Capítulo 48

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Bélgica 1783

La chica bajo el signo Aries despertó debido al ruido de lo que parecía ser un gran golpe. Fue hasta la ventana y pudo ver como el sol se asomaba por el horizonte

- Creo que ya es hora de despetar -

Una sombra salio por debajo del frío suelo

- Señorita, aún no es hora del desayuno - dijo la silueta a un lado de la chica

- Lo se, lo se Pillton - dejo salir un suspiro - ¿escuchaste el ruido?

- No se escuchó nada en la otra vida señorita -

- Lo siento Pill, lo olvide -

- Jamas podría ofenderme señorita -

La chica le dedico una cálida sonrisa

- ¿Estas hablando con uno de tus espíritus? - dijo el chico bajo el signo Cáncer aún acostado en la cama

- Querido no quise despertarte - dijo acercándose a la cama para volver a acostarse a un lado de su esposo

- Esta bien ¿hablabas con uno de tus espíritus? - volvió a preguntar el chico

- Sus vidas y sus almas no me pertenecen, pero si hablaba con uno de ellos -

El chico solto un suspiró. Aries por su parte lo abrazó

- ¿Sucede algo? -

- No querida mía, solo estoy asustado de lo que pueda llegar a pasar - ella lo miro sin entender - después de esto, que si lo descubren al señor Kugler que ha sido tan bueno y carismático con todos nosotros, al dejarnos halogarnos en su humilde casa -

- No pienses en eso - dijo mirandolo a los ojos

- De acuerdo, pero aún asi estoy muy asustado -

La habitación quedo en silencio por unos minutos. Ella solo lo miraba, pero no una mirada cualquiera, si no una mirada que reflejaba seguridad en él, y el la miraba a ella con una mirada que generaba que la chica que sintiera protegida

- Creo que ya es hora de que me des un sucesor ¿no crees? - preguntó el chico

- Aún tenemos tiempo - dijo Aries sentándose en la cama

- Ya casi vas a cumplir 16 años -

- Si, en unos seis meses - lo miró - pero aún así si tanto lo tienes lo vas a tener

El chico se acercó a ella y empezó a besarla lentamente, pero luego el beso se fue intensificando

Pero alguien carraspeando su garganta los interrumpió, bueno a la chica

- Señorita, sigo aquí - dijo el espíritu parado al lado de la cama

- ¿Que sucede? - pregunta el chico confundido

- Mi amigo sigue aquí -

- Esta bien, entonces sera otra día - dijo el chico - ya vamos a bajar

- De acuerdo - dijo la chica con una sonrisa

La mayoría de los signos se encontraban en la primer planta desayunando

- ¿Como durmieron? - pregunto el dueño

Algunos respondieron un simple "bien", pero otros hicieron muecas, al parecer mas de uno no pudo conciliar el sueño

El desayuno paso completamente en silencio, un silencio bastante incómodo, nadie decía nada, y este silencio generaba que pudiesen escuchar las respiraciones de los demás

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