Habrían pasado ya dos semanas desde que empezaron los problemas legales con Sharon, estaban a pocas horas de volver a New York, estaban terminando de empacar. Los días anteriores Nat se sentía muy mal, mareos, nauseas tenía síntomas de embarazo, sin embargo, no le dijo nada a Steve si era verdad sus sospechas quería hacerlo como que fuera una sorpresa. Steve se le notaba bastante estresado por los problemas que estaba teniendo con Sharon, los abogados dijeron que lo mejor era que lo conversaran, cosa que intentaron, pero Sharon se reúso a cooperar, ella dijo que básicamente estaba siendo engañada y que ellos merecían algún tipo de castigo. Los abogados siguen peleando, pronto irían a juicio, no van a ir a la cárcel, pero esto se le fue de las manos de todos, el acuerdo era que Sharon tenía que alejarse y deshacer cualquier tipo de acusación hacia ellos, cosa que acepto para Sam Wilson, confesó que él no tenía nada que ver. Pero que quería mantener las demandas hacia Nat y Steve, los seguidores piden que pare de hacer sufrir a ambos, que no se merecen tal trato, que básicamente era una estupidez. Steve estaba aterrado de lo que le podría suceder a Nat, se preguntaba "Y si ganamos ¿Ella seguirá molestándonos? Y si perdemos ¿Esta relación se derrumbará?" siempre se hacia esas preguntas, pero estar con Nat lo distraía completamente, era como si Nat fuera la luz en su camino.
Steve - ¿Estas lista? -.
Nat – Si, solo dame un segundo – termina de comerse unas galletas y dice – Ahora si -.
Steve – Amor, ¿estás bien? Estas comiendo mucho, además has estado un poco pálida estos días -.
Nat – Tranquilo cielo, es que esas galletas del bar son muy adictivas -.
Steve – Eso es cierto – se agacha y habla a su abdomen – Se bueno con tu mami ¿okey? -.
Nat – Él es un buen bebé cielo, él se está portando muy bien -.
Steve - ¿Cómo que esta? -.
Nat – Pues me imagino – dice intentado hacer que no crea que cree que está embarazada.
Steve – Claro – dice un poco desconfiado.
Nat – Cielo, y tu como estas. Anoche fue la primera noche que dormiste bien -.
Steve – Estaré bien cuando volvamos a casa -.
Nat – Amor -.
Steve – Tranquila, yo voy a estar bien. Solo que estoy un poco pensativo sobre ir a juicio -.
Nat – Amor, cálmate. Nosotros no hemos hecho nada malo, ella esta presentado acusaciones por celos, estoy segura de que este no era su plan -.
Steve – Eso espero, vámonos -.
Nat – Si, capitán – en su mente – Bebé, necesito que no me des nauseas ¿okey? Mami va a subirse a un avión y no quiere estar mareada todo el tiempo, necesito que seas bueno ¿okey? -.
Steve – Amor, vámonos -.
Nat – Ah sí perdón, estoy un poco atontada. No dormir bien anoche -.
Steve – Tranquila, pronto llegaremos a casa y te voy a consentir mucho -.
Nat – Me parece bien -.
Van al ascensor, bajan a la entrada, pagan su hospedaje, van hacia el auto que, en realidad, es de Sam. Sam vive en Los Angeles, solo que por trabajo vive en el hotel. Está esperando a casarse con Maria para poder comprar una casa que había estado viendo desde que se comprometió con ella.
Steve – Cielo, ¿Qué miras? -.
Nat – A mi hermoso rubio -.
Steve – Estas viendo mi lado bueno, entonces -.
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El destino nos unió - By: AnaRogersRomanoff
RomanceNatasha Romanoff una empresaria muy exitosa, decide tomarse un año para volver a ser la persona persona que era antes; la que salía, no la que se queda en una oficina todos los días. Volver a ser la persona que era antes de volverse exitosa. Decide...