━━ Tengo miedo, no quiero sentirme solo, me estoy hundiendo eso me aterra.
EL HIJO DEL SÉPTIMO HOKAGE CORRE por las desastrosas calles de la konoha, trata de mantener su mente serena ante el terror que sucumbe a los habitantes. Atisba en la lejanía como una mujer de avanzada edad se halla perdida en medio del caos, fue en ese momento que Shinachiku se obliga así mismo aumentar su velocidad tras percibir que un muro está a punto de aplastar a la anciana.
Se lanza, la acoge entre sus brazos y una explosión los aturde fuertemente, el joven cae, sin embargo, con su cuerpo logra proteger a la señora.
— Padre, está débil — una voz masculina exalta al muchacho.
Ladea su cabeza y por medio el rabillo de su ojo observa a su mejor amigo delante de él, junto a una muchacha salvaguardándolo de los escombros que habían sido esparcidos por la detonación de hace unos instantes.
— Itachi— Dijo en un tono aliviado— Anzu...
— No tenemos tiempo— ahora fue el turno de la muchacha hablar— Nuestros padres están combatiendo, sin embargo, papá Sasuke anda en graves aprietos... Shina-chan, nosotros protegeremos a tus hermanos, pero tu misión es ir donde está el séptimo y tu madre.
» Shinachiku«
»Shinachiku«
»Shinachiku«
La imagen lucida de sus dos mejores amigos se desvanece en un soplido al igual el caos que gobernaba a su aldea, una luz penetra en sus parpados exigiendo a que abriera con brusquedad sus ojos, el joven se reincorpora rápidamente observando con desasosiego su entorno ¿acaso fue una pesadilla? ¿Un recuerdo?
— ¿Madre? ¿Qué sucedió? — indago confundido tras atisbar a la femenina que lo había despertado.
— Iba a avisarte que el desayuno está servido, sin embargo, tuve el atrevimiento en despertarte personalmente, ya que Sarada se negó en hacerlo.
Por un momento el de hebras doradas tuvo la esperanza que todo estuviese solucionado o que simplemente estuviese en un profundo sueño, pero, por lo visto la posibilidad se espumó. La mujer le dio indicaciones de dónde encontrar el baño además antes de marcharse le comento que había comprado algunas ropas para él, sin duda aquel gesto conmovió brevemente al menor.
» Ellos protegerán a mi familia durante mi ausencia.«
Se motivó mentalmente tras darse unas dos palmadas en sus pómulos, al menos debe conservar su cordura o lo que le queda. Se levantó de un salto, pero al momento que sus pies palparon el frío suelo percibió una presencia, calmadamente condujo su mano diestra a su porta-armas y de allí de un veloz movimiento saco su kunai lanzándolo a la dirección de la puerta. Se sorprendió al visualizar quien lo esta "espiando", un hombre con una capa negra cubriendo su cuerpo y las hebras de sus cabellos negros ocultando una parte de su rostro.
— Tío Sasuke— susurro desconcertado puesto que no esperaba verlo nuevamente.
El nombrado ojeo al opuesto con desdén, a decir verdad su presentación no fue la más grata y la curiosidad lo carcomía desde anoche. Ni siquiera sintió un aura maligna en el joven, no, no, todo lo contrario pues irradia calidez como su mejor amigo, sin embargo, aunque cruzaron efímeramente miradas también pudo distinguir, como el dolor acompañado con la interminable oscuridad se apoderan poco a poco de los orbes jades ajenos.
— ¿Por qué vino? ¿Acaso quiere averiguar cómo sería su vida a lado del tío Daiki? — siseo con desgano.
— No — respondió el adulto— sé que mi vida a lado de él sería cómoda, no obstante, estuve meditando sobre mi comportamiento ayer y mereces una disculpa, además quiero preguntarte personalmente ¿Cómo estás? Sé que perder a tus seres queridos por culpa de alguien es tormentoso, piensas que es tu culpa por ser débil en ese momento y el dolor te consume.
Shinachiku bajo su mirada apenada ¿acaso los ojos de los Uchihas tienen la capacidad de escarbar sus entrañas? Desde que llego una oleada de sentimientos lo han venido golpeando, se culpó a él por no ser lo suficientemente fuerte para proteger, incluso la conversación nocturna con Sarada causo que se odiara así mismo por destruir dos hogares, fue hasta este momento que deslumbro en el abismo que está cayendo
—Tengo miedo, no quiero sentirme solo, me estoy hundiendo y eso me aterra— confeso tímidamente apretando sus puños.
— En mi juventud deje que la maldad me hiciera suyo, me hundí, me aterre para finalmente perder— el Uchiha coloco su única mano sobre la cabeza del menor por lo tanto desordeno los cabellos de este— no permitas que aquello te condene simplemente continúa luchando después de todo el diluvio se calmara y ellos volverán.
El adulto se dio media vuelta dejando aun Uzumaki con las palabras en la boca, ni siquiera espero su respuesta porque yacía fuera de la habitación. Cayo de rodillas, abrió sus ojos desmesuradamente sintiendo como su cuerpo quedo efímeramente paralizado y una pulsada fuerte azoto su corazón.
» La guerra final se avecina y todas dudas serán resueltas «dedujo internamente puesto que un doloroso presagio lo abatió.
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FALTA UN CAPÍTULO PARA TERMINAR EL PRIMER ARCO DE LA HISTORIA.
