✨XVIII✨

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Una vez que lowell cerró la puerta de la casa, se dirigió a la sala donde vio a cierta castaña doblar ropa recién lavada
-hola,¿ como vas?-
-compraste toda la tienda o que rayos -
-no fue mucho-
-si claro como no, pero como prácticamente cagas dinero no lo notas, pero como sea ya todos los biberones, chupetes y demás utensilios están limpios, las decoraciones están acomodadas en su cuarto junto con sus juguetes ya solo falta terminar de doblar esta ropa y guardarla en su closet- dijo terminando de enumerar la castaña

-wow gracias, iré a prepararle el desayuno para que ya despierte-
-creo que no va a ser necesario-dijo la castaña mirando el inicio de las escaleras
Lowell volteo y vio a su pequeña tallando uno de sus ojitos, se aserco a ella y la tomó en brazos
-Buenos días princesa - dijo lowell mientras le daba un beso en su mejilla y alejaba su manita de su ojito
-Buenos días dada-contestó la pequeña, en un tono infantil, hoy  había despertado sintiéndose un poco pequeña
Lowell al escuchar esto sonrió de una manera tan alegre

- ¿dormiste bien bebé?-ella no contestó solo asintio con la cabeza, y empezó a ver todo el lugar hasta que su mirada cayó en la castaña que estaba en el sofá, al verla se removió de los brazos de lowell intentado bajar-¿ey que pasa monita?
la pequeña solo apuntó detrás de él, el comprendió y río un poco - tranquila, mira ella es Olivia jones es una amiga mía desde hace mucho tiempo y también es mi secretaria-dijo mientras se asercaba a la muchacha para que se presentará
-hola bonita, ¿como te llamas? - dijo olivia mientras le acariciaba su mejilla, lo cual provocó que daisy se sonrojara de sobre manera

-me llamó d-daisy-contestó mientras apartaba la mirada ya que era la primera ves que una mujer le acariciaba así su cachetito
-pero que hermoso nombre tienes dulzura-daisy ante el apodo y el tono se sonrojo demasiado - Dios mio estas todo rojita me dan ganas de comerte-
Daisy se asustó un poco y sus ojitos se empezaron a llenar de lágrimas-¿ella va a comerme? - preguntó a lowell
-nonono aquí nadie comerá a nadie bebé, es solo una expresión tranquila, y tu piensa dos veces lo que vas a decir es pequeña no lo notas - dijo mientras abrazaba sobreprotectoramente a la pequeña
-lo siento pequeña no era mi intensión asustarte, ¿me dejarías cargarte? - daisy miró a lowell buscando su aprobación y al obtenerla estiró sus bracitos hacia ella, quien inmediatamente la tomó sin ninguna dificultad-dios mio pero si no pesas nada, y porque tiene estas vendas y moretones acaso no la has llevado a un doctor lowell-dijo totalmente molesta hacia lowell

-tranquila fiera logan ya vino a verla y ya dio un diagnostico dijo que estaba un tanto desnutrida sin embargo dedusco que por su complexión no se nota tanto pero aún así compre formula con nutrientes y le empezaré a dar una dieta equilibrada, también le he estado curando sus heridas y aplicando pomada en los moretones y mañana la llevaré al médico para que le hagan los análisis y descarten cualquier cosa-explicó lowell

-menos mal entonces ve a prepararle algo, a de tener hambre verdad que si corazón - daisy no contesto, su atención estaba más en el collar que la mujer portaba que en la conversación de estos-que te parece si ves la tele un momento en lo que yo ayudo a tu papi eh que opinas - la pequeña al escuchar tele le puso atención y asintio, luego olivia la dejó en la alfombra y prendio la tele, daisy mientras tanto aplaudía feliz por ver nuevamente un programa, olivia la dejo viendo los pingüinos de Madagascar mientras ella iba a la cocina

Una vez ahí se atrevió a hablar - ¿porque tiene su cuerpo tan lastimado lowell? -
Lowell quién estaba calentado el biberon de daisy y hacía un café para el contesto - mira sinceramente me enoja recordar el porqué pero no dejaras de joderme hasta que te diga, al parecer su padre fue quien la golpeó de esa manera, lleva maltratando la desde que tiene 12 años y ese degenerado a-

-wow espera como que desde los 12 pues cuentos años tiene-
-17- la castaña se quedó sorprendida porque daisy no se veía de esa edad-si lo se no se ve de su edad por eso la voy a llevar al médico-
- y sabes algo del padre?¿No lo buscaras?¿No lo matarás?-preguntó un tanto confundida
-por el momento no, quiero que ella esté primero 100 % recuperada tanto física como mentalmente ya después veré que hago, pero donde lo vea lo mato ahí mismo-contesto serio

-supongo que eso estaría excelente,bueno cuando quieras la puedes dejar conmigo lo sabes siempre llamame si ella necesita algo seré su tía consentidora claro que si-dijo feliz la castaña - sin embargo cambiando el tema tengo que irme, llevaré uno documentos a la empresa y de ahí tengo que volver a casa rosi debe estar esperándome, solo subo su ropita-
-o vale esta bien, cuando tengas tiempo junto con rosi podríamos salir y así ellas se conocen-dijo lowell tomando su taza de café junto con el biberon tibio de daisy y galletas
-me parece excelente-

Ambos salieron de la cocina rumbo a la sala una vez ahí olivia tomó la ropa doblada que había y subió las escaleras no sin antes darle una caricia a daisy en el pelo, mientras lowell dejaba en la mesa del centro el biberon y galletas de la pequeña
-cariño hora de desayunar-

Daisy ni siquiera lo miro solo siguió mirando tele, aplaudiendo cada que pasaba una escena divertida para ella, lowell río un poco y solo le aserco el biberon a su boquita para que lo empezará a tomar, daisy tomó con sus manitas el biberon y lo also un poco para estar más cómoda y lowell la cómodo bien de tal manera de que tuviera acostada tomando el biberon y viendo la tele para el la imagen era más que hermosa, escuchar las succiónes que la pequeña hacía con su botella, las risitas que de rependete emitía era más que hermoso, se sentía completo sin duda alguna ella era lo que necesitaba

Mientras tanto olivia quien venía bajando vio como lowell sonreía y supo que sería feliz por muy largo tiempo, esa pequeña de ahí le iba a dar color a su vida tan gris así que sin querer interrumpir tomó su bolso y salió de la casa.

Be my little Donde viven las historias. Descúbrelo ahora