou.

— ¿Te pasa algo? ¿Quieres pasar? Te traeré un poco de agua. — trató de levantar a su amigo, intentando guiarlo hacia la adentro de su hogar, pero fue detenido — No, está bien Amane, hay algo más importante. Necesito hablar contigo.

Amane lo miró extrañado, una de sus cejas se arqueo, observando como su amigo se enderezaba, manteniendo sus hombros firmes.

— Pero no aquí ¿podemos salir? — comentó a su vez mirando hacia otro lugar, llamando la clara atención del confundido azabache. El cual se giró expectante, visualizando a su similar, Tsukasa parecía normal ante la situación, pero Kou, los ojos con los que le miraba, era de temer. De un segundo a otro, sintió como el de mirada azulada tomaba su brazo, implicando fuerza para jalarlo, con el objetivo de sacarlo de la casa.

Esa fue la detonación, en cuanto Tsukasa notó como aquel chico tomaba a Amane, se encaminó con rapidez hacia los implicados, tomando de igual manera a su hermano, impidiendo que Kou se lo llevara.

— T-Tsukasa... ¿Qué es lo que haces? Sueltame- — calló ahogadamente cuando sintió dolor en su brazo, el que jalaba su gemelo. Qué aunque pareciera sereno, la fuerza que ponía en su extremidad lo contradecía — Suéltalo. — ordenó el Minamoto, dirigiendo una mirada demandante para el contrario.

— No. ¿No pueden simplemente hablar aquí? Tienen algo que esconder ¿no? — contestó firme esta vez. Su semblante tranquilo fue cambiando a uno ligeramente molesto.

Kou soltó una carcajada baja — Gran idiota, aquí el único que esconde cosas eres tú. Aprovechándote de una persona buena y frágil. — su palabras demostraron furia e impotencia. Dejó ir el brazo de Amane, dejándolo libre y lejos de él, inmediatamente fue arrastrado por Tsukasa hacia él mismo.

— De acuerdo... entonces hablaremos aquí.

— Amane, como exorcista no puedo dejar que éste "chico" esté junto a ti. Es peligroso, sé que no es tu hermano, eso explica el por que de tu reacción, hay muchas cosas que no me explico, pero hay que exorcizarlo o sellarlo. — Kou explicó con detenimiento todo. Por su parte Amane, todo lo dicho por su amigo fue como una cubeta de hielo arrojada hacia sí, ¿Cómo se había enterado?, se preguntaba. Aclaró su garganta antes de poder hablar.

Pero antes de que sucediera, la voz de Tsukasa lo interrumpió.

— ¿Exorcista? Entonces eres tú una de esas personas malas. — mencionó y aclaró seguro, observando como el oji azul fruncia su ceño ante ese comentario, que para él era erróneo — Qué cosas dices, el clan Minamoto está para deshacerse de espectros y demonios como lo eres tú.

— Clan Minamoto... — murmuró en bajo Tsukasa, su mirada se vio vacía por unos instantes, en los cuales trataba y luchaba por recordar, aquel nombre hizo que su mente quedara cegada — Ya veo, así que nos conoces. Vamos, ahora necesito que digas como es posible que estés aquí, y de esta forma. — cuestión el chico, tratando de aprovechar en el estado de confusión que estaba el azabache.

— El espejo.

La voz de Amane fue baja, pero ante el silencio, fue escuchado con claridad por los otros — ¿Un... espejo? — las palabras inesperadas tomaron por sorpresa a Kou, el cual con rapidez guió su mirada hacia Amane, que se mantenía quieto en su lugar, su semblante mostraba una tranquilidad que disfrazaba sus sentimientos.

 espejo? — las palabras inesperadas tomaron por sorpresa a Kou, el cual con rapidez guió su mirada hacia Amane, que se mantenía quieto en su lugar, su semblante mostraba una tranquilidad que disfrazaba sus sentimientos

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Bueno no tengo muchas cosas que decir. Sólo quiero aclarar que desde esta actualización me voy a concentrar en ya más en este libro, primeramente porque es el que ya tiene toda la historia hecha, lo único que falta es escribir todo. Como ya he dicho. Pero bien, espero que les haya gustado capítulo 🌙💫✨.

R e f l e j o [Amane x Tsukasa]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora