Naruto: Una vida diferente

Capítulo 111: Furia

... fuvol
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Naruto aterrizó en un edificio desconocido y miró a su alrededor frenéticamente, sus ojos se deslizaron hacia una fotografía en un estante.

Era una foto de dos personas, más jóvenes, quizás unos once años, una le resultaba familiar, con su cabello color menta y ojos naranjas, y la otra era un niño con cabello largo y liso y oscuro.

Entonces esta era la casa de Fu. Naruto apartó la mirada de la foto, palideciendo al ver su Hirashin kunai incrustado en el piso de madera, estaba clavando un trozo de papel en el piso, y Naruto se lanzó hacia adelante, tirando el kunai del piso y recogiendo el papel con sus temblorosos dedos.

Cayó de rodillas, leyendo las palabras con los ojos.

Hola naruto

Ah, y felicitaciones por tu feliz ascenso, espero que Rin-chan esté feliz. Los veré a los dos muy, muy pronto para llevarme lo que necesito. Dile que no se preocupe. Ella no lo entiende todavía, pero cuando llegue el momento lo hará. Haré el mundo perfecto, uno de paz. Entonces la tendré de nuevo, seremos felices de nuevo.

Lamento no estar aquí, me temo que tuve que llevarme a tu amiguita, ella tiene algo que necesito, aunque admito que me sorprendió lo fácil que fue también, ella dio bastante pelea y sin embargo sólo amenazando a unas personas se rindió. Verdaderamente mi corazón se rompe por el destino de Jinchuriki que no son tan afortunados como tú y Rin-chan.

Si la quieres de vuelta, entonces ven al Valle del Fin una vez que hayas terminado con Gaara-kun.

Deberías estar agradecida, Naruto-chan, tuve la amabilidad de enviar un equipo que sé que podrías detener.

No había nombre, pero había un símbolo familiar estampado al pie de la nota.

El símbolo Uchiha.

Los dedos de Naruto se curvaron en la nota mientras ella se ponía de pie tambaleándose, su corazón latía con fuerza en su pecho, la sangre rugía en sus oídos.

"¿Dónde están Kurama?"

"... No sé."

Había pánico en la voz de Kurama, "La tiene en algún lugar donde no puedo sentirla Naruto"

"Eso no es posible".

"Naruto, no puedo sentirlos."

Y Naruto sabía que Kurama no estaba mintiendo, ella lo sabía, pero odiaba admitirlo. Necesitaba encontrarlos, necesitaba salvar a Fu. Kami, ¿cómo había llegado Obito a ella? ¿Seguramente no debería haber estado sola con Akatsuki alrededor?

"Mocoso, sabes que no estás siendo racional-"

"Ella debería haber estado siendo vigilada."

"No estás siendo vigilado-"

"¡Eso es diferente!"

"Mocosa, necesitas calmarte."

"¡No!"

Naruto salió furioso de la casita, sin importarle las miradas de conmoción y miedo que tenía de las personas que pasaban por su lado.

"¿Dónde está tu líder?" preguntó, "¿Dónde?"

"¿Tú-qu-quién eres tú?" fue una mujer que respondió, cabello oscuro, con ojos oscuros y rostro pálido, luciendo muy nerviosa.