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—¡SAN ME ESTA LLAMANDO! ¿QUÉ HAGO?— Wooyoung señalaba su celular con terror.

—¡Contestarle! Dale Wooyoung, hace rato andabas llorando porque te cancelo y ahora que te llama le temes. — lo regaño, mientras que el otro con un puchero y su corazón en su mano contestaba la llamada.

— ¿San? ...oh? Ah.... — Yeosang miraba sin entender las expresiones de su amigo, ya que iban de una sonrisa, aún puchero, de soltar risas a llantos falsos. Todo muy intenso.

Le daba curiosidad saber cómo el y San se conocieron, sabía que su amigo estaba encantado por la personalidad y mejor dicho por la físico de San mucho más antes de conocerse, solo pensó que era atracción sexual y luego se le pasaría pero nunca se imagino verlo tan —TAN— sumergido en una relación con muchos sentimientos entre medio, pero también le gustaba este Wooyoung, feliz y risueño.

Salió de su mundo cuando escucho un llanto lastimero. Levantó su vista observando a su amigo, ¿Wooyoung llorando?

- ¿Qué pasó? - se acercó a su amigo, pero no recibió una respuesta, solo unos brazos lo rodearon con fuerza. - woonie...

- S-san e-el— Wooyoung trataba de calmarse pero las lágrimas lo hacían desesperar aún más, además que sentía un nudo en su garganta. Yeosang tomó su mentón, y limpio las lágrimas dándole pequeñas caricias en su cabello como el siempre le gustó, Wooyoung siempre le gustó ser consentido y ser tratado con dulzura, y si eso necesita su amigo se los daría.

- Tranquilo... Respira ¿Si? Inhala-Exhalas...- trató de ayudar con sus manos y con su misma respiración, Wooyoung trataba de imitar a su amigo.

A Yeosang le dolía mucho verlo así, nunca lo vio en un estado tan vulnerable como en este.

- Sa-nnie... No ¡No! Sa-n e-el ter-mino — tomo un gran bocanada de aire y subió su mirada chocando con la de su amigo - conmigo...

Asombrado lo atrajo hacia él, dejando que su amigo suelte todas las lágrimas que quiera.

Luego de un rato, ya hace bastante había llegado la noche, habían rechazado por esta vez la cena y tratando de no alarmar a su abuela Yeosang comento lo ocurrido —obvio con aprobación de su amigo—, recibiendo un regaño por no comer su cena, pero avisándoles que si llegarán a tener hambre, les dejaría su porciones en la mesada de la cocina.

- ¿Woonie no me quieres contar cómo fueron las cosas?

En este momento lo mejor que podía hacer es saber mejor es saber una respuesta más explícita, su amigos a veces podía exagerar mucho las cosas. O cambiar las versiones, haciéndolas ver de una manera diferente.

Wooyoung se giró con un puchero en su boca, luego bajo su mirada tratando de buscar las palabras correctas para contarle a su amigo.

- Sannie... digo San, el me estaba diciendo que se sentía muy mal porque en verdad quería verme y le pregunté ¿Por qué no nos vemos? ¡Y el dijo que no! Le pregunté de nuevo ¡¿Por qué no!? Y solo me respondió con un "tomemonos un tiempo" - en voz aniñada- ¡Es que no entiendo! ¿¡Por qué quiere un tiempo!? ¡Si estamos bien! - renegó dando patadas al aire.

- Okey okey trata de calmarte, lo que me estás diciendo es que solo te pidió un tiempo - respiró hondo- ¿pero no te termino? - recibió un asentimiento como respuesta. Quería ahorcar a su amigo ahí mismo.

- Lo que sea no me importa ese estúpido. - se dió la vuelta - me voy a dormir, porque estoy cansado. Wooyoung ahora está disponible. - hubo segundos de silencio hasta que se escuchó unos inaudibles llantos. - Quiero un abrazo Sangie...

Yeosang solo lo miro con lastima y lo abrazo por detrás, dándole un pequeño beso en su mejilla acompañado con un susurro de buenas noches, descansa woonie y no pienses mucho.

Domingo no paso tan lento como pensó, además tener compañía de un Wooyoung malhumorado metido en su casa solo por primera le dió ganas de matarse. No sabía que tan difícil era cuidar de una persona con el corazón roto, la cosa es que a Wooyoung no le habían roto al corazón pero bueno no viene al caso. Ya que solo en un despertar de ojos ya estaba en su aula, con la cabeza oculta en sus brazos aplastado cualquier papel arrugado de su banco.

- Vamos tampoco exageres Wooyoung ¿No has hablado con San aún? - pregunto Yunho con una sonrisa.

Sip Yunho ya sabía, no era de esperarse el había ganando sus confianza es que ¿A quién no le agrada Yunho? A veces Yeosang se sentía un poco incómodo ya que el mayor aún seguía gustando de el, ya que se lo había confirmado hace poco. Pero respetaba mucho su decisión.

¿Por qué se enamoró de dos hermanos iguales y no de un chico encantador como Yunho?

- Yuyu... yuyu~ Si San no me dijo sus razones YO no se las voy a pedir, no me voy a ser rogar. - puso los ojos en blanco, dibujando corazones partidos en dos en su banco.

- siempre fue así de...

- ¿idiota?

- No...em.. - incómodo busco la palabra correcta.

- ¿Estúpido?

- ¡YEOSANG! - grito exaltado.

- ¡No me grites es que eres un resentido!

- Resentido ¡Ja! - se levantó de su asiento - No me busques, me se cuidar solo. Resentido me llama ja, habla el que se enamoró de dos hermanos. - susurró por debajo.

- ¿No deberíamos de decirle que todavía no empieza las clases? - miro la salida en dónde se había anteriormente Wooyoung.

- Déjalo, luego volverá. - respondió Yeosang.

Los hermanos Park (seongsang)[EN PAUsA :D]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora