Hija De Odín | segunda temporada

capítulo 18

Ya llevábamos dos semanas en Wessex, la verdad es que hacerme la idea de que estaríamos en tierras cristianas por mucho tiempo no me gustaba, pero Thor y yo supimos controlarnos  y no saltar enmedio de la aldea a decir que su Dios es falso.

- ¿qué haces? - escuché la voz de Thor detrás de mi

- observo la lluvia ¿estás ciego? - dije sin mirarlo

Estaba sentada sobre mis rodillas en el sillón viendo por la ventana de la casa.

- ¿ya hablaste con Björn? - se sentó a mi lado y me acomodé para mirarlo

- ¿sobre qué? - pregunté

- ya te toca pelear con los aldeanos - dijo

- ¿enserio? - sonreí emocionada

- sí - suspiró - al parecer no quieren que yo lo haga ya que podría matarlos, y alguien más débil es una buena opción - dijo burlón

- cierra la boca - golpee su pecho riendo - ¿entonces ya están listos? - pregunté

- para éso pelearán contigo, si logran estar a tu altura, entonces sí - dijo - estamos listos para ir por Ivar

Miré el suelo y pensé en lo que acaba de decir Thor, "ir por Ivar" que extraño suena éso.

- hola - entró Björn a la casa y nos miró - ¿estás lista? - preguntó

- ¿tan pronto? - me puse de pie

- entre mas rápido mejor - respondió dando media vuelta

Los tres salimos de la casa y caminamos entre los aldeanos, pasamos por el mercado y pude ver a lo lejos a Lagertha caminando junto a Heahmund, sonreía.

- mira, ya tienes padre nuevo - golpee el pecho de Björn burlona, él también los vvió

Suspiró y me sonrió sarcástico, yo reí con más ganas. La verdad mi corazón se llenó de alegría al ver a Lagertha así, veo su alma tranquila y en paz al hablar con Heahmund.

- buenos días, Gisli - saludó Alfred cuando llegamos al campo de entrenamiento

- buen día Alfred - dije - ¿cómo está tu esposa y tu madre? - pregunté

- ellas están bien - miró a sus hombres, formados hablando entre ellos - vine a ver si están listos mis guerreros, si no te molesta

- para nada, me gusta tener público - le sonreí y él me sonrió

- recuerda, no los mates, no los lastimes, los necesitamos - se puso frente a mi Thor

Asentí y tomé la espada que me daba.

La llegada de Thor levantó sospechas en Wessex, los aldeanos decían que era mi esposo, llevé yo misma a Thor a que conociera a Alfred, al principio no le agradó ya que cuando le sirvieron una copa de Vino a Thor, él lo arrojó al suelo exigiendo más.
Con el tiempo Alfred no tuvo de otra, no son amigos, pero se respetan.

- cuidate mucho - me dió Björn un escudo

- ¿le dices a un León que tenga cuidado de cazar a un conejo? - dije burlona - estaré bien

- te olvidas de que yo los entrené - sonrió

- más fácil todavía - respondí

Di media vuelta y caminé alfrente de los hombres de Alfred

- ¡buenos días! - grité, enseguida guardaron silencio y se enderezaron - hoy concluyen sus entrenamientos, hoy se decide si van a casa a descansar o se quedan más tiempo entrenando junto a Björn y Ubbe, han sido entrenados por más de dos semanas y ya deberían de ser capaces de sostener una espada correctamente, hoy lucharán conmigo uno por uno - dije - yo seré quien decida si van a casa o no

- ¡no quisiéramos lastimarla, bella dama!  - escuché a un hombre detrás de la fila

- ¿quién dijo éso? - pregunté

Todos se abrieron paso dejándome ver a un hombre un poco más grande que yo, él sonreía orgulloso de haberlo dicho.

- camina a mi - dije

Él miró a sus compañeros y decidido caminó a mi. Miré a Björn y a Thor y ellos negaron, creo que ya saben lo que voy a hacer.

- tu nombre - dije cuando se paró frente a mi, estábamos de la misma estatura

- Isaac, señorita - dijo

- ¿crees que te sientes listo para una batalla? - pregunté

- eso creo - respondió

- ¿éso crees? - lo miré a los ojos - eres narcisista para sentirte superior a otros, ¿pero no crees estar listo para pelear? - pregunté

- con todo respeto, pero las batallas no se ganan con narcisismo, se ganan con fuerza

Reí poco y miré a Thor, él negó con más fuerza.

- ¡espero que todos estén prestando atención! - dije mirando a los demás hombres - quiero que entiendan que una batalla se gana con decisión y dedicación, no sólo con fuerza - mire a Isaac - la fuerza no te sirve si no sabes como manejarla, ni siquiera necesitas tu fuerza, puedes usar la fuerza de tu oponente a tu favor

- estaría encantado de probar lo contrario - me sonrió y me guiñó un ojo

Así es como me gusta, un guerrero decidido y confiado.

- ve por tu espada - dije dura

El hombre dio media vuelta y caminó por una espada sobre la mesa. Björn me hizo señas y lo miré, "no lo mates" fue lo que leí de sus labios, después mire a Thor y él susurró un "mátalo".

Les sonreí y miré a Isaac caminando a mi, orgulloso.

- sostén bien la espada - dije

Él enseguida la tomó con más fuerza.

- si vuelves a tomar una espada como si fuera algo insignificante te cortaré las manos - dije - ¡una espada se toma con fuerza! - miré a los hombres - ¡la espada es lo único que los separa entre la vida y la muerte y tienen que tratarla con respeto!

Miré a Isaac y vi que no traía su escudo.

- ¿y tu escudo? - pregunté

- no lo necesito - me miró a los ojos

- ¡segundo error! - gritó Ubbe - ¡y contando!

Miré a Ubbe que iba llegando al campo de entrenamiento junto a Torvi, me sonrieron, les sonreí devuelta y después miré a Isaac.

- muévete - le dije

Él dio dos pasos atrás y se puso en posición de ataque, arrojé mi escudo al suelo para estar parejos y di dos pasos atrás igual que él. Le hice una seña y él corrió a mi.
Resbaló por la tierra que se había hecho lodo gracias a la lluvia y todos comenzaron a reír. Al parecer sí se lastimó el pie ya que comenzó a gritar mientras lo tomaba entre sus manos.

- ¡no me sirven si no se saben adaptar al clima! - grité mirando a los hombres y enseguida guardaron silencio - ¡¿a quien carajos se le ocurre correr sobre el lodo?!

Llegaron dos guardias de Alfred a levantar a Isaac del suelo y rodee los ojos, miré a Thor y él reía junto a los demás.

Ésto será sencillo.

- ¡¿quién sigue?! - pregunté