𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟏𝟔

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𝐿𝒶 𝓇𝑒𝓂𝑜𝒹𝑒𝓁𝒶𝒸𝒾ó𝓃 𝒹𝑒𝓁 𝒸𝒶𝓈𝓉𝒾𝓁𝓁𝑜

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Era un nuevo día, uno muy bonito a decir verdad. Mark y Cabeza de Nabo ayudaban a Sophie y ____ a sacar la avioneta del castillo

-¡Listo!- gritó Mark, sosteniendo una cuerda con ayuda de Cabeza de Nabo para abrir la boca del castillo

-¡Sostenla ahí!- exclamó Sophie, haciéndole señas desde arriba -Calcifer, ábrela bien

____ ya estaba ahí, esperando a Sophie para empujar la avioneta. A la cuenta de tres comenzaron a empujar, sudando un poco ya que el aparato era increíblemente pesado. Aún así, no se movía, lo que estresó a la joven bastante.

-¡Muévete pedazo de porquería!- exclamó, dándole una patada a la avioneta, ocasionando que esta se encendiera y saliera rápidamente del castillo, casi cayéndole encima a Mark.

Al darse cuenta de la situación, Mark rió a carcajadas, y ____ también aunque al principio pensó que había matado al pequeño. Sophie corrió a traer la escoba para barrer el polvo que se había generado, refunfuñando acerca de porqué limpiar el castillo si era un basurero.

-¡Mark, ven a comer!- exclamó ____ sonriendo al mirar a Mark corriendo por la pradera con Cabeza de Nabo y el perrito 'Heen'

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Todos estaban en la mesa (menos Howl quien no había salido de su cuarto). ____ estaba sentada frente a la bruja del Páramo, sosteniendo la cuchara con comida para ella como si fuera un bebé.

-¡No le des de comer!- reprochó Calcifer -¡Esa mujer es la bruja del Páramo!

-Eso no importa- dijo la chica dulcemente

-¡Además no para de verme!- se quejó el demonio

-Que fuego tan bonito- dijo la bruja sonriendo

De repente, cierto hechicero bajó las escaleras extrañamente de un excelente humor. Al verlo, ____ se levantó de su asiento casi por instinto, mirando al joven a los ojos y sorprendiendo a todos en la mesa. Al darse cuenta de lo sucedido, la joven se sentó ruborizándose de la vergüenza. ¿Por qué rayos se levantó? ¿Que le estaba pasando?

-Howl, buenos días- dijo ella, no viéndolo a los ojos. -Que- que bueno que ya estás mejor- se aclaró la garganta y siguió comiendo incómodamente.

-Buenos días- dijo Howl alegremente, colocando sus manos en sus caderas. No se dio cuenta de que Sophie veía a ____ burlonamente, dándole uno o dos codazos sonriendo.

-Amo Howl ¿Puede quedarse el perrito en el castillo?- preguntó Mark emocionado, viendo al hechicero con ojos de perrito triste

-Vaya, la bruja del Páramo y el perro de Madame Suliman en mi mesa- Howl rió -Calcifer ¿Como pudiste dejarlos entrar?

-¡No fui yo! ¡____ estrelló su avión en el frente y casi me apaga!- se quejó el demonio

Howl se rió sorprendentemente a carcajadas. Ay, que bonita risa tenía, era como escuchar a un ángel riéndose. -Sabía que podrías llegar- dijo mirando a la joven aún avergonzada. Howl fue a donde estaba el enorme hueco ocasionado por el avión, mirando a cabeza de Nabo ahí dijo -Vaya ¿Tu también eres un nuevo miembro de la familia?- sonrió, analizando al espantapájaros-Veo que también eres víctima de un hechizo. Parece que todos en la familia tienen algún problema

-Que hombre tan apuesto- sonrió la bruja del Páramo

-Así es- suspiró ____, apoyando sus codos en la mesa y viendo al muchacho con mirada de tonta enamorada, al darse cuenta de lo que hacía, recobró rápidamente su compostura para que Howl no la viera, pero Sophie, Mark y Calcifer si la vieron. Los tres se miraron a sabiendas, sonriendo burlonamente.

