capítulo 12

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Camila sonrió con el jugo de frutas que tenía en su mano mientras miraba su teléfono en el último mensaje que le había mandado la excantante. Desde la última conversación en la cascada, Lauren y Camila habían estado más cercanas cada vez más, ahora era normal entre ellas compartir mensajes de texto durante todo el día, llevar a sus hijos a casa de Los Jauregui y compartir una que otra llamada telefónica. Al principio, Camila no sabía cómo manejarlo, pero luego decidió simplemente dejarse llevar, pues ¿por qué complicarse tanto por una amistad? Ella sabía que con Lauren no tenía que comportarse como otra persona, con Lauren ella solo tenía que ser Camila, así como Lauren era solo Lauren cuando estaba con ella.

La Oncologa había dejado de estar tan a la defensiva, lo cual era un trabajo que ameritaba de esfuerzo, pero no sentía incómoda, ni presionada, Lauren solo se mantenía cerca de ella sin importar que algunas veces se le pusiera difícil y un tanto indomable.

" José Miguel está orgulloso de los avances de Valentino en el piano. " fue el mensaje que recibió en el pie de una fotografía de su hijo practicando en aquel momento con el hermoso gato de la exartista encima del instrumento.

" Tú y tu padre hacen un gran trabajo Laur, gracias por eso. "

Ella le contestó antes de dejar su teléfono a un lado para esperar su respuesta mientras abría con una pequeña sonrisa en su rostro los últimos estudios que tenía que revisar antes de ir a buscar a los chicos en casa de Los Jauregui. Eran los estudios de Max, los cuales Camila sabía que estarían perfectos, pues aquel último mes había estado excelente igualmente para ella, lo único que la había preocupados había sido la recaída de Olga, pero no había nada que no tuviese solución. Camila abrió el sobre ente sus manos pero lo que vio ahí, ella desearía jamás haberlo visto.

La cubana sintió su corazón deteniéndose, un fuerte nudo apretándose en su garganta y sus manos temblorosas. Las lágrimas inevitablemente comenzaron a correr por sus mejillas y los sollozos comenzaron a salir de sus labios.

Metástasis.

El cáncer había dominado el cuerpo de un niño de catorce años que tenía uns vida por delante, sueños que cumplir, metas y aspiraciones como cualquier otro chico de su edad. Pero la vida se rehusaba a darle la oportunidad de cumplir aquello.

¿Pero como? Si todo parecía estar bien, ¿Por qué tenía que pasar algo así? ¿Por qué?

Camila lanzó los estudios contra el suelo y lanzó todo lo que de encontraba encima de su escritorio antes de tirarse de nuevo a la silla y esconderse entre sus brazos solamente a sollozar porque por más que ella sabía que había gente que se había curado de la metástasis, en un caso como este, era demasiado complicado. Camila quería creer, quería confiar en que las cosas saldrían bien, pero no podía engañarse a si misma, porque lo que aquellos resultados arrojaban, no eran más de seis meses... Y era lo más difícil que a Camila le había pasado.

" Así es Valentino, bien hecho, lo tienes. " Lauren decía muy dulcemente escuchando la melodía que el niño estaba interpretando con mucho cuidado demostrando que estaba aprendiendo, que estaba poniendo mucha atención a lo que Lauren y su padre le enseñaban "Maravilloso, estoy orgullosa de todo lo que has avanzado durante esta semana Valen. " Ella lo felicito mientras aplaudía con suavidad cuando terminó la canción.

" Muchas gracias por todo Lauren. ¿Tú crees que lo domine rápido? " El chico le preguntó y la ojiverde le sonrió.

" Tú puedes hacer todo lo que te propones Valentino. " Ella le recordó con una suave sonrisa que el correspondió justo en el momento en el que Lauren recibió un mensaje de su madre " Disculpa. " dijo antes de alejarse con suavidad para abrir la conversación.

La vida es hermosa (camren)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora