Un nuevo comiezo

Carta #37

Querida Nerea:

Los últimos días pasaron sin ninguna novedad desde la última vez que te escribí, y aunque algo sucediera no me importaría.

Tu eres lo único que me importa.

Pero por desgracia mía tu ya no estás aquí, ya no estas a mi lado apoyándome y dándome fuerzas para soportar todas las adversidades.

Adversidades que ahora no parecen tener la misma importancia que antes, ya no me importa. No me importa, porque tu perdida es mi mayor problema hasta el momento.

Yo no soy la única que te extraña honey. Jasper está muy mal y aunque quisiera que vinieras y hicieras algo sé que no puedes.

Y yo no puedo pedirle a mi hija muerta que reviva. Nada puede traerte de vuelta, créeme, Nerea ya lo he intentado todo, pero nada funciona.

Hoy cumples dos años de haberte ido y ninguno lo está pasando bien. Claro, todos menos Eduardo y la corderita. Que, por cierto, hoy es el día, hoy se casan.

Creyeron que hoy era el momento, el adecuado para casarse. Todos asintieron y lo aceptaron, hasta creo que lo olvidaron. Pero yo no, yo no asentí obediente ante ellos.

Debo irme, Alice me matara si no bajo. Supongo que seguiré escribiéndote otro día, mi sol.