invisible,
Casi todos los días desde la última vez que vi Juliana solo puedo pensar en ella, con ese último mensaje que le deje parece que se la trago la tierra, no paro de ver el teléfono, después de ese día no la soporto le escribí el día siguiente y el siguiente, me siento un poco preocupado y mal por esa reacción que tuvo, ya paso dos semanas sin saber de ella pero le escribí solo 3 días ya luego la deja en paz, no la busque, no quiero parecer un acosador, es que esa noche sentí que fue muy especial, primera vez que me siento de esa forma, pero todo siempre juega a mi contra todo termino de esa forma tan dulce amargo, que no comprendo.
Decido, no darle más vueltas al asunto, ya le dedique mucho tiempo en armar ese rompecabezas. Esa misma tarde me escribe Elena.
-Elena: Tu siempre olvidándome, vamos respóndeme, ya tengo varios días sin saber de ti, ¿Estas bien?
-Elena: No te desaparezcas, si necesitas hablar para desahogar ven yo te escucho y te ayudo. :')
-Yo.: Lo siento, por no responder, estos últimos días no eh tenido muchos ánimos de hacer nada.
-Yo: Pero si quieres nos vemos hoy, le puedo decir a Guillermo que me releve.
-Elena: Esta bien, igual te tenía una propuesta, Te invito a una cita.
-Elena: ¿Te gustaría ir por unos helados de yogurt y galletas?. Así te alegro el día.
-Yo: ¡oh! Que asombro, es ser invitado a una cita.
-Yo: Déjame Pensarlo.
-Yo: No, no quiero ir.
-Elena: ¡Ah! Te detesto, un día me cansare de toda tu arrogancia.
-Yo: Espera, ¡Rayos!, me refería a que no solo quería helado y galletas, me gustaría hacer otras cosas. No sea tan explosiva.
-Elena: Si, te creí, siempre viéndome la cara de ilusa. No importa dime ¿a qué hora pasas por mí?
-Yo: Señorita amargadini, ¿cómo a las 7pm te sirve?
-Elena: Perfecto, te espero a esa hora.
Termino de hacer mis cosas, le digo a Guillermo que me releve solo por hoy, me dijo que si, lo noto un poco raro tengo que hablar con él, de verdad tengo muchas cosas en la cabeza resuelvo lo de Elena y Juliana, Luego hablo con él.
Son las 6pm, salgo a mi casa para alistarme para salir con Elena, tengo que ir no le puedo quedar mal. Cuando voy de camino a mi casa veo a aun chica que se me hace conocida, si es Juliana, va caminando solo por la fría calle con su suéter color rosa, una falda blanca y unas converse blancas, se veía muy hermosa, mis ojos se iluminan al verla, se que se había esfumado, sé que se hace la invisible, toco la bocina y me estaciono a su lado, abro la ventanilla.
— Hola señorita — con una sonrisa que se despliega en mi cara — ¿A dónde va? Si quiere te puedo llevar.
No, dice nada, me mira, veo que mueve sus manos hacia su bolso, sacando sus audífonos , se los coloca y sigue caminando no se inmuto no nada, solo ignoro, camino muy rápido perdiendo se de mi vista, me siento tan fatal cada cosa que tiene que ver con ella me coloca de una manera que nunca había experimentado ojala no se el mal llamado karma, pero aun así mi interés no muere quiero saber lo que pasa ya se está volviendo un misterio. Observo mi reloj son las 6:25pm, se me hace tarde tengo muy poco tiempo, acelero para llegar de inmediato a mi casa.
Al llegar a casa me alisto, voy por Elena, Me puse super guapo para la cita, para hacer sentir a Elena muy especial, Subo al carro, para salir por Elena, al pasar frente a casa de Juliana a juro tengo que pasar por allí para llegar a casa de Elena, veo a Juliana sentada frente a su casa, decentemente la saludo de nuevo, pero esta vez su reacción es peor, se levanta y corre a dentro de su casa tirando la puerta, ¡Fuck! De verdad que es super extraña, no se yo creo que yo estoy loco por querer buscarle sentido a esto.
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Permaneces
RomanceLa vida de Rodrigo a cambiado mucho desde que Juliana Córdoba llego , la dulce chica, es una tormenta muy impredecible, permaneciendo en ella un interminable y oscuro pasado, que ella no puede controlar, llevándose por delante la estabilidad mental...