𝐂𝐚𝐩í𝐭𝐮𝐥𝐨 𝟒

6K 647 13
                                    

𝒞𝒶𝒷𝑒𝓏𝒶 𝒹𝑒 𝒩𝒶𝒷𝑜

✨✨

Las chicas lograron salir de la casa con éxito, ____ tuvo que usar una capucha para que nadie la reconociera y la ahogara de preguntas. Pasaron por la estación de tren, donde un amable hombre les ofreció ayuda pero la negaron cortésmente. Se toparon con un hombre que llevaba una carreta llena de paja, y le preguntaron si podría llevarlas.

-Hay campo atrás, pero ¿A dónde van señoras?- preguntó el hombre

-Vamos un poco más lejos que usted- respondió Sophie

Ambas se subieron a la parte de atrás de la carreta, fue un viaje bastante largo, hasta que por fin el hombre había llegado a su destino y ellas tuvieron que bajarse. Siguieron caminando hasta que vieron una montaña y decidieron subir.

-Es una locura ir allá, señoras. No hay más que brujas y hechiceros

-Lo tendremos en cuenta, gracias- respondió ____ con la voz más vieja que pudo hacer. Siguieron caminando, ya estaban bastante alto y Sophie comenzó a respirar con dificultad.

-Descansemos un poco, Sophie- ____ sugirió, notando que la anciana estaba teniendo problemas

-Si, buena idea- dijo Sophie, sentándose en el frío césped, respirando agitadamente y poniéndose una mano en el pecho, intentando calmar su rápido corazón.

-¿Quieres comer un poco?- preguntó ____, partiendo un poco de pan y queso para las dos

-Si, por favor- dijo Sophie, llevándose un poco de pan a la boca -Con estas piernas nunca llegaremos

-Debí haber traído el bastón de mi padre- ____ suspiró -Al menos no se te han caído los dientes- dijo bromeando

-Si, en eso tienes razón- rió Sophie, admirando la vista, vió un palo alargado en unos arbustos -¡Mira eso! Tal vez ese palo me sirva como bastón!

____ lo vió y se levantó para ir a sacarlo de su prisión con hojas, se acercó y lo tomó con fuerza, jalándolo para que saliera -que palo tan testarudo- se dijo a sí misma -pero no me ganarás- dijo para por fin sacar el palo que resultó ser un espantapájaros

-Un espantapájaros...- dijo ____ viéndolo de arriba a abajo, su cabeza era un nabo, tenía un traje y sombrero y estaba fumando una pipa, era bastante extraño

-Vaya... pero dime ¿Cómo puedes estar parado?- dijo Sophie, acercándose para verlo de cerca -¡Y tu cabeza es un nabo! Odio los nabos desde que era una niña...

-Bueno, al menos ya no estás boca abajo. Hasta luego- se despidió ____ con un pequeño movimiento de mano y se fue con Sophie.

Siguieron avanzando, y entre más alto subían, más frío hacía, y un viento violento las atacaba tratando de despojarlas de sus abrigos.

-Que frío hace- se quejó Sophie y ____ no pudo hacer más que abrazarla, en intentos de transmitirle un poco de calor. -Aún puedo ver la ciudad, no hemos avanzado nada...

Pequeños golpecitos en el suelo parecían seguirlas, se voltearon y ahí estaba el espantapájaros, yendo hacia ellas.

-¡Vete, no queremos que nos sigas!- Sophie le gritó - ¡Seguramente eres víctima de algún hechizo y no queremos nada que ver con brujas o hechiceros!

-Ay, vamos Sophie... tal vez sólo quiere un poco de compañía, no seas tan dura con él.- ____ la regañó

El espantapájaros paró por un momento, y después siguió saltando hacia ellas, Sophie lo vió un poco harta pero se dio cuenta de que el espantapájaros le había traído un bastón. Ella lo tomó y le sonrió

-Justo lo que necesitaba, te lo agradezco. Ahora si puedes hacerme otro favor ¿Dónde podemos dormir?- le sonrió y el espantapájaros se fue a buscar un lugar, ____ lo estaba siguiendo pero Sophie no

-¿No vamos a seguirlo?

-No, solo quería deshacerme de él. La vejez me ha hecho intuitiva- sonrió satisfecha

-Eres terrible- suspiró ____

Siguieron caminando y ya era casi de noche, debían encontrar un lugar donde dormir pronto. Un sonido las alertó y al ver al cielo había una enorme nave de guerra. Lo ignoraron y siguieron su camino.

-Esto es ridículo, nunca pensé que moverse de viejo sería tan difícil- Sophie se quejó de nuevo, sentándose un momento para descansar.

-Vamos Sophie, creo que veo una fogata por allá. Tal vez podamos quedarnos allí esta noche- dijo ____ viendo a la distancia y ayudando a la vieja Sophie a levantarse.

𝙴𝚕 𝚌𝚊𝚜𝚝𝚒𝚕𝚕𝚘 𝚟𝚊𝚐𝚊𝚋𝚞𝚗𝚍𝚘; 𝙷𝚘𝚠𝚕 𝚡 𝚛𝚎𝚊𝚍𝚎𝚛Donde viven las historias. Descúbrelo ahora