Se buscan vivos o muertos

Capítulo 03: Domar a una yegua = prueba de valor

NOTA: Luego de algunos problemas con mis archivos de texto, por fin puedo actualizar esta historia. En el documento original está terminada, así que los siguientes capítulos ya no tardarán tanto en aparecer como en las otras historias que tengo. Gracias por su lectura y paciencia. 
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Suyin Beifong se presentó antes de despedirse y les hizo prometer que visitarían su casa alguna vez, argumentando que eran unos muchachos muy simpáticos y podían ser amigos de sus hijos, quienes son como de la misma edad. Ella los trató como cercanos; aunque fuera una persona influyente de la región, así que les cayó bastante bien

Asami se aseguró de que les prepararan un baño y algo de comer a sus nuevos vaqueros antes de llevarlos a hacer el recorrido por los terrenos de la propiedad. Quiso ser considerada, así que decidió que ellos no comenzarían labores hasta el día siguiente, pero; si bien era cierto que debían pagar por el agua del pozo, la asaltó el pensamiento de lo que Korra le dijo:

"–No me molesta trabajar, especialmente si eso me deja a mano con usted. Aunque no puedo evitar pensar que nos resultó algo caro un poco de agua- "

De algún modo sabía que se estaba aprovechando de la necesidad de los jóvenes para ponerlos a trabajar en su granja; sin embargo, algo en su interior la llevó a pensar que era mejor acogerlos allí, darles un lugar donde quedarse, al menos por un tiempo y permitirles conocer el lado amable de su pueblo. El que tuvieran una labor sería una buena manera de que se ganen lo que les quiere ofrecer.

Inevitablemente, al tratar de encontrar la razón que le impulsaba a querer ayudar a los chicos, pensó en Korra

-Sin duda es la mujer más fuerte que he visto, pero me intrigan sus ojos tan azules, es la primera persona que conozco, joven al menos, de piel morena, con unos de ese color- Decía para sí misma –Esos mismos ojos, que me miraron con determinación, me dicen que son inocentes de lo sucedido a su patrón. Se veían tan sinceros y como si al mismo tiempo ocultaran algo-

- ¿En qué piensas, Asami? - Le pregunta Bolin interrumpiendo sus pensamientos

-Es cierto- Dice Korra –Desde que la señora Beifong se marchó y enviaste a las muchachas a preparar el baño has estado muy callada-

-Es sólo que aún no sé cómo hacerle saber a Tenzin lo de ustedes para que me eche una mano cubriéndolos- Respondió –Él accederá a decir que son sus vaqueros si se lo pido, el problema es que puede que hable con papá antes-

Korra y Bolin se miraron apenados, se sintieron como si estuvieran causando más molestias de las necesarias. Finalmente, ellos no fueron responsables de la presunta muerte de Amón, pero si del crimen por el cual son buscados, así que piensan en que Asami se está arriesgando con ellos.

-Mira, Asami, sé que quedamos en pagarte el agua con nuestro trabajo- Dice Bolin –Pero no queremos indisponerte con tu padre-

-Tiene razón- Agrega Korra –Sabes que somos fugitivos y con tenernos aquí nos ayudas, pero también corres un riesgo, no queremos eso. Debe haber otra manera en la que podamos saldar nuestra deuda sin...-

-Tranquilos- Interrumpe Asami –Yo hallaré la manera de hablar con Tenzin, además esta situación no es permanente. Si no es aquí ¿a dónde más pueden ir? -

La joven estaba en lo cierto, Korra y Bolin no tenían a otro sitio al que pudieran ir, tampoco había nadie más que conocieran en ese lugar. Una de las razones por las que el gremio de ladrones reclutaba niños pequeños era precisamente para crearles una gran dependencia y, para lograr esto, evitarles relacionarse con otras personas y conocer el mundo por sí mismos eran las principales estrategias.