Si pudiera regresar el tiempo

Capítulo XIV: Traición

—Entonces ¿No tiene nada grave? ¿No se le rompió algo? Alguna vena o yo que sé.— Preguntó Louis desesperado al Doctor que se encontraba dándole un caramelo a ambos niños con ojos llorosos, uno en shock por la sangre que vio salir de él y el otro asustado por asomarse por la cortina sin permiso y ver como cosieron el brazo de su hermano.

—Señor Tomlinson, su hijo se encuentra bien, solo fueron dos puntadas, se le caerán solas, en caso de que vea algo anormal, puede traerlo de vuelta y nosotros lo revisaremos.

—Bien, bien, muchas gracias. ¿Puede viajar no? Tengo un viaje a Italia mañana.

—Claro, no hay problema, es un viaje corto.

—Perfecto, muchas gracias.— agradeció con media sonrisa y salió a pasos lentos del lugar.

—Se ve muy pálido Señor Tomlinson, tome un suero, le hará bien, su hijo esta completamente en perfectas condiciones.

Louis asintió —Lo haré. Adiós.

Louis salió de aquel hospital, con James en brazos y Alex tomándolo de la camisa para evitar perder a su padre.

Su mirada estaba cansada, viendo de reojo a Alex y el brazo de James con una pequeña venda blanca a su rededor.

—Vine en cuanto me llamaste ¿Todo bien?— se acercó Zayn corriendo hacía ellos.

—Tío— llamó Alex, estirando sus brazos para que lo cargara.

Zayn lo cargó en sus brazos y se acercó a depositar un beso en la frente del castaño, algo que hacían cuándo eran más jóvenes, antes de que Harry llegara a sus vidas. Un pequeño hábito que volvieron a tomar desde que su amistad se fortaleció durante los pasados meses.

—¿Me acompañas a casa? Estoy exhausto.— pidió el castaño con un puchero.

—Claro y mmmh. ¿Llamaste a Harry?

Harry.

—Lo hice, no me contestó.— dijo con voz apagada.

Zayn asintió incómodo.

Ambos iban caminando hacía el coche con los niños en brazos, cualquiera que los viera de lejos pensaría que son pareja.

Zayn ayudó a Louis a bajar a los niños del coche una vez llegaron a la casa del castaño.

Entraron a la habitación de los niños y depositaron a cada uno en sus respectivas camas.

—Tío Zay.— llamó James.

—Dime pequeño.

—¿Nos puedes contar un cuento?— pidió esta vez Alex leyendo la mente de su hermano.

Zayn lo pensó un poco. Sabía que Harry solía hacerlo.

—¿Por favor?— pidió el menor y al moreno le dolió verlos así.

Louis observaba todo silencioso, hasta que Zayn le dirigió una mirada y el castaño solo asintió con una sonrisa.

Zayn comentó a contarles un cuento algo extraño, solo sabía los de terror que solía contarles a sus hermanas para causarles pesadillas, tuvo que cambiar varios escenarios para hacerlo un poco decente, para al final, al ver los rostros confundidos de los niños optó por hacer algo diferente.

—¿Y si les canto?— preguntó y ambos asintieron emocionados.

Zayn comenzó con una melodía de cuna en urdu. La voz le salía tranquila, que aunque los niños no entendieran ni una palabra de ella, les transmitía paz.

Louis sintió las lagrimas inundar sus ojos y tapó su boca para evitar que salieran gemidos de él.

Zayn cantaba precioso, había olvidado cuanto.