Harry Potter y la Extinción Mágica.

Capitulo 49

La batalla de sus vidas..

Con un grito desgarrador Harry miró al cielo —¡Noooo! ¡Noooo!—

Ron se le acercó mientras Minerva con la mirada más triste que se le haya visto se acercaba a Lexa quien estaba de rodillas en el piso sollozando fuertemente.

Exes estaba en shock, su mente parecía quedarse en blanco, su voz se apagó, y como robot caminó hacia su esposa.

Merlin seguía llorando en silencio, su vista fija en Hermione.

Poco a poco Madame Pomfrey fue despertando, se crispó al oír solo sollozos y no los quejidos de Hermione, se levantó y se acercó a la muchacha.

Sus manos tocaron el cuello de la Gryffindor sintiendo que el pulso ya no estaba ahí, pasó saliva mientras sus ojos se dirigían al vientre.

Harry volvió al lado de Hermione, sus ojos llenos de lágrimas, toco la mano de la Castaña, y la apretó suavemente.

Con delicadeza colocó su cabeza de lado en el vientre de Hermione, y exclamó con mucho dolor, —Por.. porfavor.. no.. no puedes dejarme.. no ahora.. no nunca.. Hermione.. por favor.. despierta..—

Harry no sabía si estaba alucinando o no, pero casi podría jurar que podía escuchar un leve golpeteo que se originaba dentro de Hermione.

Madame Pomfrey se hizo a un lado con una mirada triste y desolada, se acercó a los Señores Weasley que estaban en la entrada con semblantes pálidos.

Harry siguió llorando inundando el vientre de la Castaña que yacía sin moverse.

Merlin sintió su pecho contraerse, se colocó del otro lado de Hermione, cerró sus ojos, y dijo —No te rindas Hermione, aun estas a tiempo de alcanzar y comenzar de nuevo... No te rindas que la vida es eso, continuar el viaje, perseguir tus sueños, destrabar el tiempo, correr por lo escombros, tocar el cielo, solo.. no te rindas, no cedas.. aunque el frío queme, aunque el miedo muerda, aunque el Sol se esconda y se calle el viento.. yo lo se.. y todos lo saben, aún hay fuego en tu alma.. aun hay vida en tus sueños y dentro de ti.. hay un amor inmenso que te esta esperando.. tu familia, tus amigos.. te están esperando..—

Un silenció siguió a las palabras de Gran Mago, lo único que se escuchaba era el sollozo de Harry.

Exes trataba de acercarse a su esposa pero la jaula realmente quemaba a todo lo que se acercara.

Minerva permanecía callada.

Ron tocó el hombro de su amigo, su mente regresó a la vez en que se encontraron con la misma imagen de Hermione muerta, en Ilvermorny.

Afuera la batalla seguía, los aurores luchaban con todo contra los Mortifagos.

Kingsley lideraba un gran grupo de hombres y mujeres que defendían la entrada de Hogwarts.

En el Gran Comedor seguían tratando de abrir la puerta.

Blaise dijo —¡Es una pérdida de tiempo! ¡Sellaron la puerta! Yo creo que esperemos—

Ginny exclamó —¡¿Esperemos?! ¡¿A qué?! Todos allá fuera están en peligro.. necesitan nuestra ayuda..—

Blaise molestó dijo —¡Si necesitan nuestra ayuda no nos hubieran encerrado!—