SEDÚCEME

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Abro lentamente mis ojos a causa del sol que entra por la ventana, pienso en un momento en levantarme, pero un dolor intenso en mis lumbares me lo impide, ya está el destino quiere que me quede en la cama. Después de unos largos minutos contemplando el techo, escucho unos pasos pesados tras la puerta, después de esto unos golpes le siguen.

﹣Señorita Nell, sus padres le esperan que baje a desayunar﹣ deduzco que es Albert por la voz, me levanto de la cama dando pasos torpes, al estar en frente de la puerta agarro el pomo y la abro.

﹣Buenos días Albert, ¿Qué tal has dormido?﹣ pregunto, el me mira expectante﹣

﹣Buenos días Señorita Nell, bien ¿Y usted?﹣dijo cortés y un poco avergonzado por no haberlo preguntado antes

﹣Perfectamente, gracias por preguntar﹣mientras que bajábamos las escaleras juntos tuvimos una pequeña charla, los dos estábamos divirtiéndonos, si puedo hacer que su trabajo sea ameno, lo haría encantada

﹣Bueno, que tenga un agradable día, si desea algo no dude en llamarme, si no le importa, me retiro

﹣Perfecto Alfred, ya nos vemos

Al llegar a la gran cocina, vi en la esquina de la mesa a mi padre, quiero preguntarle lo que tanto me ronda la cabeza desde que estamos en esta casa.

﹣Buenos días familia﹣planto un casto beso en cada una de las frentes de ellos﹣Papá, quisiera hacerte una pregunta﹣dije dubitativa por la contestación que podría dar este

﹣Dispara﹣dijo con picardía, a lo que yo parpadee un par de veces

﹣¿Eres narcotraficante?﹣pregunte fríamente, al escuchar eso, mi padre escupió el zumo que estaba bebiendo, mi madre y hermano me miraron asombrados por la burrada que acababa de soltar por la boca

﹣Nell Moore, que acabas de decir. ¿Cómo puedes pensar así de mí?﹣dijo mi padre con cierto dolor en sus palabras

﹣A ver, sé que ha sonado un poco alocado, lo sé. Pero mira a tu alrededor por un segundo﹣ hice una paso mientras que todos miraban lo que yo había señalado, refiriéndome a la casa

﹣Hace un par de días estábamos en banca rota, de repente nos dices que tienes un trabajo, nos mudamos a otro país y para colmo tenemos una mansión, ¿Alguien me lo explica?

﹣Siéntate anda, no te sofoques﹣dijo mi padre﹣Comencemos por el principio, ¿Te parece?﹣me preguntó a lo que yo cogí asiento a su lado y asentí, mientras el me explicaba yo me preparaba mi desayuno

﹣Encontré un trabajo no muy lejos de esta casa, es una empresa bastante conocida a nivel mundial, hablé con el jefe ya que estaba buscando trabajadores urgentemente, le di mi curriculum. Estuvimos hablando un par de semanas, le comenté el tema económico que teníamos, él dijo que no había problema. Hace un par de años construyó esta urbanización para sus trabajadores, a muy buen pecio y con todo incluido. Él gana millones mensuales tengo entendido, tiene un par de socios lo que hace que este hombre esté podrido de dinero﹣hace una pequeña pausa﹣¿He aclarado tus dudas?﹣me mira fijamente a los ojos, yo asiento muerta de vergüenza, madre mía como podía pensar así de mi padre...

﹣Papá lo siento muchísimo por haber pensado así de ti, es que al ver todo esto, me ha dado que pensar. Bueno y puedo preguntar ¿Cómo se llama la empresa?﹣si lo sé, soy muy curiosa, a veces por culpa de esta curiosidad termino metida en un lio

﹣Twine﹣dice seco﹣Tengo dos jefes, ya que son hermanos gemelos, de ahí el nombre de la empresa

﹣Vale ya sé todo lo que quería, gracias por aguantar mi tercer grado﹣me levanté de la silla, dejé los platos sucios del desayuno﹣Voy a salir para dar una vuelta por la ciudad, quiero investigar un poco﹣dije saliendo de la cocina camino a mi habitación.