Sueños

6

Tierra o

Gwen de 10 años andaba de compras en un supermercado junto con Ben, el cual estaba detrás de un estante, asomó la cabeza detrás de este para poder ver como un cierto niño que conocía perfectamente botar una enorme pirámide de latas que un empleado acomodaba eficientemente.

-Oye, ese niño acaba de... - intentó decir Gwen.

-No es cualquier niño. ¡Es Kevin! – refunfuñó Ben molesto – Kevin es la razón por la que no comí el almuerzo por 3 meses en cuarto grado, es la razón por mi miedo irracional a los baños públicos, es un año mayor que yo.

Aseguró eso último con miedo.

-Nunca perdió oportunidad de humillarme, en los pasillos, cuando comía, o cuando leía, incluso cuando iba al baño.

-Que horrible – le confirmó Gwen - ¿Cuál es la posibilidad de que estuviera aquí?

-No lo se, pero la posibilidad es que ahora voy a desquitarme... - le mostró el omnitrix entusiasmado.

-Creo que no deberías... - eso podría terminar bastante mal.

-Permíteme – la ignoró siguiéndolo – este apestoso por fin recibirá una lección por lo que hizo.

Ben presionó el reloj convirtiéndose en Insectoide, colocándose encima de un estante.

-Hey Kevin mira quien tiene poder ahora, veamos si crees que esto es divertido – le arrojó algo de baba para hacerle daño pero este colocó una almohada para poder defenderse y esquivarlo con una asombrosa agilidad.

-Vaya, vaya, vaya, ¿Cómo estas viejo amigo? A pasado tiempo, me gusta tu nuevo disfraz, especialmente por el diseñador – mostró que tenia un omnitrix rojo.

-¿Otro Omnitrix? – Ben se sorprendió ante eso, Kevin lo presionó convirtiéndose en Cannonbolt, todo ese asunto fue bastante confuso, especialmente porque no tenía ni la menor idea de cómo lo había reconocido y demás.

Después fue que se dio cuenta que fue cosa de Vilgax, como siempre engañó a Kevin de lo que quería hacer realmente, tras una pelea se dio cuenta de que podrían ser amigos en algún futuro.

Aunque todo este asunto no significaba que no tenía que pagar por lo que había hecho.

...

Habían muchas enfermeras en aquel hospital que aseguraban que Kevin era un joven bastante guapo, Ben intentaba ocultar lo obvio mientras solo trabajaba, estaba llenando unos papeles mientras apareció la persona que menos creía, ahora se aparecía una vez al mes en vez de una cada 2 meses, a Ben le gustaba fantasear infantilmente que era por él, pero luego de eso se regañaba mentalmente.

-Con esa bata pareces inteligente – le comentó, Ben no volteó a verlo.

-Cállate – respondió.

-¿Tienes libre mañana? Quiero mostrarte algo – el día siguiente era sábado.

-¿Vas a secuestrarme de nuevo? – Ben levantó la vista, viendo a Kevin con una chaqueta de cuero que le encajaba perfectamente con su personalidad de chico malo, pero se miraba tan atractivo que Ben se dio cuenta que las enfermeras no bromeaban.

-¿Enserio piensas que te secuestré? ¿No la pasaste bien? ¿Ni 5 minutos? – Ben dio un largo suspiro resignado, se había relajado a pesar de todo, y eso era bueno pero malo porque literalmente había sido en contra de su voluntad - ¿Dónde vives? Pasaré por ti.