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– Dakaray le va a dar algo si sigue practicando sin descanso

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– Dakaray le va a dar algo si sigue practicando sin descanso.

– Es la idea.

El chico suspiró mientras se acercaba  su compañero y esquivaba el posible golpe que le iba a dar ya que acercarse a Dakaray mientras practicaba no era lo más seguro del mundo.

– Pare, hay mil formas de deshacerse del estrés y que lleve más de una en esto no es una.

– ¿Daka está estresado? ¿¡Quién le hizo daño a mi niño!?

– ¿Por qué supones que alguien me hizo algo? —Preguntó mientras era guiado a una esquina del estudio para su supuesto descanso.

– ¿Fué Jung Hi? ¡Le haré saber a ese niño que no debe de meterse con mi bebé!

– ¿Jung Hi? —Preguntó el otro hombre en la habitación ladeando la cabeza.

– Nami ¿No tienes algo mejor que hacer? ¿En tu casa? —Preguntó Ray con intención de correrla del lugar y que no metiera la pata diciendo algo innecesario.

– ¡Nop! ¡Tu papi se está encargando de todo!

– ¿Papi? —Preguntaron los dos mirando extrañados a la mujer hasta que el pelilila captó que se refería a su esposo.

– ¡Vamos! ¡Dinos que te hizo ese pompón rosa andante!

"Exclamó quien tiene el cabello del mismo color e incluso más alborotado que él" Pensó mientras suspiraba y mandaba a los dos a acercarse mientras él realizaba estiramientos.

– Joe no puedes decirle nada a nadie —El pelirrojo asintió. Era un compañero muy cercano a ambos y confiaban en que el chico no iría contando la vida privada de otros por allí— Tuve un pequeño incidente con Jung Hi quien podría decirse que es un amigo íntimo.

– Con derechos.

Antes de que la mujer quedara con un teléfono clavado en su cráneo Joe pidió que continuase ignorando el comentario antes dicho.

– Y quedamos en hablar para resolver el problema.

– ¿Y estás estresado por eso?

– Me saca de quicio.

– Ajá, ¿Y aún no le ha contactado para verse?

Negó con la cabeza mientras le hacía señas a la mujer para que le ayudara con un ejercicio.

– ¡Cómo puede hacer esperar a mi precioso Daka! ¡No merece tu valioso tiempo!

– Señorita Nami tenga cuidado, podría lastimarlo —Le dijo su compañero viendo como hacía más fuerza de la necesaria y parecía que el pelilila se iba a romper en cualquier momento.

– ¡Tú tranquilo! ¡Daka es más flexible de lo que piensas!

Aún viendo ese extraño tipo de tortura asintió para pensar en qué decirle a su compañero.

Annoying alpha || Love UnholycDonde viven las historias. Descúbrelo ahora