TU RIDDLE, YO GRANGER

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Al verlo bajo esa luz tenue una sonrisa ladeada se hizo presente en su rostro delgado, lo detallo  de manera perspicaz; el color de sus ojos la hipnotizó los primeros segundos, luego se fijo en las cicatrices plasmadas en el puente de la nariz y e...

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Al verlo bajo esa luz tenue una sonrisa ladeada se hizo presente en su rostro delgado, lo detallo  de manera perspicaz; el color de sus ojos la hipnotizó los primeros segundos, luego se fijo en las cicatrices plasmadas en el puente de la nariz y en su pómulo derecho, para así bajar a sus labios delgados y de un color rojo como si el chico usara labial, pero estos eran un color plenamente natural.

los latidos de su corazón se volvieron lentos y capaz de sentir la sincronización los los latidos de el aunque estuvieran a una distancia prolongada. 

sintió la saliva acumularse en su boca y trago, el espero con una ceja levantada a que ella dijera palabra alguna, de alguna forma el ambiente se torno incomodo. Hermione se percato de eso de manera inmediata así que solo ensancho su sonrisa aun mas y ofreció su mano para saludar.

- Hermione Granger, un placer- termino de decir, pero el aun sostenía de su mano y acaricio su parte superior con el dedo pulgar.

- Mattheo, un gusto conocerte. Hermione.- al escucharlo pronunciar su nombre sintió tambalearse, algo misterioso y nuevo emergía de el con tan solo decir palabras cortas, como una incógnita o algo mas llamativo que eso, nada que pudiese decir misterio.

con delicadeza dejaron caer sus manos a sus costados y el no tardo en meterlas al bolsillo, por otra parte ella las junto detrás de su espalda. el silencio volvió y solo se escuchaban las ululaciones de los búhos a lo lejos del castillo.

La chica lo observo pasearse alrededor de ella al mismo tiempo que alzo la mirada siguiendo la de el, al acabar enfrente de ella saco un cigarrillo.

-¿tienes fuego?- pregunto apuntando el cigarrillo a las narices de Hermione, ella negó pero saco su varita y lo apunto.

el no se movió y dejo que ella lo hiciera a su manera.

-No tengo un encendedor, pero si un hechizo-

- hazlo chica- 

-incendio-

el hechizo fue preciso y el sonrió en agradecimiento para luego llevárselo a los labios.

- eres buena- comenzó a decir inhalando el humo y dejándolo salir- pero no lo suficiente.

ella se sintió alagada en un principio, pero arrugo el seño al escucha las ultimas palabras del chico.

- soy la mejor de mi clase- dijo ella cruzándose de brazos, si algo no le gustaba a la castaña era que la subestimaran, ella podía hacer todo diez veces mejor que cualquiera y todos sabían lo competitiva que era. solo un oponente en segundo lugar la ponía inquieta, ya que el seguidamente estaba pisándole los talones. 

una sonrisa inquietante se escapo del chico haciendo mover su cabeza de un lado a otro de manera negativa- existen varios tipos de inteligencia, la tuya es basada en información de libros y empeño para no ser excluida del mundo mágico. Eso no te hace mejor, en cambio yo si lo soy- 

DOS DESEOSDonde viven las historias. Descúbrelo ahora