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Mala idea; pésima, horrible, asquerosa. 

Apenas se levanto sintió como si algo le oprimiera el pecho y sabia que debió haber ido a ver al menor apenas salió del departamento de KyungSoo. Tomo lo primero que encontró en su armario y salió corriendo a la principal en busca de un taxi. Después de unos minutos logra obtener uno y le indica la dirección, el conductor asiente y se ponen en marcha.

Podría jurar que cada minuto se le estaba haciendo eterno, aprovecho eso y le escribió un mensaje a SeHun para que lo alcanzara en el departamento del más bajo. Nunca se sabe que podría suceder y este tenía un auto. Dios, rogaba que solo sean paranoias suyas y que su corazonada haya sido una completa bobada. 

Después de lo que pareció un siglo llegaron, le pago al taxi y salió corriendo hacia el departamento de BaekHyun. Ni siquiera se molesto en tomar el ascensor y uso las escaleras. No se sentía ni cansado, todo lo que sentía era una abrumadora sensación de encontrar a su pareja y estrecharlo entre sus brazos. 

Llegando a su piso empezó a tocar la puerta lo más calmado que podía, pero no obtenía una respuesta. Estuvo así un rato hasta que recordó tener la llave de repuesto. Lo primero que vio al departamento es que pareciera que un huracán había pasado por ahí: todo estaba regado, hojas rotas e incluso vasija. Reviso el lugar y el ver unas gotas de sangre que iban como un camino hasta la habitación del más bajo termino por confirmar su mal presagio.

Corrió el pequeño tramo que separaba la entrada del cuarto ajeno y entro de lleno. Su amado de encontraba debajo de las cobijas, lo único que se podía ver era parte de su cabellera. Se acerco a la cama y empezó a llamarlo, al tampoco obtener respuesta le quito la cobija. Tuvo que hacer uso de toda la fuerza que le quedaban en las piernas para no caer de lleno en el piso.

BaekHyun se encontraba con ropa floja, pantalón y camiseta, estaba con el cabello hecho un lio, pero lo que más le preocupo era el hecho de que habían pequeñas manchas rojas en estas prendas, parte de la cama y su muñeca.

— Dios mío, ¡BaekHyun! — Se acerco al nombrado y tomo con cuidado su muñeca izquierda. Esta estaba cubierta por un vendaje improvisado, una pequeña mancha del tamaño de un centavo hacia acto de presencia. — BaekHyun, despierta. ¿Me puedes escuchar? ¡BaekHyun!

—¡ChanYeol, estamos aquí!

El más alto tomo en brazos a su pareja y se encamino hacia los recien llegados. — Tenemos que llevarlo al hospital, SeHun. ¡Ahora!

— Hombre, ¡¿pero qué carajos pasó?! ¡¡Vamos!!

SeHun, LuHan y ChanYeol con BaekHyun en sus brazos se pusieron en camino hacia el hospital. En el trayecto el más alto les explico la situación entre lágrimas y sollozos. LuHan trataba de calmarlo un poco y le ayudaba siendo un apoyo emocional, mientras que el otro hacia todo lo posible por llegar lo más rápido que podía.

Apenas llegaron entraron por emergencia, solicitaron ayuda y de ahí para allá todo fue un caos. SeHun y LuHan trataban de calamar a ChanYeol mientras los doctores y enfermeras se llevaban a su pareja para tratar lo que hubiera sucedido con él.

— Es mi culpa, todo es mi culpa, chicos... — Balbuceo entre sollozos el más alto mientras era consolado por sus amigos para que tratará de calmarse lo mejor que podía.

Después de media hora tuvieron que separarse para ayudar con el papeleo y otras cosas que habían solicitado las enfermeras para el paciente. Al cabo de unas horas de haber esperado y terminado con lo que tenían que hacer por fin recibieron noticias.

— ¿Usted es su pareja, señor Park? — Pregunto el doctor mientras anotaba unas cosas en un tablero que cargaba.

— Sí, por favor, dígame como se encuentra mi pareja. 

— Parece que ha tenido días difíciles, ¿está teniendo los cuidados necesarios por su estado de gestación? 

— ¿De qué habla? ¿Qué esta pasando con él?

— Se puede suponer no ha estado teniendo mucho cuidado en lo que sería un par de semanas. Le estamos suministrando los cuidados y medicamentos necesarios para él junto al bebé, pero no debe preocuparse, ninguno corre peligro. — Observa por un momento al alto para luego seguir con su relato. — Con respecto a la herida de su muñeca, no es profunda, pero si significativa como para perder un poco de sangre de no haber sido trata a tiempo. ¿Sabe usted algo sobre eso?

— No... Realmente todo fue un caos cuando fui a visitarlo esta mañana.

— Espere, ¿no viven juntos? 

— La situación de mi pareja es algo... compleja. Creo que tal vez necesite ayuda que yo no puedo darle, no sé si me hago entender... 

— Entiendo. — El doctor soltó un suspiro y volvió a escribir algo en su tablero. — El paciente se quedará por hoy aquí para observaciones por cualquier cosa, mañana a primera hora será dado de alta. Pueden pasar y estar con él, pero solo uno de ustedes se puede quedar a pasar la noche con él. Es todo por ahora, cualquier cosa no duden en contactarme.

Todos le agradecieron y luego se dirigieron a la habitación donde había sido asignado el más bajo. Al entrar en esta se percataron de que ya estaba despierto, pero se notaba algo decaído. Nisiquiera pudo levantar la mirada que estaba puesta en sus manos. Los tres chicos entraron y cerraron la puerta, nadie dijo nada. Sabían que esto era dificíl para su pareja, quería respuestas, pero no iba a presionarlo.

— Lo siento... Lo siento tanto. — Habló el más bajo, se podía distinguir como su cuerpo tenía pequeños temblores, seguramente tratando de llorar de manera desconsolada en frente de todos. — No recuerdo muy bien que ha sucedido, pero para que haya despertado en un hospital se que fue algo tonto... Lo siento, lo siento tanto. ¡Pero prometo mejorar!

Luego de haber dicho aquello alzó el rostro todo sonrojado y lleno de lágrimas, una de sus manos había subido hasta sujetar la bata del hospital en su mano.

>> ¡Prometo que seré una mejor perosna, voy a buscar ayuda! ¡Por favor, ChanYeol, perdón! ¡No me dejes por la tontería que seguramente hice! ¡Por favor!

— Oh no, nada de eso, mi amor.

El mencionado se acerco a su pareja y lo estrechó entre sus brazos buscando calmarlo un poco. El menor lloró entre los brazos de su pareja, dejando salir todo lo que le había estado oprimiendo por dentro frente a los demás. Sabía que estaba siendo vulnerable, pero no le importaba. No quería que cosas así se volvieran a repetir. Él merecía cerrar de una vez por todas ese ciclo de su vida y avanzar.

— Yo creo en ti, Baekkie. Se que vas a lograr superar esta y cada una de las etapas de tu vida... Y aquí me vas a tener, siempre estaré contigo, nunca te voy a dejar a ti ni a nuestro bebé. No estás solo, me tienes a mi y a nuestros amigos. Se que las cosas cambiarán, pero paso a paso, ¿ok?

— Sí, esta bien...

Respondiendo mientras limpia sus lágrimas y prestaba atención a sus amigos, estos se acercaron a él y le demostraron que no estaba solo, no tenía porque seguir luchando duras batallas sin compañía. La vida sería diferente a partir de ahora, pero como había dicho su pareja: paso a paso.

HENKO ☞ ChanBaekDonde viven las historias. Descúbrelo ahora