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Las fiestas de Sam, eran las mejores, era el chico más adinerado de la escuela y para nuestra suerte iba en él mismo curso que nosostros.

Pero hubo una en especial.

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-Harry apúrate- gritaba Lou al pie de la escalera en la casa de los Styles

Harry no respondió.

-Harry - volvió a gritar Lou subiendo las escaleras.

-Harry ya apurate - abrió la puerta de la habitación del ojiverde -¿qué haces? - preguntó Lou viendo a su amigo vestido de traje -Harry es una fiesta no una cita romántica -

-solo quiero que Carla al fin me vea -

-ver mis bolas, a ver que tienes en el ropero - cruzó la habitación lou y se puso a buscar y devolver entre la ropa

-aquí tienes - dijo Louis poniendo sobre la cama unos jeans con una camisa negra -hasta el el tercer botón, no querrás parecer vestido por tu madre - agregó el ojiazul antes de salir de la habitación -¡y apurate!- gritó bajando la escalera.

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-oh por Dios, es más grande de lo que me acordaba- dijo Harry viendo la enorme casona que tenían adelante

-bueno... ...a divertirnos - palmeó Louis la espalda del ojiverde

La casa tenía miles de luces, la pileta estaba llena de chicos con cervezas y chicas en biquini, en la galería había una gran mesa llena de comida y bebida: pizzas, sándwiches, papitas, maní, queso, nachos, salsas, cervezas, gaseosas y combucha.

Louis y Harry tomaron y bailaron hasta no poder más, hasta que a las 12:00 Harry miró su reloj y se dió cuenta que ya tendrían que volver a sus casas en caso de no querer que sus madres los retaran, así que comenzó a buscar a Louis, hasta que lo encontró con una cerveza en la mano sentado en la barra.

-Lou ya tenemos que irnos- dijo Harry tomándolo del hombro

-un rato más - pidió Lou, sus ojos estaban hinchados

-no ya es tarde, nuestras madre nos mataran - negó el ojiverde

-vamos Hazza, no seas aguafiestas -

-Louis -lo reprochó el ojiverde

-está bien "mamá"- dijo Lou sacando sus llaves torpemente.

"De verdad está borracho" pensó Harry

Con esfuerzo Harry logró hacer que Louis subiera al auto, rodeó este y abrió la puerta del conductor pero cuando iba a sentarse vió que Lou ya estaba en el lugar

-Lou sal, estás borracho no puedes conducir - lo retó Harry

-no, no saldré, conduciré yo - se negó el ojiazul

-Louis, ya basta córrete- dijo Hazza empujando levemente al ojiazul, el cual respondió con un fuerte golpe en el brazo del ojiverde

-¡te digo que no Harry! ¿QUE PARTE NO ENTIENDES?- gritó Louis

-sabes que me tienes cansado, hacé lo que quieras, prefiero ir caminando!!! - dijo Harry cerrando la puerta de un portazo dejando a Louis solo, encendiendo el auto y avanzando por la calle.

La vista de Louis era muy pobre en ese momento, podía ver un par de manchones de colores y a penas el manubrio haciendo que cada tanto el auto se desviara.

Pasó varios semáforos en rojo, aunque para su suerte en todos las calles estaban vacías.

Su cabeza le daba vueltas.

La luz roja apareció de nuevos y otra vez fue ignorada por el joven, el cual fue golpeado fuertemente por otro vehículo que venía del lado izquierdo.

Y entonces todo se oscureció...

My MemoriesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora