En la sala, a un lado de la ventana, recostada sobre un sofá es donde le cuento al cielo mi dolor sin razón alguna. Un sentimiento de nostalgia con tristeza me ha invadido y me temo que la razón solo son dolorosos recuerdos y traumas creados con el tiempo... Y digo que no hay razón ya que para cualquier persona el que me sienta de tal forma por recuerdos no es una razón fundamentada, tan solo es debilidad.
Pero, ¿Te has roto tú el corazón recordando el pasado?, esos momento que en su tiempo te hicieron sentir con ganas de no seguir o aquellos que te hacían pensar que todo acabaría ahí. Sin embargo años después aquí estás, seguiste adelante con tu vida, pero, ¿Después de tanto tiempo los has superado?, bueno, todos tenemos dolores del pasado que atormentan el presento y seguirán en el futuro y está bien porque es parte de la vida, superar cada trauma y cada mala experiencia que lo causo es uno de los mayores retos humanos; el dolor causado en el pasado es que te hizo quien eres en el presente y quién serás en el futuro, los traumas que has vivido te van a seguir siempre, solo debes aprender a vivir con ellos y no que ellos vivan contigo, dominarlos y no que nos dominen, poder hablar de ellos sin sentir un nudo en el pecho, reírte al recordar todo lo que pasó, todo el dolor que llegaste a sentir y darte cuenta que ese dolor aún vive pero no dentro de ti, solamente en tus recuerdos y que es mejor dejarlo ahí.
Y todo esto lo pensamos normalmente a media noche, porque es cuando más débiles somos, más humanos, más frágiles, es cuando nuestro corazón se abre y deja salir todo lo que el pobre ha retenido para poder llegar al final del día.
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Escritos de una Loca
Short StoryEsto no es una novela, esto no es una historia de ficción, tampoco es un relato creado por mi imaginación. Esto es yo, está soy yo.