-Tienen mucho trabajo ____ y Sophie- sonrió Howl, dándose la vuelta -¡En marcha!

Sophie y ____ se miraron confundidas, no sabiendo de que rayos estaba hablando el joven.

-¡Vaya, que bueno! ¡Estoy cansado de estar en medio de la nada!- exclamó Mark

-Madame Suliman nos sigue de cerca así qué hay que darnos prisa- explicó Howl, y giró un poco su cabeza para mirar al espantapájaros-Amigo, temo que tu hechizo nos impedirá movernos, tendrás que quedarte abajo

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Mark estaba ayudando a Howl a pintar un símbolo extraño en el suelo. Tenía forma circular y era lo suficientemente grande para que el castillo entrara ahí. Justamente eso le pidió Howl a Calcifer, que lo moviera un poco para que quedara alineado con el símbolo.

Después, adentro de la casa, Howl tomó una tiza e hizo otro símbolo en el suelo de madera. -Ya está- dijo cuando terminó. ____, Sophie, Mark y la bruja estaban sentados en la mesa, no sabiendo que iba a pasar o que rayos estaba haciendo el hechicero.

El mago se dirigió a donde estaba Calcifer, tomándolo y parándose dentro del círculo extraño que había dibujado.

-Sé bueno conmigo- dijo el demonio, un poco nervioso

El hermoso chico levantó su brazo izquierdo y un viento pareció invadir el área. Después, Calcifer explotó, creciendo varias veces su tamaño pintado de varios y amenazantes colores. El círculo en el piso comenzó a brillar y el castillo a cambiar. Las paredes se hicieron más amplias, el desastre en la pared se arregló, habían varios muebles nuevos, y más habitaciones y baños. Los cuatro espectadores miraron asombrados.

Al terminar, el brillo en el suelo disminuyó y Calcifer volvió a su tamaño y color normal.

-He terminado, ya pueden bajarse de la mesa- sonrió Howl

Mark fue el primero en bajarse, completamente emocionado explorado el lugar -¡Es gigante amo Howl y muy bonita!- exclamó

-¡Oh vaya, es maravilloso!- exclamó ____, admirando sus alrededores. Todo era más hermoso, el tapiz en las paredes, la cocina, el suelo ¡hasta la rueda de destinatario era diferente! Al verla tan contenta Howl sonrió, sonrojándose un poco y mirándola con un cariño y afecto que él mismo no terminaba de entender.

Sophie se asomó a la ventana, sorprendiéndose al ver que estaban en su ciudad.

-¡____! ¡Sophie! Vengan- las llamó Howl. Al llegar el mago les enseñó con orgullo las dos nuevas habitaciones, una para cada una. Aunque la de ____ tenía varios regalos envueltos en colorido papel sobre su cama y escritorio.

-No lo entiendo... ¿Por qué?- preguntó Sophie, quien se veía mucho más joven, contemplando su ciudad por la ventana como hipnotizada.

-Merecían un cuarto apropiado. ¿Les gusta?- preguntó el hechicero, un poco nervioso de que no les hubiera gustado

Sophie le dio las gracias serenamente pero ____ estaba encantada con su habitación -¡Oh es preciosa, me encanta! ¡Muchas gracias, Howl!

-Me alegra que te guste- sonrió Howl ruborizándose -También les compre ropa y regalos, pero podemos verlos después. Ven- dijo tomando a la joven de la mano, llevándola a la puerta -Le puse un disco nuevo y otro portal- sonrió, tratando de impresionar a la joven. Cambió los colores a rojo, y al abrir la puerta, la escena más magnífica iluminó los ojos de ____.

𝙴𝚕 𝚌𝚊𝚜𝚝𝚒𝚕𝚕𝚘 𝚟𝚊𝚐𝚊𝚋𝚞𝚗𝚍𝚘; 𝙷𝚘𝚠𝚕 𝚡 𝚛𝚎𝚊𝚍𝚎𝚛Donde viven las historias. Descúbrelo ahora