Baby Boy [l.s]

Capítulo 25 [Final]

El timbré sonó.

El miedo se apoderó de mi cuerpo, quería gritar, pedir ayuda, pero sabía que no podía arriesgarme más, no solo mi vida corría peligro, también la de Louis.

La puerta rechinó, se abría lentamente.

A lo lejos escuché una voz.

— ¿Harry?

Mi frecuencia cardiaca aumentó, sentía que el corazón se me saldría del pecho, poco a poco escuchaba los pasos de Louis acercándose, necesitaba hacer algo, no puedo permitir que lo lastimen.

Seguí moviendo mis manos hasta lograr zafarme del amarre, mis muñecas estaban rojas y ensangrentadas, pero poco me importaba.

Me incliné para quitarme la soga de los tobillos, pero me detuve al escuchar la voz de Louis.

— ¿Zayn? ¿Qué haces aquí? ¿Dónde está Harry?

Miré a Zayn parado frente a mi con un aspecto extraño, no se veía como normalmente lo hacía, tuve un mal presentimiento.

— Oh Louis, te ves tan bien, tan perfecto, como siempre.—dijo mirandome de arriba a abajo, sus ojos se iluminaron y en su rostro se formo una sonrisa que me puso los pelos de punta.

— Te pregunté qué hacías aquí, ¿Dónde está Harry? ¿Qué le hiciste maldito enfermo?— la ira se apoderó de mi cuerpo, me fui acercando a el, retándolo.

La sonrisa en su rostro desapareció, cambiando a una expresión completamente seria, parecía otra persona y por un momento sentí miedo.

—¿Qué tiene el que no tenga yo?—dijo en voz baja, mirandome directo a los ojos.

Lo miré confundido. No entendía que pasaba.

—¿De qué carajo hablas?

—¿Por qué lo prefieres a el? ¿Por qué? Yo soy mucho mejor que ese imbécil, no es suficiente para ti, déjalo, quédate conmigo, estamos destinados a estar juntos Louis, entiéndelo.—gritaba mientras me agarraba fuértemente de los brazos. Noté lagrimas asomándose por sus ojos.

De un tirón me safé de su agarre, retrocediendo unos pasos. Solté una carcajada para luego dedicarle una mirada seria.

—No te atrevas a conpararte con el, jamás podría estar con alguien como tú, deja de decir estupideces y dime donde está Harry.—dije en un tono grave.

Zayn bajó la mirada y aproveché para pasar a su lado, adentrándome a la casa con la finalidad de encontrar a Harry.

—Te vas a arrepentir...—dijo en voz baja.

Giré para mirarlo, pero sin previo aviso se abalanzó sobre mi, empezando a tirar golpes a diestra y siniestra.

—VAS A ESTAR CONMIGO QUIERAS O NO, TU ERES MÍO LOUIS ¡MÍO! SI TENGO QUE MATARTE PARA QUE NO ESTÉS CON EL, LO HARÉ ¡TE MATARÉ, LOS MATARÉ A AMBOS!