Capítulo 4

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-Eres Rosé...- Jennie dijo sin pensarlo ganándose la atención de la contraria- Yo... perdón, pensé que tal vez así podía llamarte mientras recuerdas tu nombre.

La chica no dijo nada, solo se quedo pensando. Jennie desvió la mirada avergonzada.

-Claro, si no te gusta lo entiendo perfectamente, yo solo quería...

-Rosé...- La chica la interrumpió pronunciando aquel nombre despacio, Jennie la miro con cuidado.

-Si, Rosé- Dijo emocionada la castaña y la rubia la miro con una pequeña sonrisa.

-Rose...- Volvió a pronunciar esta vez un poco mas segura- Me... me gusta.

-¿En serio?- Se acerco a la contraria y esta no se alejó.- Me alegra.

Las dos se quedaron mirándose la una a la otra, Jennie por fin pudo apreciar cada pequeño detalle de su rostro y volvió a concluir que aquella chica era hermosa.

-Pero bueno...- Volvió a reaccionar la castaña- Tengo que curarte el labio, ¿Puedo?

La rubia trago saliva y asintió tímidamente, Jennie se acercó y con cuidado tomo la mejilla de Rose para que con la otra mano pudiera limpiarle la herida. La desinfecto para después ponerle la cinta especial.

-Listo- Dijo volviéndose a alejar y darle su espacio a la contraria- Ahora solo queda ponerte pomada en los moretones y ya estará.

-Yo lo haré- Jennie la volteo a ver alzando una ceja- Yo puedo hacer eso.

-Veo que ya puedes hablar más- La miro con curiosidad, pero Rose solo la miraba con timidez.- ¿Me puedes decir que te paso?

-Yo... no lo se- Respondió después de unos segundos- Solo recuerdo que desperté en esa habitación con el cuerpo todo golpeado.

Jennie la miro con suma atención analizando cada palabra que decía.

-Encontré una nota con un numero y...- Rosé paro para mirar a Jennie, esta la miro intrigada- y tu nombre.

-¿Mi número?- No tenía sentido aquello, ¿Cómo habían conseguido el número de jennie?- ¿Y el celular desde el que llamaste?

-No se, creo que lo deje en la habitación- Jennie asintió comprendiendo aquello, aunque aquel aparato de hubiera sido de mucha utilidad para entender todo lo que pasaba.

-¿No viste algo en el celular?

-No, aunque ya había otras llamadas hacia el numero al que marque- Jennie abrió los ojos, esas llamadas habían sido las que había recibido en el baño y cuando estaba en el auto. - Yo... estaba asustada y no sabia que hacer. Perdón por haberte llamado y hacerte pasar por todo.

-Hey, tranquila- La agarro con cuidado de ambos brazos para que le pusiera atención- Esta bien, no tienes que disculparte. Me alegra que hubieras llamado.

Rose desvió la mira sintiendo su corazón latir rápidamente, ¿Qué se supone que iba a hacer si no recordaba siquiera quien era ella?

-Sea lo que sea, te ayudare- Dijo Jennie como si le hubiera leído la mente, y sin notarlo sonrió ligeramente al mirar a la chica que la había rescatado.

-Gracias, Jennie...- Susurro mientras sentía como su corazón empezaba a latir.

-¿Tienes hambre? Hay pollo que jisoo compro- Se levanto del sillón la castaña.

-Yo...- Fue interrumpida por un bostezo de ella misma, en seguida se cubrió la boca y bajo la cabeza con vergüenza.

-Tienes sueño- Dijo con una risita Jennie mirando como la rubia se sonrojaba.

La llamada de una desconocida || Chaennie Donde viven las historias. Descúbrelo ahora