"Make me Ah" [Carligor]

03. Perfect Man ♡

● Lo que está entre comillas ("...") son pensamientos!.

● Contenido +18

‐
Fedor organizó una reunión para contar las nuevas estrategias y medidas sobre los negocios de armas, drogas y mercancías varias.

Reuniendo en la carnicería a los miembros más importantes de cada banda u organización existente.

Ambos hermanos estaban tensos, la noticia de que su padre vendría, los ponía en alerta al máximo, las consecuencias de cometer un error ahora les costaría muy caro.

Ese hombre no media sus castigos sin importar si era su propia sangre la que debía derramar para imponer su autoridad.

Carlo conocía hasta donde era capaz de llegar no por algo estaba obligado a percancer junto a Toni, aún cuando le sucedieran el cargo de Don en Italia.

La tarde transcurrió de forma normal, pero la tensión de los rubios era demasiada, solo los cercanos conocían sus actitudes y esta no era una que se mostrara normalmente, sobretodo para el cyborg ruso que miraba al menor con intriga.

Hai saco a Toni junto a Fedor, Salinas y José a jugar al casino. Después de que retiraron los demás líderes, según el para agradecerle al ruso mayor por el buen plan de negocios que armo entre toda la ciudad y los beneficios que les daría en un corto plazo.

Solos en la casa, Igor no apartaba su mirada sobre el, tratando de descifrar el motivo de su conducta.
Ya que se negó de inmediato al salir con todos a su querido casino, no entendía el porqué, pero no sentía que debería meterse aún más en sus asuntos.

El silencio se rompió al ver como Carlo le agarraba de la mano sin mirarle, desconcertado por el tono de su voz.- ¿Puedo tocar el piano un rato?, después me iré, sin hacer ruido.

Al pelinegro le molestaba el contacto físico o que invadieran su espacio personal de esa forma tan descarada e imprudente, pero no podía negar que le afectó demasiado.- Claro, puedes quedarte todo lo que gustes.

Carlo sonrió un poco y se alejó, para dirigirse al costoso piano de color caoba, perfectamente cuidado. Con calma levanto la tapa y delineó las brillantes teclas de este con sus dedos, sonrió complacido.

Igor volvia a mirarle desde el otro lado de la habitación encantado con la dulce y vibrante melodía del instrumento.
Carlo tocaba con mucha experiencia y una maestría indudable cada una de las notas, aumentando la velocidad sin ser tan escandaloso, deleitando a su único espectador con su mini concierto improvisado.

Las canciones pasaban de una forma tan natural que no interrumpían el ritmo, al contrario era tan suave y delicado como una caricia, tan envolvente.

El tiempo pasó tan rapido para ambos, que cuando carlo tocó la última nota Igor se permitió aplaudir por el increíble y magnífico espectáculo que le regaló, agradecido de apreciar la habilidad de su compañero.

Causando cierta vergüenza en el joven italiano, quien agradeció con una pequeña sonrisa.

El ruso se acercó a él ofreciéndole una copa de vino.— No sabía que tenía tan buen gusto para la música.

Agarro la copa, tomando un poco de vino degustando lo.— Hay muchas que no sabes de mi Igor, realmente necesitaba tocarlo desde que lo vi la primera vez que vine aquí.

Un breve silencio se instaló, estaba realmente comodo a su lado, pero aún tenía que preguntarle directamente. — Carlo... ¿Usted y yo estamos en paz ahora?