Capítulo 2.

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Hola.

Sé que este capítulo debí dejarlo ayer, pero por asuntos personales no pude, así que aquí está, espero que lo disfruten.


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Podía sentir a las personas moverse a su alrededor, susurrando algo a lo que no quería prestar atención, sino que deseaba darse vueltas en la cama y esconder su cabeza bajo la almohada para dejar de escuchar, pero cuando lo intentó pudo sentir el borde de lo que debería de ser el colchón, recordándose que no estaba en su cama, sino en el apartamento de su mejor amigo, y que como siempre que se quedaba ahí, el sofá era su lugar de dormir.

Años atrás hubiera sido muy común que él durmiera junto a él en la misma cama, pero en algún punto su amigo comenzó a marcar la distancia, algo que en un principio le resultó difícil de entender, al menos hasta que lo tuvo frente a él, sonriendo tímidamente mientras le presentaba a su pareja.

Un chico que era guapo a su parecer y que a Taemin le gustaba mucho, tanto como para comenzar a marcar un poco de distancia con él porque a su novio no le gustaba que fueran tan unidos, igual, esa relación no duró demasiado, porque dicha pareja había querido controlar parte de la vida de su amigo y este no se lo permitió, terminando esa relación, porque no sentía que era sana para sí mismo.

Taemin, había tenido varios novios, pero su número no llegaba a ser ni la mitad de las novias que Min Ho tuvo. Choi había conocido a cada uno de ellos, por eso, no le fue difícil de reconocer quién era la otra persona que hablaba en un tono un poco bajo.

—Te traje el desayuno —se movió alrededor —pero no sabía que Min Ho estaba aquí.

Taemin sonrió algo incómodo mientras regresaba la mirada a su amigo, no podía decir que le gustaba verlo durmiendo en su sofá varios días a la semana, porque eso sólo significaba que su amigo había estado bebiendo y llegó ebrio a su apartamento, y debía de reconocer que no le gustaba verlo así.

—Llegó en la madrugada —susurró —estuvo bebiendo.

Seo Jun, el novio de Taemin, sabía de la situación de Min Ho, porque no podía negar que en un principio se sintió celoso de su cercanía, el encontrarlo en el apartamento de su novio cada vez que él iba, pero había tenido que aprender que Choi era parte de la vida de su novio, eran como un paquete inseparable.

—¿Y qué pasará cuando nos casemos?, ¿Min Ho vendrá a vivir con nosotros?

Las mejillas de Taemin inmediatamente se volvieron rosas ante la mención de casarse, porque Seo Jun había sido muy claro con sus intenciones a futuro con él, pero nada era demasiado formal, sólo como algo que podía suceder y que ciertamente a Lee le estaba ilusionando.

—Si eso sucediera, ¿por qué Min Ho vendría a vivir con nosotros?

—Prácticamente vive contigo.

—Min Ho está triste —Taemin se sentó en una de las sillas de la barra de desayuno —tuvo otra ruptura.

Las cejas de Seo Jun se elevaron un poco al escucharlo, posando su mirad en el cuerpo cubierto ahora hasta la cabeza con la manta. No podía negar que le sorprendía la rapidez con la que Min Ho cambiaba de pareja, y lo mucho que parecía sufrir con cada ruptura, a pesar de que por el poco tiempo que salió con cada chica, a su parecer la relación no sería muy fuerte, sin embargo, empezaba a creer que Choi era un joven que se ilusionaba demasiado rápido y de la misma manera perdía el interés.

—Tal vez él debería de darse un tiempo para sí mismo, no puede iniciar una relación el lunes y el viernes terminarla para beber todo el fin de semana y salir con otra chica el siguiente lunes.

ArielDonde viven las historias. Descúbrelo ahora