4

128 5 7
                                    

Capitulo 3: La percepción de los actos: Parte 3, acto 1

Jack pudo ver la enorme sombra mientras iba pasando por el cielo, maldijo por lo bajo, no quería que las cosas comenzaran de esa manera, no es que le tuviera miedo a esos monjes, pero si era sincero tampoco quería verlos desde ese momento. Bueno al menos no a todos ellos.

Es verdad que quería ver a Omi y tal vez iría a visitarlo más tarde después de tener la reliquia, pero no en el campo de batalla donde de nuevo diría de esa manera su nombre, porque si lo hacia sentía que estaba traicionando a alguien que veía como hijo. Malditos instintos maternos.

- Querida hermanita - dijo Jack tratando de llamar la atención de Ginebra que estaba a unos pocos metros de él buscando como cazando un tesoro.

- Dime Jackie - comento esta aun en la distancia, era el apodo que le había puesto la bruja esa pero por alguna razón ya no tenia resentimiento con Wuya, al menos de nombre, volver a verla seria un verdadero problema. No obstante Ginebra decía su nombre diferente, tan feliz de llamarlo así, verdaderamente como su familia. Pero estaba divagando mucho. Mal habito.

- Están llegando los guerreros Xialoin, si ellos están aquí los Heylin estarán muy pronto a la vista también, debemos comenzar a tomar esto enserio - declaro Jack y era justo por este tipo de pensamientos y acciones que se les había dejado a ellos esta misión. Conocían el terreno y las personas que estaban enzarzadas en esta lucha del "bien y mal" y que por lo tanto confundiría el objeto que estaba frente a ellos.

- Bien, te enseñare a hacer el localizador y luego si nos vuelve a pasar esto tú lo harás, no quiero que ellos usen tu pasado para pelear contigo - comento con convicción; Jack había llegado a ella casi roto, no dejaría que estas personas nuevamente hiciera algo como eso.

- Bien, solo has lo que tengas que hacer, están como puedes ver bajando por ahí - dijo Jack señalando a los monjes, mientras Ginebra corría hacia una pequeña parte de la llanura para poner en el suelo unos extraños símbolos en la tierra, los estaba reconociendo.

Runas, esto utilizaba runas Célticas, tenia sentido si las reliquias eran artefactos de las primeras eras, aunque el hecho de combinarlas con Babilónicas era desconocido para Jack, habían salido de rápido y por supuesto solo le habían enseñado de momento a uno el proceso de búsqueda rápida.

Ginebra abrió los ojos como si ellos marcaran la ruta, pero Jack vio claramente a la serpiente de humo que se formaba yendo de forma lineal hacia las cuevas que antes habían ignorado, eso les estaba dando la pista, luego quedaba seguir otra vez la energía, que bastante pesada ahí afuera ya era.

- ¿¡Jack Spicer!? - ahora para empezar la voz no vino de su pequeña bola de queso, si no de todos los monjes del Xiaoling y era más de una profunda sorpresa que de pelea, vaya, los pequeños buenachos le habían extrañado, al menos era algo que sabia era sincero, la sorpresa no se podía controlar hasta cierto punto.

- Buenos días, los saludo monjes, es bueno ver que los cuatro están vivos y con aparente buena salud después de cinco años sin su presencia - decía Jack con un poco de fanfarria, quería divertirse, si bien no se había tragado un diccionario como uno de sus compañeros, de quien se burlaría después por enseñarle un lenguaje tan formal solo por lo que valían la cara de los que solía llamar "perdedores".

Antes de que los chicos pudieran reaccionar, una pequeña roca sin mucha fuerza impacto contra la espalda, solo para llamar su atención. Ginebra le hablaba en lengua de señas, hablar muchos idiomas y otros como código morse, braille y de señas para situaciones así, ya había encontrado una cueva exacta, solo tendrían que entrar.

'Encontré el lugar' señalaba su hermana con señas.

- Como dije fue un honor volver a verlos, lamento que tenga que retirarme - comento solo siendo amable, de alguna manera estaba aquí en este momento por su pasado, uno ligado a los monjes. Con ello corrió hacia Ginebra y luego ambos hacía la cueva.

¿Y si mi destino es...?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora