"Todo el mundo es tan inestable como el agua"
Joseph Heller
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Cáncer es un chico el cual prefería pasarse el día en casa dormir, luego trabajar para volver y dormir. Muchos lo concideraban alguien aburrido, pero le daba igual, nada podía hacerlo salir de su rutina o al menos eso pensaba hasta que su hermano menor Piscis logró sacarlo.
Se encontraban en un parque de diversiones con atracciones que lo único que hacían en el cangrejo era querer volver a su cama y no levantarse más nunca de ahí. Todas muy peligrosas las cuales solo alguien con mucha adrenalina pudiera no trae en ellas y él definitivamente no era esa persona.
Tampoco sabía de dónde su hermano había sacado la idea loca de querer ir a un lugar así de peligroso. Comúnmente Piscis es un chico tranquilo, quien lamentablemente nació mudo, aunque muy bien conocía que su hermano nunca dejó que eso lo minimizará.
– Piscis creo que eso es muy peligrosos.
El de cabello azul cogió una libreta de notas y escribió un pequeño mensaje.
– No tengas miedo, es seguro –
– ¡¡¡No creo que eso se algo seguro!!!.
– No seas gallina –
– ¡Niño insolente!.
– Vamos –
Piscis sin dar más importancia se dirigió a una de las colas de los juegos, el cual daba vueltas una y otra vez. Cáncer cada vez que escuchaba los gritos de las personas miraba con más preocupación la fila avanzando. En su opinión el suelo es algo seguro, máximo tropezarse con una roca y ya.
Piscis le hace unas señales a su hermano indicándole que es hora de moverse, pero el pelirrojo no quería, principalmente al notar que le tocaba entrar al juego. El pez le hizo una señal al las personas de atrás pidiéndole que esperen. Le dió un empujón a su hermano haciéndole avanzar para montarse ambos en aquel aparato.
Cuando al fin el dúo había entrado se sentaron en donde le indicaron. Cáncer sin esperar mucho cerró los ojos, aunque dió un pequeño salto cuándo sintió que algo le aprisionaba una parte del cuerpo, ya habían bajado los hierros que los protegerían de una caída. El pelirrojo se aferró a estos como si de eso dependiera su vida, auque para él, de eso dependía su vida
Por otro lado Piscis estaba disfrutando el sufrimiento de su hermano, ya más tarde se burlará de él por la actitud del mayor. El difritaba ese tipo de cosas, no tenía amigos ya que casi nadie le comprendía o no tenían la paciencia necesaria para leer sus notas, así que iba a ese tipo de lugares solo. Se sentía triste al ver como siempre habían familias, parejas o amigos en los parques de diversión. Al final utilizando ese chantaje emocional logró traer a su hermano.
El juego empezó a funcionar, al principio iba lento, pero a medida que pasaban los segundo la máquina iba a aumentando la velocidad al punto de llegar a dar vueltas. Cáncer gritaba a todo pulmón, incluso parecía ser el que más gritaba.
– ¡PISCIS JURO POR MAMÁ QUE NO ME VOLVERÁS A CONVENCER!.
El peliazul saco su lengua escuchando lo que decía su hermano, mientras alzaba los brazos difrutando del momento.
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Nuevo comienzo
FantasyDoce chicos fueron elegidos para proteger al mundo y ser llamado los guerreros del Zodiaco, con diferentes habilidades cada cual diferente. Actualmente por problemas de que un mal mayor se acerca a la tierra hay que reunir a esos chicos y entrenarlo...