Mis sueños fueron interrumpidos por mi falta de aire. Pestañeé varias veces y note un peso sobre mí que no dejaba que me moviera ni un centímetro.
Bruno.
Sus piernas estaban enredadas con las mías y estaba sobre mí, bocabajo, como abrazándome. Su rostro volteaba hacia mi apoyado a unos cuantos centímetros a lado de mi cabeza.
Volví a tratar de salir debajo de él, pero me era imposible.
-Bruno- dije en un hilo de voz, sabía que seguía durmiendo porque su tranquila respiración chocaba en mi mejilla, no quería despertarlo rudamente.
Al ver que no me respondía me moví a los lados tratando de despertarlo.
-Bruno- dije un poco más fuerte, solo conseguí que se moviera un poco más cerca de mí- ¡Bruno!- grite con el poco aire que podía acceder en mis pulmones.
-¿Qué mierda quieres, no crees que es muy temprano para joderme?- dijo con la voz pastosa. Odiaba que se expresara con esas palabras conmigo, como si lo molestara todo el tiempo.
-¡Estas encima de mí, me aplastas cabrón!- grité mientras me movía. Bruno abrió los ojos y se quitó, dándose la vuelta hacia mi lado derecho quedando bocarriba.
-¡De que puto humor amaneciste!- dijo llevándose las manos a la cara.
-¡¿Yo?! ¡Eres tu quien dices que te jodo!- me apoye de los codos para verlo mejor. El seguía con las manos en la cara tapándose los ojos.
De repente se abalanza hacia mí y se sube en mí, lucho para quitarlo golpeándolo en el pecho con mis manos, pero el rápidamente me sujeta de las muñecas poniéndolas cada una a lado de mi rostro.
-Buenos días bebé- dijo inclinándose hacia mi cara y plantando un pequeño beso en mis labios. Se alejó unos cuantos centímetros para ver fijamente mis ojos.
-Eres un enfermo bipolar- digo frunciendo las cejas y con una sonrisa en mis labios.
-Tú una caliente- Por mi mente pasaron imágenes de lo sucedido ayer. Mis mejillas se tornan de un color rojizo y empuño mis ojos.
-Jamás me dejaras en paz con eso ¿verdad?- digo aun con los ojos cerrados.
-Nunca nena- Vuelve a dar un corto beso en mis labios y se quita de su posición dejándome en libertad. Abrí mis ojos y vi como Bruno abría la puerta y caminaba por el pasillo.
-¿Te vas?- pregunté como una niña pequeña. Lo mire darse la vuelta y mirarme burlonamente.
-¿Crees que me iría solo vistiendo boxers?- Mordí mi labio inferior y cambie el punto de vista fuera de Bruno. Escuche una risa proveniente del pasillo y después pasos que se fueron alejando. Deje escapar un suspiro y salí de la cama. Busque por todas partes mis jeans de ayer y los encontré debajo de la cama. Saque mi celular de ellos y vi la hora. 2 de la tarde.
-¡Mierda!- grité tomándome de la frente. Faltaban 5 horas para la estúpida “reunión” de mis padres… y no tenía vestido- ¡Doble mierda!
-¿Tienes algún problema?- escuche un grito que venía de la cocina. Me encamine hacia allá y me encontré con la ejercitada espalda de Bruno, mientras hacía algo de comer.
-¿Recuerdas lo de la reunión de mis padres?- Bruno asintió sin voltear a verme, al parecer estaba muy concentrado cocinando. – Pues… no tengo un vestido decente para la ocasión- dije apoyando mi frente contra la barra.
-¿Es muy formal?- Todavía seguía con la frente pegada a la barra con los ojos cerrados.
-Sep- dije lamentándome mentalmente- No puedo pedirle un vestido a Sophie por… ya sabes- dije levantando la vista. Mi mirada se conectó con la gris de Bruno. El asintió y apartó sus preciosos ojos de los míos.
ESTÁS LEYENDO
TRAPPED (Ian Somerhalder)
FanfictionÉl es ese tipo de personas a las que evitas, que sabes que no trae nada bueno. La primera impresión en realidad cuenta. Pero al sentir tan solo un roce de las yemas de sus dedos sobre mi piel me hacia sentir tan viva y real. Él es mi perdición, mi d...