Una semana para recordar

Un poco de pasado de Diana Aldara

Simpere me pregunte porque le dejava a Pablo que se metiera con migo, podría haberlo dicho a las profesoras pero el miedo pudo conmigo.
Supongo que por eso siempre ayudaba a los demas, me sentía bien y me hacia olvidar lo que me pasaba a mi.
Antes de conocer a Col, unos niños de mi curso se metían conmigo, y yo me aguantaba, me tiraban cosas como todos, y me gritaban "Estate quiera Diana" decían que yo era su diana para practicar su puntería.
Cunado conoci a Col, se cansaron, y dejaron de meterse con los demas, hasta llegamos a perdonarnos, pero nunca hablavamos.
Mis padres se peleavan en casa, mi madre no me quería, decia que le havia estropeado la vida, por lo contrario, mi padre me quería mucho, me enseñaba juegos y llevaba a sitios para que no sufriera tanto con las peleas que tenía con mi madre.
Cuando al fin consiguieron el divorcio, me fui a vivir con mi padre, la enfermedad de mi madre empeoro y la visitamos devence en cuando, aunque ella no era muy agradable.
Conoci a la novia de mi papa, Samanta o Sam, cuando mi madre murió y me encerré en mi cuarto ella me pasaba la comida, juegos, o se ponía al lado de la puerta para hablar y contarme cosas para hacerme reír, y lo conseguía.
Cuando al fin sali, mi papa me pregunto si me quería cambiar de colegio ya que notaba que no estaba cómoda con el que tenia.
Cuando llegue a mi nuevo colegio conocía a Angela y nos hicimos mejores amigas.
Pero nunca olvide a Col, siempre llevaba mi collar, Angela me preguntaba de que era, y yo le decía que era de un amigo, pero nunca de cual.
Los primeros meses lloraba porque extrañava a Col.
Luego comenze a salir y a divertirme.
Defendia a todos, y la mayoría me quería.
Mis estudios mejoraron.
La vida me volvia a sonreír.