Al llegar a California junto con su familia, Kalani Díaz solo espera tranquilidad, pero todo fracasara cuando su vecino le enseñe karate a su hermano
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Desde que tiene memoria, Ethan Moskowitz siempre ha defendido a su hermano de las burlas, pero to...
A la mañana siguiente de la fiesta, los mellizos Díaz se encontraban desayunando en su apartamento en compañía de su abuela, Carmen se encontraba trabajando en el hospital.
- Niños, vayan con su sensei y pregúntenle si quiere desayunar con nosotros- Dijo Rosa sirviendo otro plato- Y rápido, no quiero que se enfrié
- Ahorita vamos- Asintió Miguel tomando un sorbo de jugo
Cuando salieron, notaron que la puerta del sensei estaba abierta pero le restaron importancia.
- Oiga, sensei, nuestra yaya nos dijo que...- Kalani se detuvo en cuanto vio que sus dos senséis se encontraban peleando- Olvídelo
- Volvemos en un rato- Suspiro Miguel regresando a su departamento
Al entrar de nuevo, se apresuraron a asomarse por la ventana para continuar viendo la pelea.
- ¿Y a ustedes que bicho les pico?- Interrogo Rosa acercándose a ellos
- Hay bochinche, yaya- Contesto Kalani sin apartar la mirada- Ambos senséis están peleando, otra vez
- Llevan peleados desde el 84- Continuo Miguel- Koala, ¿puedes ver algo?
- Creo que lanzaron al sensei LaRusso contra la televisión- Respondió Kalani tratando de ver por el espacio de la puerta abierta- Espera, se esta llevando a Sam, dejo a Robby ahí
Con rapidez se apartaron de la ventana para que no los vieran, una vez que escucharon como el auto se marchaba, volvieron a respirar.
- ¿Terminaron?- Rosa pregunto con sarcasmo a lo que los mellizos asintieron- Bien, agarren sus platos y vayan a desayunar con su sensei
- También su hijo esta ahí- Menciono Miguel
- Entonces llévenle también un plato- Rosa se encogió de hombros preparando otro plato- De no ser por nosotros se estaría muriendo de hambre
Con los cuatro platos en mano, se dirigieron al departamento del sensei donde tocaron la puerta para luego entrar con cuidado de no tirar nada.
- Hola- Saludaron al unísono dejando los platos en la mesa
- Nuestra abuela nos pidió que lo invitáramos a desayunar pero vimos el alboroto, entonces nos dijo que lo trajéramos- Explico Kalani tomando asiento junto a Miguel
En silencio, padre e hijo tomaron asiento en la mesa para desayunar aun aturdidos por lo que paso, ninguno hablo en todo ese tiempo.
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El primer día de clases finalmente llego, dándole fin a un verano agitado para los dos dojos mas sobresalientes del valle.
Para ese día, Kalani llevaba un conjunto top de tirantes corto con joggers color blanco, tenis beige y su inseparable collar de concha marina, con su cabello suelto.
