El ORFANATO

capitulo 2 PASA ALGO ESPANTOSO.

Mientras están hablando los tres, aun con sus piyamas como a eso de las 7:30 am, escucharon un grito de una niña de otro grupo. Fue un grito aterrador. Will asustado, les pregunta a los chicos.

-¿Dónde están los niños? y repite con cierta angustia y desespero ¡¿dónde están?!

Leo responde.

-Calma Will, están con Lanna no te preocupes.

Entonces los tres ven a todos los niños del orfanato reunidos, y deciden ver qué pasa y es ahí donde ven una escena espantosa, cerca del baño está el gato del conserje, horcado con una bolsa y lleno de sangre, el gato llamado Joy de color gris era un gato muy tierno y querido por todos los niños, ya que era la única mascota que había en el orfanato. Para los niños era la  primera vez en su vida donde veían un animal muerto y de una manera tan horrible. El conserje llamado Brans, de poco pelo, narizón, y cara arrugada, viendo su gato horcado se enfureció y decía:

-¡¿Quien fue?! ¡¿Quién lo mato?! ¡Díganme! Respondan, ¡¿quién  fue?! Gritaba y decía, lo pagaran caro se los aseguró!

Frank entre susurros le dice a Will:

 ¿Quién lo haría? pobre joy, era muy lindo todas las mañanas jugaba con nosotros, porque harían algo tan horrible.

Escuchándolos susurrar el viejo Brans agarra a Frank por un brazo y le dice.

- ¡fuiste tú, lo pagaras caro!

Frank, asustado y muerto de miedo decía.

-¡No señor Brans no fui yo, lo juro no fui yo déjame!

De repente llega la madre Ester.

-¡¿Que está pasando aquí?! ¡¿Porque tanto escándalo?! ¡Suelta al niño Brans.!

Brans, responde.

-¡Ellos mataron mi gato, yo los escuché!

Frank asustado dice:

-No madre Ester, ¡lo juro no fui yo lo juro!

Will, reacciona muy molesto y le dice.

-¡Que lo sueltes viejo gruñón, suéltalo! y Brans responde enfurecido.

-¿Cómo me dijiste?… Ustedes dos son cómplices, ¡ustedes lo hicieron!

La madre Ester dice:

-Suéltalo Brans, los dos tendrán su castigo, ¡vamos, una noche a él cuarto de castigo!

Los niños asustados solo decían:

-¡No madre Ester al calabozo no!

Así lo llamaban los niños, un pequeño cuarto donde apenas podían entrar dos niños, con mal olor ya que los niños que pasaban la noche allí se orinaban por el miedo. Mientras la madre Ester responde:

-Al cuarto, ¡alguien tiene que pagar por lo que hicieron aquí!

Pero no fuimos nosotros responden los niños. Silencio ya es tarde, responde la malvada monja. Mientras todos  los niños del orfanato observan con mucho miedo, Will, le dice a Lanna:

-Cuiden de los niños tú           Angel y Leo, nos veremos mañana.

Lanna, responde.

-Y Leo ¿dónde está?

-Leo estaba con nosotros, responde asustado imaginando lo peor.

 Mientras siguen caminando con la madre Ester, will ve a Leo solo en una esquina, y Leo le muestra algo increíble. En su mano tenía una llave de la oficina de la madre Ester,” Leo aprovecho, la distracción y logró conseguirla. Will tranquilizándose con una pequeña sonrisa, sigue al cuarto pensando. Mañana será un gran día, Lanna con algo de miedo le pregunta a Leo y a Angel.

-¿Que hacemos chicos?... Will y Frank ya no están ¿y si los perdemos? Tengo miedo.

Mientras la pequeña Maya y jhon solo lloraban, Angel les dice:

-Tranquilos niños no pasara nada malo, estarán bien se los prometo esta noche vigilare yo y leo me ayudara.

Mientras, la madre Ester, con una sonrisa espantosa y vos tenebrosa les dice a will y Frank.

- Debieron portarse bien chicos.                         

Abriendo la puerta del pequeño cuarto les dice.

-Entren, “duerman bien chicos.”

Mientras lo dice se le ve una horrible sonrisa disfrutando el castigo que les está dando, cerrando la puerta, Frank solo observa como la luz se disipa quedando en completa oscuridad y en su mente el horrible y pequeño cuarto. Paredes de madera desgarradas y la puerta con puntas de clavo hacia sus ojos, entonces Will le dice:

-Tranquilo no nos pasara nada.

Will, como siempre preparado carga en su bolsillo un pedazo de alambre largo, con el cual amarra a tientas la puerta para que nadie la abra desde afuera. Mientras tanto ya en el dormitorio (a) Angel y Leo se preparan para la larga noche, Diana la ayudante de la madre Ester les dice con un tono de vos tranquilizador a todos los niños.

 -Apagando las luces, descansen niños.