Jungkook corrió apurado a la casa de Taehyung. Habían quedado de verse hace una hora, pero como era de esperarse, se retrasó.Llegó frente a la puerta con su respiración agitada, pero no le dio tiempo de reincorporarse cuando la puerta se abrió y dejó ver a un molesto Taehyung de brazos cruzados.
—Cuéntame, Jungkook. ¿Cuál es tu excusa esta vez?
—Y-yo —dijo intentando tomar aire pero tosiendo en el intento—. Estaba, e-eh, ya sabes, estaba cuidando el robot de Muyeong.
—¡¿Tiene otro?! Me sorprende la cantidad que tiene esa chica, yo no podría hacerme cargo de tantos cachorros.
—¿Cachorros? ¿De qué hablas?
—A-ah, ya sabes —Taehyung intentó explicar un poco tímido—. Leí unos libros y decían que los cachorros eran unos seres vivos pequeños super lindos, y que la gente cuidaba, de hecho, hay un dicho de hace años que decía "el perro es el mejor amigo del hombre"
—¿Cachorro, perro?
—Ah, sí, son lo mismo —rió—. De hecho tengo unas imágenes en el libro, eran sumamente hermosos.
Jungkook sonrió negando con la cabeza. —¿Por qué te interesa tanto eso? Son sólo libros de fantasía, ya sabes. De todas maneras, ¿por qué te interesa tanto cómo vivían antes? Da igual.
—Cómo siempre tú, a veces me pregunto porqué eres tan insensible, pero te entiendo, es un tema delicado.
—En fin —dijo ya más calmado—. ¿Para qué querías encontrarnos?
—Oh, sí. Sígueme.
Jungkook siguió a Taehyung hacia el elevador que los teletransportó al último piso del rascacielos.
Ambos llegaron y la brisa los recibió con fuerza, estaban muy alto. Taehyung suspiró mirando el cielo vacío.
—¿No es melancólico? Es tan oscuro y, no hay vida.
—¿Te refieres al cielo? Taehyung, el cielo siempre ha sido así.
—Lo sé pero...
—¿Pero?
—Dicen que en lugar muy lejos, más allá de esta cápsula, existen las estrellas.
—¿Estrellas? ¿Qué es eso?
—Son preciosas bolas de luz, que iluminaban el cielo hace millones de años.
—¿Aquello no era un mito?
Taehyung giró a ver los ojos de Jungkook.
—Tus ojos son dos cielos.
Jungkook sintió como su corazón palpitaba de manera irregular, no sabía si era por la altura o por el comentario del chico que le gustaba.
Taehyung comenzó a acercarse hasta quedar a centímetros del rostro de Jungkook, tan sólo mirando sus ojos. Mientras Jungkook permanecía inmóvil intentando no soltar un jadeo de sorpresa.
—Definitivamente, aquellas estrellas harían brillar tus ojos de manera magnífica —dijo sonriendo.
Jungkook no tuvo tiempo de procesarlo cuando las luces se apagaron y frente a él un espectáculo de luces se hizo presente.
Jungkook abrió sus ojos en demasía sin poder creer lo que veía, era precioso.
Taehyung esta vez estaba a su lado viendo su reacción. Su idea de reflectar estrellas salió bien, y sonrió satisfecho.
—Lo sabía, definitivamente en tus ojos brillan las estrellas. Brillaré en ti.
Jungkook sintió sus ojos picar, ¿estaba apunto de llorar? No podía, tal vez era por el hermoso brillo de aquellas. O por el precioso momento que le estaba ofreciendo Taehyung antes de partir.
Lo sabía, Jungkook sabía lo que sucedía, incluso si Taehyung lo ocultaba demasiado bien. Era inevitable que Jungkook no se diera cuenta de sus actitudes tristes. Taehyung moriría en poco tiempo.
Aún recuerda el vívido momento donde su madre le confesó entre lágrimas que Taehyung no viviría mucho. Recuerda lo mal que la pasó, y los extensos días que ignoró a Taehyung porque no se atrevía a tan solo pensar que la persona que amaba lo dejaría.
Dejó esos recuerdos de lado y se concentró solo en él, apreciando cada parte de su rostro.
Jungkook miró a Taehyung quien sonreía tiernamente, por consiguiente él también sonrió, estaba conmovido.
Jungkook no tuvo tiempo de pensar cuando los brazos de Taehyung lo rodearon y sus manos acaricaban con parsimonia su cabello.
—Me convertiré en una de ellas, me convertiré en una estrella —dijo Taehyung separándose de él para mirarlo a los ojos y sonrió, de nuevo—. Así que cuando esta cápsula sea retirada, podrás encontrarme en el cielo.
Jungkook esta vez soltó un quejido de dolor, y un llanto contenido explotó sobre el hombro de Taehyung quien seguía abrazándolo con fuerza.
—Taehyung, te prometo que esperaré cada día de mi vida hasta poder verte de nuevo en las estrellas.
—Sé que estarás ahí, te miraré directamente a ti cuando eso suceda.
—¿Lo prometes? —Taehyung asintió.
—Me mantendré aquí —dijo Taehyung llevando su mano al pecho de Jungkook.
Jungkook sostuvo aquella mano con fuerza entre lágrimas. Apretó su mentón para controlar su llanto y confesó.
—Te amo, Taehyung.
—Yo también te amo, Jungkook.
«Cuando te sientas solo, mira directamente el cielo, ahí estaré consolándote.»
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Luces en el cielo. Taekook/Kookv
Fiksi Penggemar«-𝐷𝑖𝑐𝑒𝑛 𝑞𝑢𝑒 𝑒𝑛 𝑙𝑢𝑔𝑎𝑟 𝑚𝑢𝑦 𝑙𝑒𝑗𝑜𝑠, 𝑚𝑎́𝑠 𝑎𝑙𝑙𝑎́ 𝑑𝑒 𝑒𝑠𝑡𝑎 𝑐𝑎𝑝𝑠𝑢𝑙𝑎, 𝑒𝑥𝑖𝑠𝑡𝑒𝑛 𝑙𝑎𝑠 𝑒𝑠𝑡𝑟𝑒𝑙𝑙𝑎𝑠. -¿𝐸𝑠𝑡𝑟𝑒𝑙𝑙𝑎𝑠? ¿𝑄𝑢𝑒́ 𝑒𝑠 𝑒𝑠𝑜? -𝑆𝑜𝑛 𝑝𝑟𝑒𝑐𝑖𝑜𝑠𝑎𝑠 𝑏𝑜𝑙𝑎𝑠 𝑑𝑒 𝑙𝑢𝑧, 𝑞𝑢𝑒 𝑖...