5• Para aprender...

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Llena tu vida de actividades fascinantes: de modo tal que tu vida te guste tal y como es, sin ninguna necesidad de compañía masculina. Si por casualidad encuentras compañero, bienvenido a bordo. Pero no andes bus cando pareja para que le ponga sal a tu vida, porque lo que encontrarás será más veneno que condimento.
Por otra parte, es muy conveniente transmitir que no necesitas a nadie, que estás bien como estás. Estar feliz con tu vida es un imán poderoso para todo el mundo... ¿qué mejor que acercarse a una chica que logró lo que deseaba, que es feliz y hace cosas interesantes?

Dedicate a pasarla Bien: cuando hablas con un hombre...
¿te la pasas pensando si le agradas o no, si tu peinado se mantiene en orden o si le sacas tal tema de conversación o no?
¡Relájate! Estás con alguien para divertirte, nada más.
No pienses en caerle bien, si le gustas o si será un buen padre para tus hijos.

Los hombres detectan los nervios y las inseguridades de las chicas y esto los espanta enseguida.

No estés rindiendo examen en cada salida

Piensa que estás saliendo con un amigo, porque eso es lo que él es ahora -y ojalá siempre lo sea-, así que sé amigable, juguetona y divertida, natural y confiada... nada es más seductor que la espontaneidad.

Sal con muchos hombres al mismo tiempo: de este modo, sentirás que todos son amigos y le quitarás presión a cada encuentro. Es mucho más relajado salir con más de uno, porque si con uno la cosa no funciona, siempre tendrás un par más con quienes ir al cine, emitiendo, a la vez, esa sensación de confianza en ti misma que los hombres adoran.

Practica sin parar: si fueras a entrar a una maratón.
¿dejarías de correr un solo día?
Por supuesto que no. Correrías todo el tiempo, si quisieras ser más hábil y veloz. Lo mismo sucede con los hombres. Si quieres ser irresistible, tienes que entrenarte en citas para que cada vez te salga mejor, más divertido, y más relajado y natural. No hay nada más insoportable para un hombre (y es igual para nosotras) que salir con alguien que parece no haber visto un ser humano atractivo en los últimos tres años.
Tus mismos nervios lo ponen nervioso a él. Conversa con cualquier hombre de lo que sea, cada vez que puedas. Practica con el verdulero, con el diariero, con el carnicero, hasta que puedas decirle a alguien en la primer salida "parece que la mejor parte del cordero son los cuartos traseros", con toda tranquilidad y confianza.

Se amable y cortés: parte de la autoestima reside en hacer lo que, en el fondo, sabes que es lo correcto, como ser educada, ayudar adonde te nevestían y ganarte una buena reputación como ser humano. Además de hacerte sentir segura contigo misma, ser amable y educada es ser astuta.
La cortesía abre puertas, la educación marca la diferencia. Si cumples tus promesas, eres alguien confiable, y si los demás saben que eres confiable, te darán más oportunidades.

Sé una líder: no le preguntes a otros qué quieren hacer. Toma tú las decisiones.
Decide cuándo, cómo y qué.
Escucha a los demás, pero que quede claro que tú siempre tienes planes de antemano y que no eres ninguna improvisada.

Hazte experta en algo: ¿clases de quichua, violonchelo, surf, patinaje sobre hielo, cultivo de hortalizas? Lo mismo da, pero que sea distinto a lo que hace el resto de la gente.
Que los demás sepan que tienes un saber especial te da un aura de originalidad extra, que puede ser muy útil a la-hora de impresionar.

No te arregles tanto: y mucho menos en la primera cita. Ponte algo casual, que indique que no has estado seis horas ante el espejo pensando en cómo parecerte lo más posible a Tu actriz favorita
Usa tacos o zapatillas, sal con el pelo húmedo, no te pintes las uñas de rojo, no uses minifalda ni transparencias, no uses medias de red.
Concurre a la cita con él en plan "amiga", con un look poco sexy, para que también él pierda la ansiedad del encuentro y te vea y trate como a una persona, no como a un objeto sexual. Deja los escotes y la falda roja para la cuarta o quinta cita... siempre y cuando el plan no sea ir juntos a ver un partido de fútbol en la tribuna más barata.

Yo soy Candy Donde viven las historias. Descúbrelo ahora