Tierra 100
Base de los plomeros
Iba caminando a una velocidad extraña, todo le parecía ruidoso, le dolía la cabeza, pero iba a algún lugar en específico.
-¡Oiga no puede entrar! – le gritó una mujer, pudo diferenciar que fue una secretaria, entró de repente a una oficina bastante lujosa donde aquel atractivo hombre que en aquella tierra era de cabellos castaños estaba sentado trabajando en un escritorio de vidrio lujosamente adornado y costoso.
-Luces terrible – le comentó.
-Señor lo siento, el entró sin permiso – comentó la secretaria atrás de él.
-No te preocupes, es mi esposo – fue la respuesta, ella asintió apenada y volvió a salir, él se puso de pie – te dije que no fueras y que nos quedáramos en la cama.
-Ven acá – extendió sus brazos.
-No puedo tengo una importante reunión en 20 minutos y estas hecho un asco, ¿y así te haces llamar el protector del universo 100?
-Kevin Ethan Levin, así me quieres, tal y como soy...
'' ¿Así que te llamas kevin?''
-No cuando haces locuras – intentó irse por la puerta pero Ben se puso en frente de él.
-Tan solo dame un beso de despedida.
-Y continúas haciendo locuras...
...
Su mundo se había vuelto bastante surreal, sabía de antemano que su futuro no podría ser más que un empleo normal, con un trabajo normal, tenía que pensar en eso y no en los tontos sueños que lo seguían.
Pero en aquella ocasión tenía ganas de conocer algo más, pidió al abuelo Max que lo llevara a la estación de los plomeros, el con duda lo llevó a un centro que se encontraba en la tierra, Ben solo podía visualizar por primera vez en su vida especímenes que había visto en sus sueños pero jamás en persona.
Estaban trabajando mientras él los observaba, no era más que una persona invisible, el abuelo Max lo invitó a su oficina a sentarse y a poder tomar algo.
-¡No quiero! – pensó que era alguna de sus típicas bebidas.
-¿No quieres un batido? – el abuelo Max le respondió con extrañeza, sabía que le gustaban, Ben solo pudo respirar resignado y asintió.
Pero el batido no sabía tan mal.
-Me dijeron que andabas un poco enfermo – preguntó un poco preocupado.
-No es eso, no he podido dormir muy bien que digamos – no sabía si contarle la verdad o no.
-Sabes que puedes contarme cualquier cosa, por lo loco que eso suene – tenía ganas de contarle a alguien porque mantener todo eso en total secreto sentía que se iba a volver loco.
-Cuando hubo aquella crisis de los universos el yo de tierra Prime me dio su omnitrix, pasó un poco de recuerdo sobre aliens y de cómo utilizar aquella máquina – sonrió al recordar eso, tener aquella arma lo hizo sentir bastante seguro incluso en una situación de vida o muerte – pero me pasó muchas cosas más.
Sintió que se sonrojó al decir aquello, pensaba que el abuelo Max pensaría en alguna novia, algún recuerdo tormentoso que seguramente los demás llevaban por andar en todo el universo, pero en vez de eso Max pensó en la conversación que tuvieron antes aquel día, sobre lo aburrido que se sentía y sobre nunca salir de Belwood.
-Sé cómo te sientes – Ben levantó la vista.
-¿Ah sí? – lo dudaba, y lo dudaba mucho.
-No te preocupes, a pesar de no tener aquella arma continuas siendo bastante valioso para mí – Ben sonrió con vergüenza y con alivio, al menos entendió lo que le había dicho a medias, lo había hecho sentir mejor a su manera.
Definitivamente no podía contarle que en las otras tierras existía un muchacho guapo y atlético donde los demás Ben estaban tan pegados a el que hacían de todo.
Mejor se lo guardaría, eso sería un buen comienzo.
-Gracias abuelo – le sonrió, la puerta fue abierta por alguien.
-Magistrado Tennyson tenemos un problema – le comentó el hombre que acababa de entrar.
-Lo siento Ben, tengo que atender unos asuntos, si quieres puedes darle una vuelta a la estación – Ben sonrió con inocencia y asintió.
Aunque no lo quisiera admitir literalmente se sentía emocionado, después de tomar el batido salió por la puerta, no solía ver a alien tan seguido, solo en sus sueños y en ellos le llamaba la atención algo muchísimo más importante.
Toda la estructura parecía ser de metal, estaba caminando por unas escaleras, un largo pasillo, sin miedo a perderse o a ser regañado, todas las personas ya sabían que él era nieto de Max Tennyson y por eso tenía un poco de inmunidad con eso.
Pero a él no le gustaba vivir bajo su sombre, y seguramente eso no cambiaría.
Entró de repente para observar al final del pasillo muchas personas, se acercó para observar que era lo que sucedía, una enorme ventana de vidrio, había tantos que no lo dejaban ver, pero como pequeño e invisible para ellos, se acercó sin llamar la atención hasta que se puso en frente de ese vidrio.
Odiaba ser tan curioso.
En aquellos momentos observó detrás de aquella ventana, a Kevin Ethan Levin, esposado a la mesa, siendo interrogado por ¿Rook? ¿Se habían peleado y Rook había ganado? Su mente se quedó en blanco.
¡Entonces si existía en aquella tierra! Pero no era un plomero como en las otras, estaba del otro lado, siendo maltratado por su ''socio de la otra tierra'' era duro en aquella tarea, sabía que él todas era increíblemente responsable y duro, no le gustaba ver aquello en vivo, especialmente porque no tenía ni la menor idea del porqué.
Se acercó a una mujer que estaba detrás de él, donde la tomó del brazo para hacer que se agachara, tenía una piel azul que nunca había visto.
-¿Qué está pasando?
-Tu no deberías de estar aquí en primer lugar – esa fue la respuesta, no fueran tan despectivos si fuera el legendario Ben 10 ¿no? El frunció el ceño mientras la soltaba.
Esperaba continuar hablando de eso pero su abuelo apareció para sacarlo a rastras de allí, quizás entre más tiempo este alejado de aquel mundo, más seguro estaría.
-¿Qué estabas haciendo? – le preguntó cuándo ya estaban en la oficina.
-¿Qué está pasando? – preguntó el.
-Ben, no puedo hablarte de asuntos del trabajo – como siempre el asunto del chico completamente normal, ahora si tenía el corazón destrozado y con ganas de llorar.
-Abuelo...
-No lo pongas más difícil de lo que ya es – respondió – sé que tanto Rook como Kevin son amigos tuyos en otras tierras y suelen hacer misiones junto con Gwen, pero aquí no es así, Rook tiene un modo bastante duro y difícil de tratar y Kevin es un pirata intergaláctico, habíamos pasado mucho tiempo rastreándolo hasta que la determinación de Rook nos ayudó, pero ya vez, ese interrogatorio no va a terminar muy bien.
Si antes se sentía muy mal ahora se sentía mucho peor.
-Lo siento Ben – terminó con algo de ¿pesar en sus palabras?
Su reencuentro con el amor de su vida no pensó que sería así de desafortunado.
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Sueños
FanfictionCuando el Ben de tierra primera le da el omnitrix al único Ben de todo del multiverso que no había tenido contacto con el, antes de que Vilgax destruyera todo, le pasó los recuerdos de como utilizar el reloj en aquella emergencia sin darse cuenta, p...