ANION I Mente Encerrada

Capítulo 1

Lion Escarlata

Me encontraba solo otra vez sentado en la gran mesa del comedor de mi casa, o mas bien la mansión de mi padre, desayunando yo y el silencio enorme que reinaba. A pesar de ser mi comida favorita esta soledad era deprimente, aunque no por mucho.

Terminé con mi plato y lo llevé a la cocina donde Mara, la sirvienta de la casa lo tomó para lavarlo, ella siempre ocupada.

- Que tengas buen día Mara voy a salir - Me despedí con la mano y fui a mi habitación a cambiarme.

Hoy vería a una chica, llevamos un par de semanas hablando por Whatsapp y uno que otro día e podido verla, es bastante atractiva y sencilla, vive como que en una favela.

Terminé de vestirme con un pulover amarillo, me quedaba algo apretado por mi forma corporal, no era muy musculosa pero si bastante para un chico de 19 años como yo, traía puesto un mono gris algo blanqueado junto con unos zapatos nike del mismo color.

Cogí mi móvil, las llaves de la casa, las del auto, y bajé al garaje donde me monté en el vehículo enseguida. La marca del auto era un Ford Mustang negro con 2 rayas amarillas que pasaban desde el capó hasta la parte trasera.

Arranqué y en el camino llamé a quien sería mi compañía en el punto de encuentro - ¿Lista? - Pregunté en cuanto cogió mi llamada.

- Si aunque un poco nerviosa jejeje - Escuché su voz suave y dulce, incluso a través del teléfono.

- Tranquila, no será mucho tiempo para que luego no tengas problemas - Respondí tratando de calmarla.

- Vale ya mi hermana y yo salimos de camino al lago, te espero allá - Podía sentir como caminaba así que supongo que llegarán primero que yo debido a su cercanía al lugar objetivo.

- Bien, en unos minutos estoy allí - Dije y también se despidió.

Me concentré en conducir con una sonrisa a boca cerrada. Luego de un pequeño tiempo veía los árboles cerca de un parque así que me estacioné en el parqueo del lugar público.

En ese parque cerca estaba el lago que siempre usamos para vernos las pocas veces que nos hemos reunido, obvio escondidos, su padre y madre no aprueban que se ande viendo con un chico de una clase social más alta, aunque ya eso es historia pasada aún hay familias que piensan así y que le haré mal.

Después de caminar unos minutos la vi sentada en una roca grande, frente al enorme hueco inundado. Fui silenciosamente por detrás de ella y traía su largo pelo castaño y un poco ondeado recogido en un moño.

- ¡Bu! - Agarré de repente sus hombros haciendo que ella de un brinco y dirija su mirada hacia mi. Pude ver otra vez su sonrisa y venía maquillada, un labial marrón claro con un poco de brillo, unos colgantes aretes plateados y sus ojos arreglados.

Esa combinación castaña que tenía en su cara, cabello, labios y ojos me encantaba, me recibió con una sonrisa dulce y gentil. - ¿Me demoré mucho? - Pregunto ya parándome frente a ella y se levanta para saludarme.

- No para nada jeje y me asustaste tonto - Dijo con voz calida y nos dimos un beso de mejillas y pude notarlas más claras, me fijé en todos los detalles y sinceramente se veía radiante, su tono de piel tostada ayuda más a mostrar su hermosura.

- Te ves genial - Alagué sonriendo ampliamente con impresión agradable que causaba.

- Oh...- Vi sus cachetes sonrojarse - Gracias jeje tú...te ves muy guapo - Responde suavemente con mirada en mi para luego apartarla apenada.

Ensanché mis labios sonriente otra vez agradeciendo y luego nos sentamos.

- ¿Y tu hermana no vino? - Siempre venía con ella para cuidarla, y era la dueña del móvil por el que ella chateaba.