2. bajo la luna llena

2.6K 184 8
                                    

Jimin levantó su mirada lentamente, sus labios temblorosos y sus ojos inundados de lágrimas, consumido por aquella abrumadora sensación. Retrocedió dos pasos, intentando agarrar aire y que el potente olor de Namjoon no diera de lleno con sus fosas nasales. Sus piernas se sentían tan débiles que realmente terminó por asustarse, aquello no era normal. No se sentía correcto, solo...

El aire le comenzó a faltar cuando su mirada volvió a su progenitor. Namjoon agarraba con ambas manos su cabeza, apretando sus palmas y soltando gruñidos en su inconsciencia. Aún así seguía luchando contra su lado animal.

Aún si la batalla estaba claramente perdida.

Porque Jimin se había presentado oficialmente como omega justo en el momento en el que percibió el olor de su celo. Un detonante mutuo de hormonas se desató y él simplemente estaba jodido. Bastó que sus ojos chocaran con los ajenos una vez más para que ambos terminaran en el piso, Namjoon lo apresó con dominación sobre el sofocante pasto. Su respiración irregular no lo dejaba hablar del todo, y solo eran gruñidos demandantes los que se pronunciaban mientras Jimin lo observaba con sus luceros asustados. Exaltados y curiosos a la vez, y todo por su arrasador deseo.

El olor, el maldito acaramelado olor que se desprendía de la piel en su cuello expuesto.

Namjoon, aun nublado y embarrado de contradicción, tomó el brazo de su niño, luego enterró sus sobresalientes uñas que picaban por desgarrarse la piel, sintiendo como la boca se le hacia agua con tan solo mirar aquella palpable vulnerabilidad. El rubiecito tembló, respirando de manera acelerada.

—Jimin, necesito que te vayas de aquí y te encierres en tu habitación, ¿comprendes?— Namjoon reunió toda su fuerza de voluntad y machacó sus labios con aquellos puntiagudos colmillos que se iban incrementando en su boca. Cada segundo se volvía más suspensivo que el otro. Era... era una locura—. Debes irte, n-no puedes estar aquí, pequeño.

—Pero p-papi... yo... —el omega soltó unas cuantas lágrimas, frunciendo los labios cuando otro espasmo se apoderó de su cuerpo.

Gracias a esto perdió las riendas sobre sí mismo por unos segundos, revolcándose contra el pasto, arqueando la espalda y sintiendo quemar su piel con cada minúsculo roce. Una horripilante sensación se instaló en su pecho y no lo abandonó hasta que Namjoon, preocupado, lamió una de sus mejillas, aquellas que se encontraban empapadas. El lado alfa de Namjoon lo necesitaba, y así como quería dominarlo, también estaba sumamente preocupado porque el omega parecía sufrir la ausencia de su nudo. Desesperado por hundirse en él lo más profundo que se le fuese permitido.

Namjoon lo venía sospechando desde hace un tiempo, cuando su niño lo visitaba era como si su olor (a pesar de no haberse presentado todavía) se pronunciara; un ligero dulzor lo envolvía como si de un perfume se tratase. Desde entonces yacía sospechando los indicios sobre Jimin y la posibilidad de que fuera un omega. Sin contar que siempre había sido un muchacho de contextura demasiado delgada y de carácter dócil como para llegar a ser un alfa, eso estaba claro. Por eso tenía tanto miedo de cometer un error. Y ahora, justamente estaba pasando lo indeseado. Lo que tanto temió.

Aunque quizás... Solo quizás, muy en el fondo lo sabía. ¿Por qué sentía esa fuerte conexión? ¿Qué era ese impulso? ¿Realmente se había quedado porque confiaba en su autocontrol, o porque ansiaba que el resultado fuera distinto a lo moralmente correcto?

Como un balde de agua hirviendo, Jimin se empujó encima de su cuerpo, sacándolo de la nebulosa de pensamientos cruzados y confusos. Cuando sus ojos se encontraron, no lo soportó, sintió un desnivel inmenso y perdió sentido de razón.

Y se rindió.

Su cuerpo se recompuso lentamente después cuando el cambio de mando lo allanó. Sus brillante mirada desnudó las intenciones de Jimin. O mejor dicho, de lo poco que quedaba de él. Su Omega tenía más control y menos racionalidad justo ahora.

alfa inss さ : nammin◞Donde viven las historias. Descúbrelo ahora