XLI - "Todo estará bien"

610 27 1
                                    

Y aquí me encuentro, caminando por los pasillos de mi colegio con mi carpeta presionando mi pecho. Oculte los moretones que se encuentran en mi rostro con maquillaje y trato de no levantar la mirada, siento que todos saben sobre mi perdida de virginidad.

Escucho que algunas personas se ríen y no puedo evitar sentir que es sobre mí, así que apresuro mi paso.

Después de que rompí en llanto en los brazos de Bruno le pedí que se fuera y que me diera espacio y tiempo. Necesito aclarar mi mente y aceptar lo que paso.

Llego hasta mi casillero y lo abro con las manos temblorosas. Dios, no puedo seguir así, siento que en cualquier momento llorare y no quiero que nadie me vea, siento que el nudo en mi garganta no me deja ni pasar saliva y mis lagrimales pican.

-Hey- escucho muy a penas, no quiero voltear porque si la veo llorare. Escucho que suspira- Solo quería disculparme, no debí actuar como lo hice, es tu vida y son tus decisiones, eres mi mejor amiga y no quiero que por un idiota nos distanciemos- muerdo mi labio para desviar mi atención, no quiero llorar, no quiero- ¿Por qué no me miras, Debbie?- me toma del hombro haciendo que de media vuelta, la miro y se ve perfecta como siempre, con un brillo de labios rosa y su cabello planchado, en cuanto me ve su rostro refleja angustia- Dios, ¿Qué pasa?- yo solo niego con la cabeza y tomo la libertad de abrazarla. No me pude contener más y comencé a llorar, Sophie me susurraba que todo estaría bien, que no me volvería a dejar sola, hasta que escuche que sonó el timbre lo cual indicaba que las clases habían comenzado.

-Mierda, tengo que ir a clase- dije alejándome de ella y buscando el libro de historia desesperadamente en mi casillero.

-Debbie, pero estas llorando...

-Tengo una maldita semana sin venir, me tengo que poner al corriente- dije tomando el libro y metiéndolo a mi mochila para después cerrar el casillero.

-¿Nos vemos en la salida?- le asentí con una pequeña sonrisa mientras secaba las lágrimas con las mangas de mi suéter- Yo te llevare a casa Debbie- dijo para irse trotando a su salón, lo que hice a continuación.

Gracias al abrazo de Sophie pude resistir las clases, al parecer había un tema nuevo en algebra, pero no era tan difícil así que pude ponerme al corriente, solo tenía que hacer varios trabajos en las otras clases para compensar la semana pasada.

Al salir de mi última clase vi a Sophie fuera de mi salón esperándome con un snowball, en cuanto me vio lo agitó, y cuando estuvo cerca de mí me lo dio.

-¿Quieres hablar sobre lo de la mañana?- me dijo cruzando su brazo con el mío y haciéndome caminar hacia la salida.

-La verdad no, no tengo ánimos- dije levantando los hombros y dándole la primera mordida a mi snowball.

-Esta bien, ¿quieres que te deje en tu departamento?

-Por favor, necesito hacer las tareas y trabajos de la semana pasada y son bastantes- dije con pereza.

-De acuerdo, si tienes algún problema con eso sabes que puedes decirme Debbie bebé- dijo para después entrar a su auto junto conmigo.

-¿Qué has hecho últimamente?- dije para comenzar una conversación.

-Pues nada en realidad- Encendió su carro y salió rápidamente del estacionamiento- Salí a una fiesta pero fue algo aburrida, así que me fui temprano... pero no he hecho nada, ¿y tú?- Los nervios salieron a flote y el nudo en la garganta volvió a aparecer.

-¿Y-yo qué?- dije maldiciéndome mentalmente por tartamudear.

-¿Pues qué hiciste?- dijo en un tono burlón.

-N-nada, solo... ¿estudié?

-¿Estudiaste? ¿De verdad, no se te ocurre una mejor mentira?- dijo Sophie dando vuelta hacia mi edificio- Mira, está bien que no quieras contarme, pero te veo triste Debbie y te vuelvo a repetir que si tienes algún problema puedes confiar en mí, como siempre- dijo tomando mi mano y apretándola en signo de apoyo.

-Lo sé, es solo que... no me siento lista para decirte, lo siento- digo abriendo la puerta.

-Esta bien Debbie, nos vemos mañana- me despido de ella con un beso en la mejilla y me bajo. Antes de entrar al edificio agito mi mano para que se pueda ir y así lo hace.

Entró, saludo a John y me dirijo al ascensor, en cuanto las puertas se abren visualizo a Bruno.

La boca se me seca y mi corazón comienza a palpitar aceleradamente.

-¿Estas bien?- pregunta preocupado, tardó unos segundos para procesar lo que acaba de decirme y finalmente asiento torpemente.

-S-si- digo entrando al ascensor y después el sale.

-Nena, lo siento...- me apresuro a presionar el botón de mi piso.

-Te pedí tiempo- dije haciéndome hacia atrás, tratando de alejarme todo lo que pueda de él. Vi por sus ojos pasar un remolino de sentimientos pero el que más predominaba era la tristeza. Mis ojos se aguaron.

-Por favor, perdóname...- y en ese instante las puertas se cerraron, en cuanto se cerraron rompí en llanto.

Esto iba a ser más difícil de lo que pensé.

TRAPPED (Ian Somerhalder)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora